Serendipia (Namjin Omegaverse)

Capítulo 27

La fecha esperada para reunirse con Jung Hoseok llegó.

Seokjin y Namjoon fueron vestidos y arreglados en habitaciones aparte, para ser llevados al salón donde hablarían de los planes.

Las paredes del salón eran de color blanco con grandes pantallas, monitores y un podio especial.
Al centro del mismo se hallaba una mesa circular con sillas altas;
En el techo una lámpara con miles de cristales iluminaba la estancia, era majestuoso.

Jung Hoseok entró de la mano de su Omega Kim Taehyung, ambos vestían trajes oscuros en tonos azules y prendas extras color blanco.

—hoy es un día que quedará registrado para la eternidad, estoy orgulloso de ti, dijo el Omega abrazando con dulzura a su alfa, quien sonreía y besaba tiernamente su oreja.

—¡se ven lindos! Dijo Jimin entrando.

Taehyung reverenció sonriendo con sonrojo.
—¡te agradezco amigo!

Yoongi llegó detrás de él, ambos iban completamente de negro satinado.

—¿y ustedes? Dijo Hoseok sonriendo de forma pícara. —han formalizado algo?

—si, lo daremos a conocer más tarde, ¿verdad bombón? dijo Yoongi con una enorme sonrisa.

Jimin sonrió —¡no digas eso, me sonrojo!

Los cuatro chicos estallaron en carcajadas.

Jeon Jungkook fue el próximo en llegar, se veía regio; pertenecía ya al círculo de líderes, había dejado su uniforme de guardia real mucho tiempo atrás.

Los cinco jóvenes se sentaron a la mesa dejando la silla principal y el lugar a su derecha vacíos.

Detrás de ellos habían personas del equipo que eran fieles, montaban guardia y se encargaban de llevar mensajes a los demás que pertenecían a la causa.

Namjoon entró, su presencia era notable, era alto y esbelto, un alfa dominante; su aroma a pinos y manzanas rojas se sintió cuando pasó hacia su puesto.

Un traje oscuro con cinturón y solapa de detalles rojos y colgantes dorados resaltaba su figura, su camisa blanca con broche en el cuello elevaba la fineza de su porte.

Sus dedos llevaban anillos y su cabello había sido peinado para dejar la frente al descubierto.

Todos en la mesa se pusieron de pie hasta que se sentó.

—se ve regio príncipe, dijo Jungkook.

—¿las seis personas que estamos aquí podemos tratarnos sin etiquetas? Dijo Nam expectante.

—solo cuando estemos los siete, de lo contrario no, dijo Hoseok sonriendo, —gracias por confiar en nosotros.

Todos estuvieron de acuerdo.

La puerta fue abierta de nuevo, Jin se quedó parado en ella, el temor de estar con varias personas le abrumaba.

Nam al ver su rostro suplicante, se puso de pie y fue a traerlo.

—¡estoy aquí dulce Jin! No lo olvides. Susurró a su oído.

Seokjin tomó su mano y entró para sentarse; de igual forma todos se pusieron de pie y se sentaron hasta que él se sentó.

Jin vestía un traje oscuro, del mismo tono que Namjoon, su saco abierto dejaba a la vista su camisa negra simple sin botones y un pequeño chaleco rojo con detalles brillantes remarcando su delgada cintura.

El saco tenía colgantes de color dorado de la cintura hacia abajo dando un estilo imponente a su porte y dulzura de su rostro.

Nam no pasó desapercibido el brazalete que le había dado cuando le había declarado sus intensiones de cortejo.

Todos en la sala sintieron su aroma a Caramelo y vainilla.

—daremos a conocer un plan creado para instaurar el orden en la línea de mando de la población, y reestructurar el territorio; antes de eso procederemos a presentarnos.

Hoseok habló así y continuó:

—Mi nombre es Jung Hoseok, los padres de mi bisabuelo, mi abuelo, mi padre y yo hemos tenido la misión de velar por la verdadera historia de la humanidad y la lucha contra los planes malvados de los dirigentes corruptos.

—yo soy Kim Taehyung, mi familia ha estado ligada a la línea Omega que reside en el trono, hemos sido víctimas de muchos ultrajes, buscamos que acabe, queremos ser libres de elegir a la persona que queremos amar.

—cómo hijo del primer ministro, es mi deber ser consejero del próximo rey, mi palabra vale lo que él Rey ordena, no viviré para servir a un tirano, dijo Jimin.

—nosotros fuimos guardias reales al servicio de un usurpador, fuimos manipulados, maltratados y humillados, queremos servir a un dirigente que traiga paz. Somos Min Yoongi y Jeon Jungkook.

Al llegar el turno de Jin todos guardaron silencio, era quien más deseaban escuchar.

—soy Kim Seokjin, individuo registrado en esta ciudad, de familia obrera fui; aprendí un oficio y fui criado por un alfa sabio y de bien quien me acogió, me dio su conocimiento sobre lo que el planeta fue.
—aprendí el conocimiento prohibido y en mi rebeldía infantil cometí traición a la monarquía siendo exiliado al exterior con mi anciano padre alfa.
—sobreviví gracias a él, vivimos muy bien por muchos años hasta que murió, he vivido solo desde entonces; intenté salvar a muchos que fueron sacados como perros, pero nadie sobrevivió.
Esa es mi historia.

Todos estaban atentos, sorprendidos de que hubiese vivido tanto tiempo afuera y sin padecer daño alguno.

—cabe resaltar, dijo Namjoon, —que su crimen de traición contra la monarquía fue pintar una serpiente y un ciervo en las paredes del palacio.

Los cinco chicos se sorprendieron, su admiración y emoción les puso enchinada la piel.

Hoseok levantó el brazo haciendo una señal, todos en aquel salón mostraron su tatuaje.

—¿qué? ¡Oh! Dijeron Jin y Nam al observar la silueta de la serpiente y el ciervo en sus brazos.

—Seokjin, dijo Hoseok, —sin querer, tu acto de rebeldía infantil fue la chispa que nos encendió a nosotros, fue tu acción la que unió a estas fuerzas rebeldes, somos causa de tu arte y de tu valía, ¡gracias por eso!

Seokjin se levantó he hizo una reverencia a todos, eso le conmovió.

Hoseok dio a conocer su plan.
—queremos instaurar al dirigente que corresponde, eliminar las altas murallas de la ciudad, eliminar el campo de fuerza y dejar que las personas amplíen sus horizontes; queremos enseñar lo que antes se sabía, construir más allá y ser libres como al inicio de los tiempos.

—yo apoyo el plan, dijo Seokjin muy animado, —sería un placer que eso se hiciera realidad.

Namjoon lo observó con amor, sabía lo que era estar fuera y amaba la naturaleza, porque había sido su nido de amor con su Omega destinado.

—acepto el reto, pero tengo condiciones que trabajaremos más adelante. Dijo Namjoon sin titubear.
Todos aplaudieron la decisión.

Kim Taehyung se acercó a Seokjin.

—para finalizar esta reunión, es indispensable una cosa, dijo Tae tomando la mano del Omega con delicadeza.
—este brazalete lo conoce toda la ciudad, dijo refiriéndose al que Namjoon le había dado, Tae tenía los ojos llorosos, —ha sido portado por nueve omegas de generación en generación, sin embargo tú eres el que más lo merece. Terminó diciendo mientras le besaba la mano.

—¡Saluden al príncipe de la casta Omega Kim Seokjin! Dijo Taehyung.

Todos reverenciaron con profundo respeto al Omega que estaba pálido por la impresión.