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El sol se asomaba lentamente por el horizonte dando sus primeros rayos en forma de alba, podía escucharse a los pájaros cantar y anunciar el nuevo día, el ganado comenzaba a mugir y nuestra alfa fue despertada por unos golpes en la puerta de la entrada, pensó que tal vez había sido un pájaro que se golpeo contra la puerta pero los golpes no cesaron, así que decidió levantarse y aun medio dormida camino hacia la puerta principal en la que a los golpes se lo sonaron rasguños, intento olfatear pero no sintió ninguna amenaza así que abrió la puerta y rápidamente fue empujada desde los pies haciéndola caer por nada mas y nada menos que un borrego que al verla en el piso se acerco rápidamente a olfatear a la humana restregándole su hocico húmedo por la mejilla derecha a lo que Alysa lo empujo suavemente para quitárselo de encima y lo siguiente que vio fue al animal corriendo por el pasillo mientras balaba, la pelinegra deprisa se levanto para intentar sacarlo de la casa

Alysa: ¡Ey no, no regresa aquí! -le ordeno mientras lo tomaba del pecho para empujarlo hacia la salida pero el borrego fue bastante ágil para liberarse del agarre- ¡no, no, vete shu! 

Ante el alboroto una rubia se levanto rápidamente con sospechas de lo que pasaba, al abrir la puerta de su habitación vio a su cuñada luchando contra el animal, se apoyo contra el marco y divertido dijo

Eloisa: Veo que ya conociste a beto -carcajeo viendo la escena divertida-

Alysa: ¿eh? ¿beto?

El animal dándose cuenta de la aparición de la beta dejo de luchar contra Alysa y se dirigió hacia Eloisa quien lo recibió con caricias para luego tomar rumbo a la cocina donde saco un frasco de galletas y luego llamo al animal para sacarlo a cuesta de chantajes, todo esto mientras la alfa se quedo analizando la situación desde el pasillo aun sin moverse

Eloisa: Lamento eso, se comporta como un perro ¿te hizo algo?

Alysa: no, nada solo me sorprendió verlo dentro -dijo recuperando la compostura-

Eloisa: Erick se reunió con Marcus y pronto vendrá a desayunar prepárate para el día y ven a comer -anuncio para irse a la cocina- 

Alysa se devolvió a su habitación donde escogió la ropa que usaría para el trabajo, tomo uno de sus pantalones menos favoritos (no queriendo arruinar los otros), escogió una blusa negra de tirantes y la camisa que considero que le daría menos pena echar a perder puesto que toda su ropa era de marca y no tenia algo viejo, piénsalo como un privilegio se dijo a si misma. Una vez alistado su cambio tomo su cepillo de dientes, pasta, cepillos y una liga para cabello tipo scrunchie y se arreglo para el día. Saliendo de la habitación el olor a comida la inundo y caminando hacia el comedor encontró a su hermanito ayudando a su novia con lo que necesitara así que mientras ellos se encargaban de cocinar, se dirigió a la alacena en donde se veían los platos y se dispuso a ordenar la mesa, en ese momento su cuñada se dio vuelta hacia ella y le dijo:

Eloísa: Oh no te hubieras molestado con eso

Alysa: No es ninguna molestia

y a continuación tomo asiento en la mesa y momentos después la comida fue servida, el desayuno constaba de huevos en omelette con nopales asados y espárragos, asi mismo sirvieron te de jamaica, el desayuno paso con mucha normalidad y con una que otra platica de intermedio hasta que ambos hermanos tuvieron que salir para trabajar. Atrvesando la plazuela ahi se encontraba Marcus y su equipo, quienes se saludaron respetuosamente para posteriormente moverse a la zona de trabajo, el día ya iba bastante normal pero a alguien se le ocurrio arruinar la tranquilidad

...: Ja ja ja ¿en serio creen que lograran salvar ese desierto de ceniza? veo que pasaron los años pero sigues siendo la misma tonta Alysa -menciono su nombre con tanta amargura-

Si no me hubieran obligado a volverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora