Capítulo 14

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Jimin se asombró al escuchar aquello, no sabía que pensar ante todo eso; él recordaba la pasión con la que Namjoon hablaba del mundo exterior, ahora no sabía si estaba vivo, encerrado, exiliado o tristemente muerto.

—¿entiendes que lo que me has dicho es demasiado peligroso? No quiero someter a la población a más guerras sin sentido, eso sería ocacionar lo que tanto hemos evitado a través de cientos de años.

—no Jimin, nuestra rebelión no es con armas, es con astucia sin tanto ajetreo, es enseñar a la población la verdad de las cosas.

—el pánico no es una mejor opción y lo sabes, respondió Jimin.

—Jimin, no es necesario, tenemos varios planes trazados, en nuestro equipo principal hay personas importantes, no somos un puñado de locos. Debes entender eso.

—piénsalo, no estamos obligandote, queremos tu apoyo, esta ciudad va en decadencia, tu lo sabes mejor que nadie.

Jimin pensó un momento y añadió: —iremos con el informante, depende de lo que haya sucedido con el príncipe entonces tomaré una decisión. Antes no.

Los tres jóvenes salieron a la calle solitaria, la claridad iba dando paso a la noche.
El uso de capuchas y de supresores no dejaba rastros del aroma de nadie para no ser descubiertos.

Llegaron a una pequeña puerta, Taehyung se acercó y tocó la puerta.

Una alfa anciana salió.

—¿a quién buscas? Dijo seria.

—busco a mi compañero de trabajo, alguien envía un mensaje para él.

Unos minutos después alguien preguntó tras la puerta con voz grave.

"y abrió sus alas..."

—volando libre hacia la nada, respondió Taehyung.

La puerta se abrió, un joven alfa de piel blanca y boca fina salió a recibirlos.

Su aroma a chocolate amargo y nuez se sintió en el ambiente.

Jimin sintió aquel aroma y se deleitó, jamás había olido nada igual.

—¿qué te trae por aquí Kim? Preguntó.

—ya sabes, cosas que nos interesan, dime algo y quedaremos en paz, respondió Taehyung.

—tu causa no me importa, ya te dije, respondió el alfa.

—acuérdate que tu deuda ha sido pagada dijo Tae.

—ya, esta bien me parece justo. Dijo el alfa convencido.

El alfa salió de su casa al lado de Tae y no se esperó que dos hombres se pusieran detrás de ellos.

—¿por qué has traído seguridad? Preguntó.

Tae sonrió con gracia.

—No es mi seguridad, cuando sepas quienes son, quizá te unas a nosotros.

Jimin y Hoseok se observaron y sonrieron sin sonidos al escuchar hablar al informante.

Llegaron a un pequeño lugar de descanso y se sentaron frente a frente los cuatro chicos.

—él es el jefe, Jung Hoseok su acompañante es el futuro primer ministro de la nación Park Jimin.

Ambos chicos se quitaron la gorra que cubría su rostro.

El alfa se puso de pie he hizo una pequeña reverencia un tanto sonrojado.

—mi nombre es Min Yoongi, una disculpa.

Jimin y Hoseok se pusieron de pie indicándole que se sentara.

Yoongi y Jimin cruzaron una mirada fugaz demasiado intensa, el aroma del alfa le había atraído poderosamente.

—tenemos una pregunta, dijo Jimin.

—tengo información precisa, señores; soy el guardia real del primer ministro por las mañanas, sin embargo hace una semana que estoy de vacaciones.

—no importa Yoongi, dijo Hoseok, —la información que se requiere es de hace unos 20 días atrás.

—seamos claros, queremos saber por qué el príncipe no está en el palacio, y de paso invitarte a unirte a la causa, tu padre era de los nuestros.

Hoseok lo observó esperanzado.

—futuro primer ministro, yo no puedo hablar de su padre en su presencia, presiento que me buscarán y me mataran pronto.

–dime Jimin y no me temas, mi padre no es un hombre digno de amor, no después de deshacerse de mi padre Omega y de mi.

Yoongi se sintió más confiado.

—el príncipe fue vigilado constantemente, sin previo aviso un día, el primer ministro lo esperó en el pasillo y lo golpeó con fuerza en la cara, se suponía que yo no debía estar ahí, pero me ordenaron llevarle un mensaje, pero me detuve al ver aquella escena y me oculté tras una puerta.
Estando inconsciente, sufrió golpes, heridas punzantes y cortantes en todo su cuerpo, fue inyectado con algunas cosas y fue trasladado quien sabe a donde. Después me enteré que fue exiliado.

–¿cómo sabes que fue exiliado? Preguntó Jimin.

—fue lo que tu padre ordenó a sus matones; "saquenlo al área verde, quizá ahí pueda gobernar"
Yo entiendo que es el área verde, mi padre fue enviado fuera también.

Los tres chicos se vieron con tristeza, ira y desconcierto.

Jimin salió del lugar y se fue a sentar sollozando a una pequeña acera.

—podría estar vivo, no te agobies.

Yoongi había salido tras él.

—¿cómo podría? Es mi única familia, el único que he querido mas que a mi padre Omega, dijo Jimin sintiendo el brazo del alfa sobre sus hombros.

—podría unirme a la causa y apoyarte, solo si tu quieres.

Jimin se sentía dolido, pero el aroma de aquel alfa se introdujo en su interior dándole paz.

—unámonos entonces, dijo observándolo a los ojos.

El alfa lo observó con intensidad de nuevo.

Los cuatro chicos hicieron una alianza aquella noche, ya no eran dos líderes de grupo, ahora eran cuatro, siendo todos muy importantes.

—si van a pertenecer a la causa, es necesario que tengan su distintivo, dijo Taehyung emocionado.

Mostró a todos un libro grande donde habían nombres, direcciones y firmas.

—¿qué distintivo? Dijo Jimin.

Hoseok y Taehyung mostraron el interior del antebrazo, un tatuaje de una serpiente con las fauces abiertas, apretando a un ciervo con sus iniciales se encontraba ahí.

—¡la pintura! Es igual a la pintura del palacio. Dijo Jimin con una sonrisa.

Los nuevos integrantes se hicieron el tatuaje, sintiéndose orgullosos.

Seokjin, un Omega de quien nadie sabía había sido una chispa en un largo camino de pólvora para la ciudad, al pintar las paredes del palacio siendo un niño; sin saberlo siquiera.

Serendipia (Namjin Omegaverse) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora