Capítulo 15: Encuentros desafortunados

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TW: violencia

Narra Itzi

Había pasado ya un tiempo desde que me mudé a mi verdadero hogar.

Las navidades se acercaban y con ellas mi cumpleaños y el de Theo.

Ya casi volvíamos a ser los que éramos en sexto año. Volvíamos a estar más unidos, solo que esta vez Draco y yo hacíamos de sujetavelas a un nuevo nivel.

Nosotros dos habíamos vuelto a hablarnos y las cosas ya no eran tan incómodas.

Estaba tranquilamente pegando fotos en la pared de mi salón cuando el sonido de unos golpes en la puerta me asustó demasiado. Dejé lo que estaba haciendo y salí a recibir a quien era.

Narra x

- ¿Entonces es cierto qué ya no vive en Italia? -pregunté sin poder creerlo

- Es cierto, ahora vive aquí, cerca de la casa de su hermano.

- ¿Y es seguro que no habrá nadie en el vecindario?

- Es seguro, yo mismo me he hecho cargo de que solo esté ella

- Muchas gracias por la ayuda

- No es nada, además, ya es hora de que alguien ponga a esa niña problemática en su sitio.

Esa había sido la conversación exacta que tuve con él para averiguar dónde ella se encontraba. Ahora mismo estaba parado en la puerta, esperando a que el amor de mi vida me abriera para que así pudiéramos estar el uno con el otro para siempre que yo quisiera.

Narra Itzi

Abrí la puerta y esta vez si que me encontré con alguien que jamás esperé que estuviera ahí.

Therence estaba apoyado en el marco de la puerta y cuando me vio me miró de arriba a abajo con una mirada un tanto extraña.

- ¿Qué mierda haces aquí, Therence?

- Buscarte, lo que he hecho desde que me hiciste esto -habló para después señalarse la mejilla, en la cual había una cicatriz ya sanada de aquel puñetazo que le di cuando se lo ganó en sexto año

- Estás loco -fue lo único que pude decir

- Estoy loco, pero por ti

Después de eso me empujó hacia dentro y cerró la puerta. Yo comencé a gritar con todas mis fuerzas, esperando ser escuchada, y cogí las tijeras que había encima de la mesa. Él se acercó a mí y sin siquiera darme cuenta consiguió inmovilizarme. Lo único que pude hacer fue gritar, así que lo hice. Me tiró al suelo y se subió encima de mí.

- Para de gritar, ¿o es que quieres que alguien te escuche?

Narra Draco

Estaba a punto de dirigirme a casa de Emmett Nott, ya que nos había citado para decirnos algo.

Salí a la puerta y entonces escuché algo raro, comencé a prestar más atención y me di cuenta de que rean gritos.

Escuché mucho más atentamente y descubrí que venían de la casa de Itzi.

Rápidamente corrí hasta llegar allí. Cuando llegue me encontré con la puerta cerrada. Recordé que ella una vez me mencionó que tenía una llave de repuesto escondida entre la tierra de la maceta de al lado de la puerta.

Como un loco comencé a cavar entre la tierra. Al fin encontré la llave. Abrí la puerta con toda la rapidez que puede y lo que me encontré fue lo peor que alguna vez había visto.

El maldito hijo de puta de Therence Higgs estaba subido encima de ella, que estaba tirada en el suelo.

Sin pensarlo dos veces me acerqué.

Cogí a Therence de la camiseta y lo tiré a otro lado, él me miró desde el suelo y pareció sorprendido. Antes de que pudiera llegar a levantarse me tiré encima suya y comencé a pegarle puñetazo tras puñetazo. La sangre que salía de su nariz con cada golpe que le arreaba caía sobre mis puños y sobre mi camisa blanca de vestir. Una vez que no se movía me separé de él y fui con ella.

Ella estaba sentada detrás del sofá con las rodillas apretadas contra el pecho. Estaba llorando y se notaba a leguas que no podía respirar bien.

Volví a mirar donde hube dejado a Therence y vi que ya no estaba. Eso de un modo me tranquilizó y de otro me aterrorizó. Volví a mirarla.

- Tranquila, se ha ido, estás a salvo. -dije lo más calmado que puede mientras la abrazaba.

Ella se aferró a mi cuello y allí comenzó a llorar con un volumen mucho más alto.

- Gracias, de verdad que estoy muy agradecida, gracias por llegar a tiempo -dijo pausadamente entre sollozos y bocanadas de aire.

La estuve tratando de tranquilizar por un rato más. Nos levantamos y fuimos al sofá. Ella se sentó, yo me dirigí a la puerta y la cerré suavemente. Me senté a su lado.

- ¿Necesitas algo? -pregunté intentando ayudarla

- Necesito que no te vayas y que traigas a mi hermano.

- Voy a salir un momento a por tu hermano, te voy a cerrar la puerta y tu no la vas a abrir. Vas a estar a salvo, te lo prometo.

Cuando ella me dio el visto bueno salí de la casa.

Habían pasado dos horas desde la hora a la que el señor Nott nos citó, así que Theo debería de estar ya en su casa.

Llamé a la puerta repetidas veces y al fin me abrieron. Sin decir nada tiré del brazo de Theo y lo llevé hasta la puerta de la casa de su hermana.

- ¿Qué pasa? -preguntó sin entender nada

- Therence ha aparecido y no se que quería hacerle a tu hermana. Escuché gritos y vine corriendo a ver que pasaba. Me encontré con Therence encima de tu hermana.

- ¿Dónde está?, que lo voy a matar aquí y ahora

- Lo golpeé hasta que quedó sin fuerzas y luego escapó.

Abrí la puerta y Theo entró. Automáticamente fue hacia su hermana y la abrazó. Ella comenzó a llorar a mares, así que yo también me acerqué y la abracé.

Han pasado dos semanas desde aquel horrible día, Itzi está ya mucho mejor, ya vuelve a sonreír. No ha podido dormir sola desde entonces, así que Theo, Blaise y yo no hemos quedado todos los días en su casa.

Ya ha comenzado a salir a la calle. De verdad que lo ha intentado y que lo está intentando. Ella es fuerte, conseguirá salir de esto, lentamente pero lo conseguirá.

Ahora mismo estoy en casa de Alex, en Italia, contándole como ella lo está llevando. Pensé que sería importante decirle lo que pasó,  ya que Itzi y él son de los mejores amigos que existen.

Volví a su casa y ella estaba sentada en el sofá viendo la televisión. Me miró y me saludó, luego dió palmadas en el sitio de su lado del sofá, invitándome a que me sentara.

Me senté obedientemente y cogí un poco de la comida que ella estaba comiendo.

𝐒𝐓𝐀𝐘; Draco MalfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora