Capítulo 30

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La tarde había llegado y los soldados continuaban la búsqueda de Liam. Para este punto, Zayn había perdido la fuerza en sus pulmones para seguir gritando, estaba desesperado.

Harry junto con Louis y otros tres soldados, habían ido a buscas más allá de la región, el comandante sabía lo peligroso que sería ir tan lejos de la asentación, pero la angustia en los ojos del soldado lo hizo romper las reglas.

Si soldados franceses los encontraban, sería el fin.

Para cuando la noche llegó, todos regresaron a la asentación, Zayn había comenzado a beber para poder calmarse.

—¿Lo encontraron? — Fue lo primero que el comandante Clinton preguntó al ver llegar al general Malik tan afligido. Trevor estaba disfrutando demasiado el dolor de Zayn.

El general pasó de largo, fue directo a su cabaña para tomar un arco y suficientes flechas. Esta noche no descansaría hasta encontrar a su amado soldado de los ojos color miel.

Harry, obligado por Louis, quedó a comer algo antes de volver a la búsqueda. Mientras el chico se quedó a comer, Louis fue a buscar un par de abrigos.

—Veo que estás muy afectado con la desaparición del soldado Payne — El comandante Clinton le hablaba a Harry, el soldado se puso de pie para saludar. —Así es Comandante, él es como mi hermano — El comandante tomó una silla y se sentó junto a él, haciéndole señas al joven para que continuara comiendo.

—No deberías derrumbarte así por la ausencia de otro soldado, al único al que necesitas es a ti mismo, si Payne está muerto, la vida sigue para ti — Harry lo miraba incrédulo, si bien él se estaba acostumbrando a la frialdad de Louis, el comandante Clinton era aun más duro. Tal ves porque era más grande que el comandante Tomlinson, pero eso solo lo hizo pensar en sí algún día, su querido Louis se convertiría en ese tipo de monstruo.

Se negaba a aceptar tal destino, en estos últimos días, el comandante le había demostrado que su corazón aun podía ser salvado.

—Con todo respeto, comandante, él es mi familia y no voy a rendirme hasta encontrarlo — Respondió el chico molesto. —Eso es admirable, Styles — Le respondió el comandante mirándolo con un tanto de desconfianza, pero el soldado no respondió, se quedó pensando en cómo es que sabía su nombre. —Para mí, toda esta situación es una pérdida de tiempo, pero voy a ayudarte — Harry lo miró con esperanza.

Para suerte de Harry, el comandante Clinton había dejado que se llevara al único perro que tenían en Dover, él único perro sobreviviente después del ataque que sufrieron, para ayudar a buscar a Liam con su olor.

Harry le agradeció el apoyo al comandante y se fue en busca de Zayn y de Louis para darles la buena noticia.

Es así que salieron a caballos y bien armados el comandante Tomlinson, el general Malik, el general Sheeran, el soldado Styles y el soldado Devine, junto a otros veinte soldados más que decidieron ayudar a la búsqueda nocturna.

Se dividieron en grupos pequeños, estando Louis, Zayn y Harry juntos. La gran puerta de la asentación bajó con lentitud mientras los soldados se acercaban. Harry vio como desde arriba, el comandante Clinton, los miraba con una sonrisa maliciosa. Definitivamente, ese comandante no le daba confianza.

—Bien, Styles, dale la camisa de Liam al perro para que pueda olfatearla — Indicó el general Malik, el soldado obedeció y se acercó al gran perro frente a él. Su pelaje era negro y brilloso, tenía muchas cicatrices en el cuerpo y cojeaba de una pata.

Luego de que el perro oliera la camisa de Liam, comenzó a caminar. Los tres iban siguiendo al animal, quien no se notaba muy seguro de a donde ir.

—¡Vaya perro tan inútil! — Dijo Zayn alzando la voz. —Ese Trevor solo quiere burlarse de mí, maldito desgraciado — Se dijo a si mismo, el general cada vez estaba más enojado, sabía que, si no lo encontraban esa noche, sería muy difícil poder volverlo a ver... con vida.

Llévame a casaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora