Llévame a casa

Capítulo 18

Al llegar el medio día, los reclutas detuvieron el entrenamiento de lucha para ir a comer algo, Harry no tenía hambre, pero necesitaba hablar con Liam sobre las noticias que daría el comandante Tomlinson al atardecer. Se acercó a las cabañas de su tropa para dejar su alabarda en un lugar seguro, cuando vio a dos soldados entrar con un plato de comida a la cabaña del soldado Simon, luego de unos minutos salieron hablando entre ellos. —Ese desgraciado se merecía la golpiza que le metieron — Dijo uno de ellos riendo. —Si es cierto, cuando se encuentre mejor no va a descansar hasta vengarse de quien le hizo esto, incluso le robaron su espada — Ambos soldados se reían. —No hay duda que eso fue una deuda personal — Dijo uno de ellos —¿Quién crees que haya sido? ¿Devine? — Preguntó el soldado más alto. —No lo creo, Simon lo pudo haber derrotado fácilmente, debió ser alguien muy fuerte — Respondió el otro soldado mientras se terminaban de alejar de las cabañas, Harry sabía que había visto la espada de Simon en la cabaña de Louis, el chico rio para si mismo y salió hacia la cafetería.

Harry buscaba a Liam entre la multitud hasta que lo vio en la esquina junto con Zayn. Lentamente se acercó a ellos y se sentó al lado de su amigo. —Harry, me da gusto verte — Saludó Liam. —A mí también amigo — Respondió el chico, apenado por la presencia del general Malik. —¿También te da gusto verme, Harold? — Preguntó el general con una sonrisa traviesa. El joven recluta tenía las mejillas rojas, realmente le apenaba la situación en la que lo había encontrado con el comandante Tomlinson la noche anterior. —Un gusto, general Malik — Respondió por lo bajo. Zayn se echó a reír. —¿Por qué tan apenado? — Preguntó sarcásticamente el general. —Creo que es suficiente Zayn, ya la ha tenido que pasar mal con lo de anoche — Liam interrumpió defendiendo a su amigo. —¿Lo sabes? — Preguntó Harry aun sonrojado. —Supe una parte de la historia por John y la otra por Zayn — El general le guiñó el ojo a Harry. —John no tiene permitido acercarse a los lugares donde estés, tal vez hasta que a Louis se le pasen los celos — El general habló con tranquilidad. —No-no hay nada entre Lou- el comandante —Se apresuró a corregir — Entre el comandante y yo, es decir, no tiene por qué estar celoso... me refiero a que no debe sentirse así porque no hay nada entre John y yo — El chico se detuvo un segundo cuando escuchó lo que estaba diciendo— Quiero decir que no hay nada entre nadie, ni con Louis — Harry estaba tan nervioso que sus manos estaban temblando. Zayn levantó una ceja y se comenzó a reír. —Eres el peor mentiroso que he conocido, pero como comediante tienes un gran futuro — Liam miró molesto al general. —Esta bien Harold, no tienes por qué intentar mentirme, sé lo que está pasando ¿Con quién crees que el comandante se desahoga cuando está borracho? — Harry agachó su cabeza rendido. Liam rodeó con un brazo al chico. —Está bien amigo, tú no has hecho nada de qué avergonzarte — Zayn asintió —No hay nada entre él y yo — Respondió Harry sin levantar el rostro. —Eso no es lo que Louis-borracho dice — Respondió el general dándole un trago a una botella de licor. —Por favor, detente — Rogó Liam con la mirada, Zayn se detuvo, no le negaría nada a él. —Liam, necesito hablar contigo sobre algo muy importante — Dijo Harry levantando su rostro con una expresión de preocupación. —¿Qué es lo que pasa? — Liam conocía esa mirada, cargaba con malas noticias. —Recluta, si es sobre lo que creo que es, es mejor que cierres la boca hasta que el comandante dé la noticia — Zayn habló mirando seriamente a Harry. —¿Qué pasa? ¿Ha pasado algo malo? — Liam miraba a su amigo y al general con prisa por obtener una respuesta. El recluta miró con miedo a Zayn, sabiendo que estaba en problemas. —Zayn, dime que está sucediendo por favor — Liam tomó por debajo de la mesa la mano del general. —Liam, no puedo desobedecer una orden de mi comandante, no me hagas esto — Harry observaba la escena admirado. Liam quitó su mirada de Zayn molesto. Nadie dijo nada, Zayn continuó tomando de su botella y Liam comía despacio las pocas verduras que quedaban en su plato. Harry se disculpó y se levantó para ir de regreso al campo de entrenamiento, dejando solos a Zayn y a Liam para que pudieran hablar.