De la traicion vino el amor

22.- Ahora soy hermano mayor.

Después de unas semanas de completa tranquilidad al menos para la familia Wang, estaban todos incluyendo al bebé Yuan futuro hermano mayor de dos hermosas gemelas, yendo rumbo al hospital, mami Yin amaneció con los dolores de labor de parto así que para no arriesgarse Yibo llamo a sus suegros para decirles que llevaría a internar a su marido al hospital, por motivos de prevención pero que cualquier noticia importante les avisaría, sus suegros agradecieron la amabilidad hablaron con su hijo y confirmo la información dada por su esposo así que se quedaron más tranquilos.

Los que no estaban para nada tranquilos eran los Lan, su heredero no aparecía por ningún lado, los que lo vigilaban casualmente lo perdieron de vista hace algunos días según ellos y no sabían su paradero. Lan Yun tubo que sustituirlo en la oficina, su hermano lo apoyaba con permiso de su esposo.

Ese chico resulto ser todo menos manejable, pensaron que al concederle la mano de su hermano, quien ya era un doncel muy adulto para el, podría ser su padre, aunque eso no le importo al joven Nie Hausiang, ellos planearon la estrategia para tener otro aliado en la competencia empresarial, ya su yerno Mingjue se quedó con la fundidora de aceros y las minas, mientras que su hermano menor manejaba la empresa de tecnología robótica y cibernética.

Cumplieron su propósito pero ni se echaron a la bolsa al mocoso y el perdió a su hermano,ya que después de que se casaron con el conque de que los donceles deben estar en casa al cuidado de los hijos y el marido, reglas milenarias de los Lan, no le permite ayudar en el trabajo administrativo de Gusuing, en esta ocasión le permitió ir a auxiliarlo solo por qué Quirent prácticamente le rogó que lo dejara auxiliar a su hermano en lo que su sobrino aparecía, fue que acepto y no muy convencido.

Otra que tampoco estaba tranquila era Meyli, ya había intentado de todo para escapar de los Lan y había sido atrapada y castigada de maneras insospechadas, definitivo esa familia era tan retorcida como hipócrita, para colmo su marido se largo sin ella el muy maldito si que supo cómo escaparse y lo peor es que estaba sospechando que su flamante hijo varón era doncel o un hombre sumiso por qué cada ves le veía rasgos más afeminados, así que ese castigo todavía se lo tenían reservado sus suegros.

Yanli, Cheng y Ning fueron a comprar algúnos obsequios para las gemelas de Ying y Yibo, a lo lejos Yanli vio una mujer que entraba en una cafetería de la mano de dos hombres, esa mujer tenía parecido a su madre, si no fuera por el tipo de ropa y el color del cabello juraría que era tu Ziyuan, entonces le dijo a su hermano que si la acompañaba a ver dentro del local quizá encontraba algo con que defenderse en caso de que se atreviera volver a chantajearlos.

Cheng tomo la mano de Yanli y caminaron dentro de la tienda pero al dar el paso dentro de esta cheng enfrenó de repente, sus ojos comenzaron a derramar lágrimas y salió corriendo lo más rápido que pudo hacia el estacionamiento se subí al coche y se encerró dentro, solo se oían sus gritos y llanto , Yanli asustada le marco a su cuñado para que la alcanzará en casa pues solo el podía sacar a su pequeño hermano de ese estado de histeria.

El chófer llegó a la casa ahí su cuñado ya los estaba esperando, al recibir la llamada de su cuñada se preocupo muchísimo, más o menos se hizo una idea de lo que ocurría por lo poco que le contó Yanli de la escena que vieron en la cafetería, se acercó al auto, tocó la ventanilla y le dijo a su esposo, mi amor se lo que estás sintiendo ahora y te doy la razón de estar molesto, dolido y con ganas de destrozar cosas.

Me dejas llevarte arriba para que entre los dos lo resolvamos por favor mi cielo estás asustando a tu hermana, abreme la puerta , como si fueran palabras mágicas Cheng abrió la puerta y se lanzo llorando, maldiciendo e descargando su dolor en el fuerte abrazo de su esposo este lo levanto de los brazos y el enroscó las piernas en su cintura como un koala. Yanli solo miraba la escena ya un poco más tranquila le dejaría ese trabajo a su cuñado y ella volvería por Wen Ning a la plaza.

En la habitación de la ira de la casa Wen, Cheng y Xu destrozaban dos sacos de boxeo mientras decían todo lo que les provocaba irá, enojo, frustración y dolor, ahí supo que su esposo se dió cuenta de que su madre estubo detrás de su ataque sexual en las épocas de que él ya estaba comprometido para casarse.

Sabía que esa mujer no los quería para nada por como los trato como basura siempre pero nunca pensó que su falta de amor también incluía el más oscuro odio hacia ellos, que habían echo para ganarse ese odió, nada solo ser los hijos biológicos del hombre que se casó con ella después de enviudar y de fracasar en el intento de robar al esposo de la señora Wei Sarent mamá de Yin, cuando Yanli regreso a la plaza ya la mujer se había marchado y su cuñado Ning ya tenía escogido muchos regalitos para las gemelas Wang.

En el hospital Yibo estaba en la sala de espera con Suyin, Yuan, Chanze y Sarent, de repente había salido la doctora Wen a decirle que ya estaban listos para recibir a las pequeñas que igual a su padre doncel iban a nacer desesperadas por salir al mundo impacientes y con drama y todo, así que Yibo llamo a sus suegros y estos llegaron en menos de 10 minutos

Iban a ir por más bocadillos pues Chanze comía como si le precisara mucho vaciar la charola de los aperitivos, cuando la doctora Wen les dijo que ya habían nacido las pequeñas Shunyi y Shinyu nombres escogidos por la madre orgullosa de sus bellos retoños, les pidieron paciencia, tenían que esperar que los doctores revisaran a las bebés y las enfermeras pasarán a Yin a una habitación, el parto había sino natural sin necesidad de la cesárea así que la recuperación sería casi de inmediato.

Yibo tomo a su bebé en brazos y le dijo, mi amor, mi niño hermoso, el primogénito de mi familia y heredero de empresas Wangries ya eres hermano mayor, tienes muchas responsabilidades con tus hermanas, mi presiosa mantequita, además ahora deberás prestarle tus tesoros a ellas por qué al ser más chiquitas las necesitan más, verdad que serás un buen hermano mayor mi vida.

Yibo observo a su hijo esperando su reacción pero este se quedó estático como si no lo estubiera escuchando, le preocupo mucho pues el siempre expresaba con gestos, llanto, balbuceos o usando su cuerpo lo que sentía, había aprendido a leer esas señales en su bebé pero ahora no lograba descifrar por qué estaba así, Yuan cariño, mi amor que pasa, apenas iba a entrar en pánico cuando el bebé lanzo su cuerpo, abrazando con sus pequeños bracitos su cuello y llorando sonoramente sobre su hombro.

Yibo se levantó con el bebé en brazos sobaba su espaldita, le daba consuelo arrullando como había visto que su esposo lo hacía, pero Yuan parecía aumentar su llanto, salió de la sala de espera y camino por el pasillo intentando calmar el llanto de su hijo, al no poder hacerlo también el comenzó a derramar lágrimas silenciosas, mientras le pedía a su bebé que parara, pues mama lo mataría si se lástima su garganta de tanto llorar.

Hijo basta por favor, que puedo hacer para que pares, ya no se que más hacer cariño no me hagas esto por favor, no cuando tu mami no está aquí para ayudarme, se pegó a una de las paredes del pasillo, abrazo más fuerte a su bebé, este poco a poco comenzó a bajar la intensidad de su llanto hasta que se convirtió en sollozos apenas audibles, Wen Quing se acerco con una caja de pañuelos de papel, Yibo limpio sus lágrimas y la siguió ella venía a decirle que ya podía pasar a ver a su esposo e hijas cuando vio el drama de los hombres Wang en pleno pasillo.

Ese bebé no era nada de esos dos pero parecía la copia exacta del porte de señor Wang y el dramático y carisma de su mamá Yin, si no supiera que no son nada más que personas que cruzaron camino por casualidad, diría que es el hijo perdido y encontrado de ellos dos.