El Omega divorciado es peligroso [Finalizada]

capitulo 22

El despeinado joven de cabello color cobrizo, meneaba su mano izquierda en busca de alguien, al no encontrarlo, se asustó.

—¿Hmm? Aarón—Se sentó de golpe, todo lo soñoliento se esfumó, buscó por todos lados al alfa, pero no lo encuentran. El miedo se apoderó de él—¡¡Aarón!!—Grito con todas sus fuerzas.

Joe se levantó de la cama olvidado por completo ese terrible dolor de espalda.

—¡¿Qué sucede? Mi pequeña pacar!—Aarón entro corriendo a la habitación.

—¿Dónde estabas?—Comenzo a golpearlo—¿Por qué me dejastes solo?—Le dio un puñetazo más fuerte en su pecho.

—Lo siento—Abrazo el tembloroso cuerpo de su Omega—Lo siento—Beso la coronilla de Joe—No quise asustarte así, solo planeaba preparar el desayuno y luego subirlo antes de que despertarás, quería sorprenderte.

—No lo vuelvas hacer—Abrace con más fuerza este fornido cuerpo—Fue horrible despertar y no verte a mi lado, por un momento pensé que todo solo fue un sueño.

—No lo haré—Lo levantó en sus brazos, Joe enrolló sus piernas en esas caderas deseables de el alfa—¿Me perdonas?

—Si, pero solo si el desayuno está rico...ahh!!—Mierda, Duele, Seguro fue por estos movimientos bruscos, por la preocupación no me había percatado de ello.

—¿Te duele mucho?—Aarón lo sostuvo en modo Princesa.

—Si, pero es soportable. Si lo hubiéramos hecho más de una vez creo que no lograría moverme como esa vez que fuimos dos animales salvajes, pase dos días sin poder mover un músculo.

Qué recuerdos aquellos, fui yo quien lideró en la cama, a este perro Rottweiler le encanta eso. Disfruta el tenerme arriba de el, pero que demonios estoy pensando.

—Es mejor que comas mucho, estés muy saludable. Faltan tres días para mi rut—Susurró al oído de su Omega—Y voy a pasarlo contigo.

Joe siento un escalofrío por su columna dorsal, sabía que el rut de un alfa es todo un infierno.

—¿Me vas a marcar?—Su mirada esta en esos ojos grises verdosos.

Presiento que ese día yo también entraré en celo al olor sus feromonas con doble de excitación.

—No, si no quieres. No eres un ganado, y si alguien se atreve a solo mirarte de una manera obscena, sacaré sus ojos. Se que eres fuertes, no se necesitas mi marca para defenderte.

—¿Entonces no quieres?

—¡Claro que lo quiero! anoche quise hacerlo, pero se qué a ti no te gusta sentirte que eres solo una mercancía, hay mucho tiempo para morder ese hermoso cuello.

—Lo quiero—Rodio el cuello del mayor con sus manos—Ya perdimos mucho por pensar de esa manera__Quiero ser tuyo en cuerpo y alma, así que, ese día ambos nos morderemos, grabaremos una marca donde ambos somos uno.

—¡Enserio!—Aarón beso los labios de Joe.

—Muy encerio, desde hoy ya no existe Adam o Erick. Solo somos Joe y Aarón. Olvidemos, dejemos ese pasado atrás.

—Estoy descuerdo, pero no puedo dejar de decirte mi pequeña pacar—Sus ojos de animalito herido ven a Joe con suplica.

—Puedes seguir diciéndome así, Perro consentido—Puedo ver una cola moviéndose con alegría.

Toc, Toc, Toc.

__Hermano, ¿estás bien? Escuché tu gritó, viene enseguida pero el señor Hansel me dijo que les dirá un poco mas de tiempo, pero ya no aguanto la espera.