CAPITULO 16

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Abel se interna dentro de una habitación pestilente a humedad rebosante, con objetos apenas visibles a unos metros de el. Un soporte corroído obstaculiza el camino lleno de chatarra vieja y piezas metálicas.

A la fuerza tal vez... —ideo un pensamiento antes de empujar fuertemente el pesado soporte de acero oxidado, se dispuso a usar un trapo viejo que colgaba de una varilla para mover el soporte sin cortarse.

Tan solo espero que aún quede ropa. —se dijo a si mismo después de dejar caer el soporte oxidado al suelo, el cual se terminó de romper dejando piezas de metal oxidado por todas partes.

Reviso cada caja metálica en el lugar, cada vitrina y casillero en busca de algo decente para vestir. Es allí donde la encontró; un uniforme empacado casi nuevo, de colores negro y verde en patrones rayados.

—Que lástima que no viene con el casco incluido, habría sido más presentable. —murmuro lamentando el uniforme incompleto mientras se lo ponía.

Años de utilizar una sola combinación de vestimenta se habían impregnado en el, como si el uniforme fuera parte de el o el mismo.

Comenzó colocándose los pantalones, un pantalón gris más delgado y flexible dentro del pantalón militar más angosto: teniendo en cuenta el invierno nuclear del exterior se aseguró de colocarse prendas extras para mantener su calor corporal.

Cerrando los últimos botones de la camisa se aseguro de haberlos colocado en el orden correspondiente, en unos momentos finalmente sintió como comenzaba a sentir una pequeña sensación de calidez alrededor de su cuerpo y brazos acabando con los continuos escalofríos generados por el frío aire del lugar.

Las botas negras fueron difíciles de usar puesto que son apenas de la talla de Abel lo cual las vuelve incómodas. Al principio camina con dificultad y después empieza a caminar normalmente, un sentimiento de extrañeza lo invade inconcientemente, la primera vez que usa un uniforme en mucho tiempo le da una sensación igual a su primera vez usando un uniforme militar cuando apenas tenía 14 años, durante su reclutamiento.

—¿Realmente ya pasó tanto tiempo? Mi vida fue desperdiciada en una guerra que fui obligado a pelear, hasta me estoy comenzando a sentir viejo. —menciono saliendo de la vieja habitación corrigiendo su caminar con cada paso que daba acostumbrándose a las botas nuevamente.

El mismo pasillo oscurecido de hace unos instantes se revela con cada paso dado, sin visión alguna Abel se aferra a la pared con una mano intentando seguir en línea recta. Un golpe seco lo deja en el suelo, la frente de su cabeza duele tras encontrarse de lleno con una división de caminos.

No puedo simplemente ir caminando porque si en la oscuridad, debo de intentar llegar al área médica y averiguar que está ocurriendo aquí, después conseguir ayuda para Azrael. —enfoco sus pensamientos y trato de recordar a profundidad los pasillos del gigantesco complejo subterráneo en el que se encuentra.

Una imagen mental breve llega a sus pensamientos; la organización del complejo según el mapa interno sobre la arquitectura del lugar, todo el armamento se encontraba del lado derecho del búnker y todo lo relacionado con los proyectos de investigación, las habitaciones y el área médica estaba del lado izquierdo: añadiendo que todos y cada uno de los pasillos fueron construidos con el propósito de dar un camino fácil entre la enfermería y la armería. Y suponiendo la dirección de ambos caminos frente a el, teniendo en cuenta hacia donde está mirando, el debe tomar el camino izquierdo para llegar al área médica, suponiendo que el punto de referencia principal es la entrada al búnker la cual debería estar rectamente en su dirección al reverso.

Gira a la izquierda y sin dejar de tocar la pared camina a paso lento.

¿Porque las instalaciones están así?¿Porque no hay luz? ¿Será algún tipo de remodelación? ¿Y si es así, porque nos dejarían a nuestra suerte aquí dentro?

Más y más preguntas se formulan, hay pocas respuestas coherentes. Abel jamás se deshace de la extrema confusión, lo atormenta con cada respuesta hecha por su subconsciente y crea escenarios imaginarios dando visualización mental lógica de los hechos actuales. Curiosamente, empieza a tener miedo.

NOTA DEL AUTOR:

Perdón por la tardanza, aquí está el capítulo. Gracias por seguir apoyando la historia.

UN RAYO DE ESPERANZA (Nier:Autómata FanFic story)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora