Futuro

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Amores, recuerden que Wattpad me cambia algunas palabras por si no es que en algún momento éstas salen de contexto. Buena lectura :)

Atenea

Tomo el anillo en mis manos sin poder creer lo que acaba de ocurrir. Lo observo por todos lados y es realmente de mi gusto, de seguro Katherine tiene que haber metido su cuchara.

-También hay diamantes más grandes, más pequeños...-

Intento decir algo, pero es que me ha dejado tan sorprendida que me es casi imposible.

No es como que sea de las que sueñen con casarse, tener hijos y morir sintiéndose una mujer "realizada".

Pero tampoco es como que sea algo que estuviera esperando, ni si quieras somos pareja o algo así.

-Atenea di algo que me estoy sintiendo realmente preocupado. -

-Francesco yo... yo no sé qué decir... esto...-

-Entiendo, fuimos muy rápidos...-

- ¡Te dije que no aceptaría! Pero eres tan insistente por la mierda Morello. - entra Nicholas agitando sus brazos y lo siguen todos los demás con cara de molestos y decepcionados.

-Es una mocosa, quieren atarla a los veinte años, claramente se negaría. - Yong...

-Por eso yo no le pregunte y la case a la fuerza, tuvimos que hacer eso. - obviamente Kadir se roba el momento.

-Joder Atenea, eres una desconsiderada, tuve que robarle el anillo de a tumba a mi abuela. - exaspera el británico que es el que más mal se encuentra.

- ¿Sabes? puedes irte a la mierda, no rogare por tu amor. -

Se dirigen a la puerta con sus mandíbulas tensas y sus miradas de desaprobación.

Me dejan muda ante tanto lloriqueo y ni si quiera pude decir algo, pero si creen que se pueden retirar asi como si nada después de la propuesta, están muy equivocados.

- ¿Dónde creen que van con mi anillo? - pregunto desconcertada, porque ni si quiera me dejaron ponérmelo.

Como la película del exorcista giran su cabeza casi sacándose el cuello para mirarme con sus ojos casi saliendo de sus orbitas.

- ¿Aceptas? -

-Kadir, ni si quiera me preguntaron directamente si quieran que sea su prometida. -

-Yo sabía que ibas a aceptar. - dice Nicholas con una sonrisa de oreja a oreja.

-Entonces pequeña, ¿te gustaría ser la reina de las mafias? - pregunta Alexander acercándose a mí con un brillo en sus ojos que daría lo que fuera para verlo más seguido.

-Mmmm... déjame pensarlo... ¿me dejaran poner música en toda la casa cuando yo quiera? -

-Aunque sean las cuatro de la mañana amore mio. -

-Entonces ven acá y pon el maldito anillo en mi dedo, antes de que me arrepienta de soportar sus ronquidos. -

-Eres una descarada Dimou, eres la única que ronca de los siete. -

-Cállate Kadir. -

Miro como el italiano se acerca para levantar mi mano e introducir la joya en mi dedo.

Se lleva mi extremidad a sus labios y besa mis nudillos con galantería, recuero la primera vez que lo vi y sigue siendo el mismo coqueto.

-Te queda precioso muñeca. - susurra el más joven de todos.

-Es porque viene de ustedes...- camino hacia donde se encuentran lo demás y los miro con lágrimas en mis ojos - todo de ustedes es lo que necesito... y no saben cuánto me dolió esperar una muestra de amor. Aunque jamás lo aceptara. -

DIOSADonde viven las historias. Descúbrelo ahora