+18 capitulo 37

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Bajó el cielo con pequeñas estrellas, dos cuerpos disfrutan de una acalorada velada. Sobre la arena solo hay una manta para que sus cuerpos no se ensucien de arena.

Ambos están en una posición muy candente, el de cabello cobrizo ti sus caderas enfrete de los ojos del alfa, a mismo tiempo que en su boca tiene el falo de su esposo.

—Ahg~—Movio sus caderas al sentir como el alfa, lo estimula por ambos lugares.

Su lengua la una parte que no debería ser lamida, me quejo pero en vez de obedecer, el la mueve con más diligencia. Logrado que mi cuerpo se vuelva tan vulnerable, poniéndome a su merce.

—Joe, mueve esa hermosa boca—Palmea la blanca carne que está enfrente de sus ojos—Joe, solo puede gemir de placer.

Con sus labios devoró ese caliente falo, el también quería sentirse bien. Joe le dio el cariño que tanto deseaba. De la boca de Aarón solo se logró escuchar un gemido ahogado, ya que su boca esta muy controlada en aflojar las paredes del interior de Joe.

Su mano libre la usa para recorrer el cuerpo del omega, estremecido cada parte de el, tanto así que Joe no logro soportarlo más y se vino por atrás.

Aarón se sorprendió, a la vez que sus ojos se vuelven más oscuros. Ya no podia, ver a Joe respirado pesadamente con una mirada lasciva y esas espléndidas caderas hacía arriba, viendo perfectamente como ese lugar se contrae, dejado salir mucho líquido.

Sostiene la cintura de Joe, para luego embestirlo co algo de rudeza, el omega gimio ruidosamente, eso fue mucha estimulación para él, más cuando recién llegó al clímax, su interior esta muy sensible.

Esto se siente tan bien, entro sin dificultad, y sin incomodidad. No puedo sentir dolor, solo placer. Aarón si que me dilató a la perfección.

—¡Aah~!—Esa embestida llegó demasiado profundo—A-Arón—Jadea.

—¿Si? Esposa—Besa la espalda suda de Joe.

—Más...más fuerte—Mueve sus caderas —Hazlo más rudo—Suplica de una forma lasciva.

—Podría ser peligroso—Plaf.

—Mhg~Joder..se sintió bien—Mi interior se regocija al sentir las palmas de las manos de Aarón, golpeado mi trasero.

Aarón sonríe de manera malvada, no se mueven, disfruta ver como Joe se mueve por si solo en busca de sentir esa sanción de placer.

Los brazos de Joe están débiles, por lo que es difícil sostenerse con ellos, las rodillas tampoco eran la excepción. Él presentía que de un momento a otro caería pero Aarón lo sostiene de la cintura, no permitirá que esa vista se arruine.

Aarón podía ver y le encanta ver como su miembro es succionado por esa blanda carne, eso lo pretende mucho más.

—Muévete perro desobediente—Hablo entre dientes—Veo que..que quieres ser castigado y no como te gusta...Aah~—¡Demonios! Exquisito, simplemente gratificante.

Aarón no podía permitirse enojar a su esposa, eso sería cero beneficioso para él. Embistió una, y otra, otra y otra vez.

Los gemidos por parte de los dos se mezclan con el sonido de la olas del mar y el canto de las aves de la isla, nadie podría adivinar que los dueños de ese lugar están haciendo el amor empleno aire libre.

Aarón giró el cuerpo de Joe, ya no estaba en cuatro si no que acostado, puso una almohada en la cabeza y cintura del omega. Besa esos labios mojados por sus propios hilos de plata que salían de ella, el alfa los saboreó como si de algún dulce se tratará.

Sus manos frotan los pesones mordisqueados, el alfa pensó podría salir algo de ellos pero todavía era pronto para lactar.

Me aferro en cuello, y caderas de mi esposo, el empuja con fuerza, sin llegar lastimarme. Ahora mismo nos estamos limitado, el medico dijo que Aarón no podía llegar tan profundo en mi interior porque podría ser peligroso.

Solo espero que todo siga bien cuando volvamos a nuestra ciudad, después de todo solo hemos pasado como consejos desde que llegamos a este lugar hace una dos semanas, solo nos tomamos dos días para descansar mientras exploramos la isla, al siguiente día volvimos a follar.

—¡Ahg~!—Aarón gimio al sentir como el interior de Joe, lo estruja sin piedad—Estoy llegado—Embistió con más rapidez.

—Yo..yo también...Amh~—Tocaron el cielo que se podía ver muy lejos, Aarón había salido a tiempo de la cueva del omega.

Se quitó el preservativo para ponerse uno nuevo, tan poderoso es ese falo que ya estaba despierto nuevamente.

Entre suavemente, Joe apretó con fuerza mis hombros y ahí abajo, su esbelta, sexy espalda se arquea en arco anormal, podía ver mi miembro sobre saltar en su abdomen. Su calidez como sensibilidad está a otro nivel.

Aarón abrió sus ojos en grande al ver qué Joe volvió llegar al clímax sin siquiera moverse o tocar su cuerpo. Sintió como algo caliente se filtraba desde su interior hacia afuera.

El alfa no era el único sorprendido, Joe también lo está, esa sensación fue tan placentera como escalofriante. Fue tanto así que su preciosos ojos marrones pero ahora están verdes por la poca tenue luz, desbordaron lágrimas.

—Esposa—Besa los ojos de Joe.

—Eso me asusto y es un tanto vergonzoso—Fue una epifanía anormal.

—No tengas miedo—Empuja hacia adelante, Joe, gime bajito—Lo hemos hecho más de cinco veces, es más que claro que tu cuerpo esté así de sensible, solo disfrutemos—Besa los labios de Joe.

Sus lenguas se mezclan entre sí, como sus cuerpos, Aarón empuja su pelvis con movimientos seductores jugado con el interior del omega. Tocado cada parte que lo haga temblar de placer.

Volviendo a llegar al clímax, el omega comienza a tener espasmos por la repentina salida del alfa, de su interior.

El alfa se desploma a un lado de Joe, ambos respiran pesadamente, Aarón cubre sus cuerpos con una frazada, entrelazan sus manos mientras miran el brillante cielo. Todo estaba cubierto de estrellas. Muy hermoso.

—Es una lástima que volvamos mañana—Acoda su cabeza en el brazo de Aarón—Estas dos semanas en este lugar han sido maravillosas.

No podíamos quedarnos más tiempo porque tengo que llevar un control por mi embarazo, tenemos que deshacerme de todo lo que pueda ser peligro para nuestro bebé. En tres dia me haré el primer ultrasonido, Aarón y yo, hemos quedado que no preguntaremos el sexo del bebé, queremos que sea sorpresa.

—Cuando nuestro hijo nazca y pueda dar sus primeros pasos, entonces nos vendremos a vivir a este lugar por una buena temporada, ¿qué te parece?

—Me parece bien, volveríamos a la ciudad cuando le toque asistir al colegio.

—Si, perfecto—Abraza a su esposa—Ya verás que ni sentiremos el tiempo cuando estemos de vuelta.

Sellan ese anhelo o promesa con un apasionado besó, este lugar es lo que siempre habían soñado, un lugar lejos de las personas, para reabastecer de comida su refrigerador, alguien venia en un bote a dejarles la provisiones dos veces a la semana, Joe se había vuelto muy glotón.

Aarón es su chef personal, quien cumplía con todos sus deseos, lo que más a comido es langosta, mango con chile y mucho limón, esos dos han sido los dos primeros deseos que Joe, deseo comer.

El Omega divorciado es peligroso [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora