—No sé de lo que hablas—Le dio una patada, salió de su aturdimiento—Te confundistes de persona.
Imposible que el sea mi Erick, deseguro solo está jugando conmigo. Pero es un juego desagradable.
—Crees que te iba a confundir con cualquier persona inferior a ti—Volvio a posiciones arriba de Joe—He vivido mi vida esperado este día, te busques por todo el mundo. No hay lugar el que no haya visitado para poder encontrar tu reencarnación, y cuando te encontré en esta misma ciudad, te estabas casando con ese imbécil.
—Queria matarlo ahí mismo pero entonces te vi y supe que no eras tú. Mi pequeña pacar no era un docil animalito, así hayas perdió tus recuerdos, no serías sumiso.
¿Qué pasa no lo entiendo? ¿En verdad es Erick? El también llegó aquí. ¿Desde cuándo?
—Puebra que eres tú, mi Erick—Las emociones de Joe están caóticas, siente una gran felicidad como irá.
Aarón se aflojó la corbata, desabrochó los botones de su camisa, dejado al descubierto el mismo tatuaje de Joe.
—Eso no prueba nada—Mordio su labio—Miles de personas puede tener uno igual—Apreto sus puños, no quería creer en algo que puede ser falso.
—Pero ni una de esas miles de personas te hizo el amor arriba de aquel árbol, mientras esperábamos la llegada de nuestros enemigos.
Mierda, me había olvidado de ese horrible, emocionante, desagradable, recuerdo. Recordarlo ahora es vergonzoso.
—Hasta en momentos serios sigues siendo un bastardo, Rottweiler—Joe apodó a Erick como un perro.
—¿Me crees?—Acaricio esas bonitas mejillas.
—¿Cómo fue que sabías que tengo este tatuaje?
—Fue por la boca de David, ese tipo estaba fascina con tu apariencia, luego fuí donde Holly. Tuve que rogarle para que me dijera que tatuaje era—Mentiras no le rogué, solo le ordene—¿Me crees ahora?
—Si, te creo. Te extrañe tanto mi amor—Aáron sonrió de felicidad—¡¿Creistes que te diría eso Maldito bastardo?!—Joe lo tiro a la cama, subió arriba de el.
—Eres un maldito—Dejo ir su primer puñetazo en el pecho de Aarón—No sabes lo que sufrir por tu partida, nadie te pidió que te sacrificaras por mí—Sus gemas se cristalizan—Me prometiste una vida junto a ti, rompites esa promesa. Quise morir tantas veces pero no podía. No podía desperdiciar la vida que tú salvaste.
Joe siguio golpeado al alfa sin piedad, tenía que sacar todo esa irá que acumuló por tantos años. Ese dolor de haberlo perdido, la soledad que sentía en ese entonces, y seguía sintiendo.
—No pensantes qué sería de mi sin ti..no había dia en el que no sufriera solo, no tenían ni siquiera un amigo para desahogarme..quería morir...
Aarón en nigún momento se defendió, dejo que Joe se desahogara. Esos golpes no dolían en nada comparado con el deseó de no poder volverlo a ver.
—Te odio—Sollozo—te odio, te odió—Sacudia el maltrato cuerpo de Aarón—Te odió, te amo—Su mirada llorosa está en los zafiros gris verdoso—Te amo maldito bastardo—Se dejo caer encima del alfa, saboreo los labios del mayor.
Aarón envolvió el cuerpo de Joe con esas grandes manos, de gusto de esos labios con un sabor a salado por las lágrimas.
El beso está lleno de muchas emociones que no se dijeron en su anterior vida, y emociones encontradas de este momento.
—Te amo, perdón por haberte dejado solo en ese infierno. Pero no podía permitir que murieras, disculpa a mi egoísmo—Aarón tomo el rostro de Joe en sus manos—Te he extrañado cada día durante 15 años.
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El Omega divorciado es peligroso [Finalizada]
General FictionInició; 03/03/2022 Finalizó; 05/02/2023 Cuándo uno muere se supone que debes ir al cielo, o en mi caso al infierno. Si, yo estaba consciente de qué me quemaría en las llamas del purgatorio. No soy una persona con un buen corazón, el mio no es rojo...