15 AÑOS DESPUÉS
-primer ministro, ¿qué le hace pensar que se quedará en el trono hasta que muera? -Preguntó el secretario.
-¿qué le hace pensar a usted que no puedo cambiarlo por otro mañana mientras lo entierro a usted donde nadie lo encuentre? Respondió de forma arrogante.
-he vuelto, -dijo un joven alfa precioso de tez morena clara y cabellos cortos.
-¿cómo te ha ido? Preguntó el primer ministro.
-¿realmente te interesa? Respondió Nam con voz de mando.
-ordena que me sirvan en mi habitación, estoy entrando en celo, no quiero interrupciones.
Namjoon se dirigía a sus aposentos cuando alguien lo interrumpió en su camino, seguidamente lo tomó del cuello hasta dejarlo inconsciente.
-¿algún problema con eso? ¿por qué no se van a meter a otra parte? -Dijo el príncipe a los presentes.
Nam cerró la puerta de su habitación y se dejó caer en la cama; después de quedarse boca abajo un momento, se volvió a levantar, buscó en una caja bajo su cama y sacó aquel libro viejo de su infancia.
Lo observó y lloró en silencio, recordó a aquel niño que le había causado pensamientos tristes toda su vida y peores cada vez que entraba en celo; grandes lágrimas recorrían su rostro bello, su aroma a bosque y manzanas salió más fuerte, aquello le molestaba, así que se inyectó supresores para evitar inconvenientes.
Le gustaba dormir con el libro entre sus brazos, eran una pequeña parte que aún conservaba de su niñez pura e inocente, recordando a su primo Jimin y sus juegos, y el rostro del niño que vio irse prisionero. "¿habrá sobrevivido? "
Aquella duda no lo dejaba jamás en ninguno de sus días.
Le daba paz tener aquel libro cerca, así que a menudo lo sacaba para poder conciliar el sueño.
A la mañana siguiente una carta llegó para él.
-príncipe, se que merezco la muerte por interrumpir su celo, pero esto es de urgencia.
Namjoon le dio una mirada asesina llevando su mano al arma de fuego que colgaba debajo de su ropa.
-¡dime el nombre de quién la envía y quizá te perdone el tiro en la pierna!
Aquel hombre se tiró al suelo haciendo reverencias pidiendo perdón.
-Jimin, su majestad, solicita que nadie sepa que ha enviado esto, ni su padre.
Nam sintió algo en su interior, dio las gracias y se encerró en su habitación.
"querido primo:
Lamento no poder haber escrito antes, mi padre me reclutó para ser un soldado élite, quitándome mi nombre y puesto, por eso nadie sabe quién soy, sufrí como cualquier otro; siempre me mantiene de un lado a otro, me aleja cuando tu vienes, se que él es el culpable de tus desgracias, podría jurar que él causó daño a tus padres, no te pongas de su lado; estoy haciendo algo grande aquí, quiero que vengas si puedes, así podré contarte de que se trata.
Se que estarás conmigo cuando lo sepas.Tu primo Jimin
El mensajero caminaba tranquilo al no recibir un castigo, al pasar frente a un salón del palacio, alguien lo alcanzó con sigilo y lo tomó con fuerza golpeandolo dejándolo inconciente; su cuerpo fue arrastrado hacia una esquina; el causante de aquello se quedó esperando a su siguiente víctima.
Namjoon salió de su habitación, su celo había terminado; caminó decidido, iría a buscar a su primo esa misma tarde, una sonrisa surco sus labios dejando a la vista sus hermosos hoyuelos.
Sin saber en que momento, un golpe fuerte impactó en su cuello, intentó defenderse pero unas manos conocidas le sujetaron.
-¡es una pena que aquí termine tu existencia como príncipe, sobrino querido! No me importas en lo absoluto, se que aprendiste cosas prohibidas. Desde hoy quedarás fuera de mis planes.
El príncipe Kim Namjoon X cayó desmayado escuchando por última vez la voz de su tío, el primer ministro.
El príncipe despertó por fin; hacía calor y no llevaba toda su ropa puesta.Levantó sus manos y las vio cubiertas con vendas.
"¿por qué estoy vendado?" se intentó sentar pero no pudo, estaba débil y con dolores en todo el cuerpo; su aroma a bosque y manzanas sobresalía en todo el lugar.
Como pudo observó su cuerpo y a su alrededor.
Pudo descubrir que tenía heridas por todas partes, estas estaban vendadas.
"¿por qué estoy golpeado y herido?"
Aquella no era su habitación de Palacio, "¿Dónde estoy? "que es este lugar"-¿dónde estoy?-Gritó.-¿Quién me ha salvado? ¡no puedo moverme!- Dijo con pánico.
Un fuerte aroma a caramelo y vainilla lo invadió, jamás había sentido algo tan dulce y tan atrayente. Nam inhalo aquel aroma deleitandose en el.
Su lobo se revolvió en su interior.
Huele a Omega, mmmmUna pequeña puerta se abrió y un animal raro cubierto de pelo café entró.
Namjoon gritó fuerte al ver que aquel animal se había acercado a él lamiendo su mano, intentó alejarse pero su cuerpo no respondía.-¿qué demonios?... Dijo Nam cuando la puerta fue abierta dejando entrar la luz del sol y a un joven alto y esbelto con un recipiente en sus manos.
¡Huele delicioso!
"callate tonto" "no ves que no sabemos donde estamos" pensó Nam.
Su lobo se había vuelto loco.
"nunca me hablas, nunca sales, y ahora ¿si me hostigas?"
Los detalles de aquel joven no pudieron observarse con claridad al estar a contra luz, la mitad de su rostro estaba cubierto por un pañuelo y un extraño gorro le cubría la cabeza dejando a la vista solamente sus ojos.
El viento le hizo saber a Nam que de aquel joven se desprendía el aroma a caramelo y vainilla: "es un Omega"
¡Sí, es lo que dije!
"cállate lobo, sigue mudo como estabas"
-¡Rj! Sal de aquí,- dijo el joven con una voz melosa.
Aquel joven no dijo más, en silencio se acercó a Namjoon con cautela; dejó a un lado el recipiente con vendas y revisó sus heridas cambiando los vendajes y las sábanas que lo cubrían.
-¿quién eres? ¿dónde estoy? ¿por qué no me hablas? ¡Contéstame!
Aquel joven volteó a verlo por un instante, sus ojos pequeños café oscuro, rodeados de grandes pestañas y cejas oscuras sobresalían en su tez blanca.
Algunos cabellos castaños salían de su extraño gorro, solamente eso era visible de su rostro.
Aquel chico no dijo nada y salió rápido de ahí.
Ya estando fuera soltó el aire que había estado sosteniendo, se sentía tímido, el aroma de aquel alfa lo había hecho perder la cordura por un instante.
-Rj ven aquí pequeño,-dijo llamando a su perro.
-he estado tan sólo aquí afuera que me es imposible pensar que otra persona haya salido con vida de esa asquerosa ciudad, me asusta que sea alfa.Seokjin suspiró con nerviosismo; una mezcla de felicidad y miedo lo invadía.
-siempre llegamos tarde cuando las víctimas ya han muerto, pero este joven alfa se salvó. Estoy feliz por eso, Dijo.
El pequeño perro café movió la cola de felicidad ladrando y saltando alrededor.
ESTÁS LEYENDO
Serendipia (Namjin Omegaverse)
FanfictionSeokjin un pobre omega curioso aprende sobre la historia prohibida del pasado lejano de la tierra; él vive en la ciudad de los sobrevivientes de las castas más antiguas: alfas, betas y omegas. Namjoon el alfa sucesor del dirigente de la ciudad de...