Capitulo LIV

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Esta situación fue extraña en su opinión.

"Entonces ¿iras con Madara?" pregunto Tajima mirandolo con ojos serios.

Ahora que ya a habido un alto al fuego entre el Clan Senju y el Uchiha y se a dado un poco de tiempo para adaptarse a esta extraña situación entre las dos familias, los Senju ofreceran un tratado de paz lo que llevara en un tiempo a la construcción de Konoha.

"Entiendo que quieras mi opinión sobre las partes del tratado" dijo Obito seriamente ignorando el hecho de que Tajima era el lider Uchiha y nadie debia hablarle asi, pero Obito no inclinaria la cabeza ante nadie y por lo que pudo ver el mayor parecia divertido y a gusto con su comportamiento "pero no veo porque tengo que ir yo cuando ya tienes a personas más experimentadas"

"Hay es donde te equivocas" Tajima arqueo los labios y señalo a los documentos apilados en su escritorio "estos son los contratos que tu has hecho con los nobles de la capital para el Clan Uchiha asi como los tratados de comercio con otros clanes y puedo decir que siempre encuentras aberturas en cada uno y las aprovechas ¿o me equivoco?"

Los ojos de Obito se entrecerraron levemente "es asi"

Los ojos de Tajima brillaron con triunfo "Con el Clan Yamanaka fuiste capaz de convencerlos de venderte plantas venenosas con un descuento del 15%, mientras que estafaste a varios de los jefes comerciales de la capital siendo en especifico a los que se dedican al area de vestimenta, ademas de que conseguiste un contrato beneficioso con el trio dorado de la capital, las familias Hiromasa, Yosuke y Okura" la sonrisa de Tajima se volvio salvaje pensando en cuanto estaba mejorando su Clan economicamente desde que la familia de Obito se hizo cargo de ese ambito.

Obito suspiro resignado ya sabiendo que Tajima no lo dejaria escapar de esto "ire entonces"

"muy bien" Tajima asintio felizmente y lo miro con ojos serios "tus habilidades en los negocios son sin duda las mejores que e visto en mucho tiempo, no solo porque eres capas de conseguir los mejores beneficios sino tambien porque sabes como actuar y hacer que bailen a tu ritmo, asi como tambien  conoces los limites que nunca debes cruzar" se cruzo de brazos frunciendo el ceño levemente "eso es lo que te hace unico" lo miro con ojos afilados "porque a diferencia de los idiotas que tengo por consejeros tu sabes cuando detenerte y controlar tu ambición, sabes cual es el limite...pero sobre todo tu sabes como controlar a la gente como unas simples marionetas" el Sharingan brillo levemente y siseo en voz baja "No se como nadie se a dado cuenta, pero yo lo veo en tus ojos. Al igual que tu abuelo y tu madre tu tambien eres un monstruo vestido de oveja que se devorara a sus presas sin dudar

Obito ladeo la cabeza y sonrio, ¡Oh! el sabia que Tajima era interesante...pero esto demuestra que el hombre era más que eso "que curioso y yo pense que me estaba ocultando bien"

Tajima le sonrio, una sonrisa con muchos dientes "oh realmente lo hiciste, sin duda puedo ver porque a mi hijo le encantas tanto" asintio con aprobación "eres practicamente un ser que grita peligro, tu eres un depredador y a los Uchiha nos encanta el peligro" Tajima suspiro exasperado "en especial a Madara, lo juro ese chico realmente no conoce limites y ahora quiere cortejarte a ti, la persona que practicamente domina el inframundo y el mercado negro, dios se que mi hijo es un idiota pero tratar de conquistar a la persona más peligrosa del mundo" Tajima suspiro "...a que lata"

Obito se habia sonrojado tan pronto como escucho que Madara queria cortejarlo y no pudo evitar el hecho de que su Omega practicamente cantaba de felicidad.

Tajima miro directo a los ojos del menor "pero sin duda lo apruebo"

Obito parpadeo "eh" eso realemente no lo esperaba.

"Tu eres un bien para mi hijo"  Tajima sonrio, no era como las sonrisas anteriores, esta era suave y ligera como si fuera una sonrisa secreta "desde que te conocio no a hecho otra cosa más que mejorar, no solo en el campo de batalla sino tambien en el Clan y con su familia"

"Yo no e hecho nada en realidad" Obito dijo sinceramente, el en realidad no lo habia hecho solo habia pasado tiempo con Madara en siertas ocasiones, pero no cree que en realidad haya hecho los milagros que dice Tajima.

Tajima se levanto de su asiento y rodeo su escritorio "estas equivocado" acaricio la cabeza de Obito con suavidad "tu sola presencia en este mundo hizo que Madara cambiara"

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Al final Tajima le avizo que las conversaciones del tratado de paz con los Senjus seran dentro de 3 dias..y Obito seria requerido para la reunión con el lider del Clan Senju y sus hermanos como el que elaborara el tratado y las condiciones.

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El viento entraba fuertemente por las grandes puertas, la oscuridad cubria el exterior, la luna oculta por las nubes negras de las tormentas sin embargo, si se obserbaba con atención se lograria ver los cuerpos esparcidos en las escaleras.

Suaves pasos resonarón por el lugar.

La sangre pintaba los suelos, en una gruesa capa parecida a una alfombra.

Los cuerpos deformes se apilaban contra las paredes, varios miembros humanos colgaban de las fuertes vigas de madera.

El carmesi goteaba como una suave llovizna, acariciando con delicadeza las mejillas palidas de la unica persona de pie en el lugar.

La figura avanzo hacia la estatua de piedra que estaba en el centro, tenia la forma de una hermosa mujer con rasgos delicados y largo cabello.

"Amaterasu, La diosa del Sol" susurro la figura en voz baja,

La sangre escurria desde lo alto de su cabeza, pasando por la mejilla de la estatua y callendo por su hermoso kimono.

"Me vas a maldecir por asesinar frente a ti y ensuciar tu templo sangre humana sin siquiera pensarmelo dos veces" limpio su katana con una tela "puede que haya renacido y tenga una segunda oportunidad en la vida pero..." miro los ojos dorados de Amaterasu "No soy un heroe" saco una moneda de oro de su pantalon "tratare a la gente con el respeto que se merecen y le dare a los traidores y a esas basuras el castigo que se merescan" lanzo la moneda a los pies de la estatua en una pequeña ofrenda "ese es el tipo de persona que soy, este es el camino que elegi para mi" se dio la vuelta caminando hacia la salida.

Afuera del templo las nubes empezaron a despejar el cielo y la luna ilumino la noche.

"Si vas a condenarme"

La figura se detuvo en la entrada, la amatista brillando contra la luz blanquecina de la luna, la plata que adornaba su cuello brillaba de manera deslumbrante.

"hazlo cuando mis objetivos se hayan cumplido"

Con eso dicho Obito desaparecio en un destello.

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El tenia una reunión a la que asistir con los Senjus mañana y no pensaba llegar tarde.

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Uniendo lo PerdidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora