Entre por la gran puerta de metal, ya estoy acostumbrado a el maldito sonido agudo que hace al abrir.
Camine en silencio, saludando a uno que otro hombre, no puedo distraerme, solo vengo hacer algo rápido, sin rodeos.Podía observar esos dos bultos tambaleando, mientras más me acercaba más podía observar sus rostros de temor.
— ¡Buenas madrugadas!—
Exclame levantando ambos brazos, de inmediato obtuve dos pares de ojos, los cuales demostraban tanto temor.
— Edward....puedo explicar todo—
El moreno hablo, se veía tan puro, sin ninguna cicatriz o marca de alguna pelea, parece un príncipe de esos que salen en películas. Nada que ver con los cerdos Malik.
— Tu eres Zayn—
— s-si...
Tal vez estoy alucinando... El me recordó a mi niño.
— Tu usaste a mi bebé para saber de mi...—
— Edward te juro que vamos a explicar todo—
Gire mirando a Liam, ese hombre cometió una gran traición, no soy el único que quiere su cabeza.
— Les explicare— mire a los hombres tras ellos, indicando que se fueran, yo me encargaría de estos dos.
Espere a que los hombres se fueran, solo para sentarme ahorcadas sobre una silla de ahí .
— Su culo tiene precio, su cabeza, esa misma que utilizaron para esta mierda... Vale millones—
— Edw....—
— shshsh.. antes de que comiencen a suplicar y decir miles de escusas. Yo no los entregaré... —
Pase el dorso de mi dedo índice por la punta de mi nariz.
— Yo los quiero solo para mí. Por qué Payne, fuiste mi mano derecha hombre —
Señalé a el hombre de rodillas frente a mi, se notaba tan paniqueado que temo en que le dé un paro cardíaco.
— Tu sabes lo que soy capaz de hacer—
Lance un guiño a su dirección antes de mirar a el moreno.
— y tú.... Tu utilizaste a mi bebé, a esa cosita blandita y gruñona. Zayn eso no está bien, el creyó que eras su amigo—
Algo extraño paso en los ojos del hombre, pues se notaron pálidos y opacos.
— Edward escúchanos antes—
— mmm no lo se, no tengo tiempo, quiero llegar antes de que mi niño despierte—
Me coloque de pie, caminando a el pequeño mueble empolvado que hay ahí.
— ¡Me obligaron!—
Gire a tal grito, manteniendo en mi mano a Michelle, mi hermosa arma.
— ¡Ellos me obligaron! ¡Sabían que era amigo de Louis! —
— ¿obligarte? ¿Con que?—
Camine a ellos con curiosidad picando mi lengua.
— con Liam.... Si yo no hacia lo que me dicen, ellos... Ellos matarían a Liam... Yo no puedo vivir sin el, yo.. lo amo—
— que bonito es el amor, mira que utilizar a un niño inocente solo para salvar el pellejo de tu novio, es un gran sacrificio de amor—
Sus rostros de pánico me hicieron sonreír tan grande.
— si no pensará en matarlos, iría a su boda sin pensarlo—
— Edward por favor... Por favor el dice la verdad...—
— ¡Cállate Liam! A ti ya no te creo ni una sola palabra —
Gruñi con molestia, la verdad es que paciencia no tengo.
— Digo la verdad... ¡Lo juro!—
— Saben que... ¡ya me hartaron!—
La adrenalina corrió por mis venas como lava hirviendo, quemando toda mi piel, esa sensación dolorosa se siente tan familiar, tiene tiempo que no tomo a mi chica, había olvidado lo bien que se siente. Coloque a Michelle entre los ojos de Zayn, mirando como este moría de temor con ojos llenos de lágrimas, está es mi parte favorita me hace sentir tan....
— Edward.... Mátame a mi, por favor, te lo pido, pero deja a Zayn, el lo hizo por mi... Edward por favor —
Fue entonces que las palabras de Louis entraron en mi cabeza..
"¿Que pasaría si alguien me mata frente a tus ojos? Y tú no puedas hacer nada"
Mi pecho se presiono, toda la sangre de mi cuerpo se drenó al mirar los ojos de el moreno frente a mi...
Mi cabeza me hizo una mala jugada, mirando esos ojos avellana tornándose azules... Alcanzando el tono blanco, tan idénticos a los de Louis... La idea de yo estar en el lugar de Liam, mirando como están apunto de matar a la única persona que me mantiene vivo, llegó a mi corazón... A ese órgano que ya hacía muerto.— yo... Yo ... No puedo—
El arma resbaló de mis manos, cayendo a el suelo en un golpe sordo.
Deje de mirar a el hombre solo para observar mis manos, estas temblaban.... Yo... Todo... Todo mi cuerpo no dejaba de temblar como si de gelatina se tratase.La imágen de alguien apuntando a Louis no dejo mi cabeza, retrocedi sin dejar de mirar mis manos, hasta que caí de rodillas a el suelo.
— yo... Iba a.. manchar mis mano, Louis no sale con asesinos... Louis.. Louis... ¡Mierda!—
Los demonios de el arrepentimiento se filtraron a mi cabeza, senti lo mismo cuando mi padre me obligó a matar a esa mujer.
— Ey... Edward... Amigo tranquilo—
Levanté la mirada a tales Murmuro, mirando a Liam, quien mantenía lágrimas en su rostro.
— ¿Liam que haces?—
— El tiene asma—
La pequeña conversación de ellos me hizo entrar en razón.
Aún cuando intenté matarlos, Liam se preocupa por mi... El es mi amigo... Mi mano derecha.— Estoy... Estoy bien...—
Cerré los ojos, solté un suspiro largo antes de abrirlos, mirando de nuevo a la pareja frente a mi.
No dije nada, mi garganta se cerró de golpe. Con Louis en mi cabeza, solo me acerque a ellos, desatando sus manos con rapidez.
Mire a Liam ayudar a Zayn a estar de pie intercambiado un par de palabras, pase grueso intentando hidratar mi garganta antes de hablar.— Están en.. peligro... Lo mejor sería que vinieran conmigo... Con nosotros—
Me di un golpe mental observando como Zayn se esconde tras Liam, cada cosa que hace ese chico me recuerda a Louis, maldito louis.. me pudre la cabeza.
— Claro... Iremos—
—li no—
— amor confía en mi—
¿Así me veo cuando hablo con Lou? Meloso y blando... Oh Lou.. Lou... Necesito ir con el, me siento tan mal, la culpa no deja de golpear mis costillas.
— vamos—
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Ojos de placer
Hayran KurguStyles le demuestra a Louis que es el placer con métodos satisfactorios. Historia narrada en primera persona.