Capítulo 4: Tus palabras

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Narra Itzi

Aquella carta me había destrozado, pero no podía volver a desmoronarme. Terminé de escribir aquella carta que empecé hace ya más de una semana y decidí enviársela.

Narra Draco

Una semana y media, hacía una semana y media que había enviado la carta. La envié a Italia, a la casa de Monique, ya que fue el primer sitio en el que se me ocurrió que podría estar ella.

Me estaba recomponiendo un poco, pero algo me decía que pronto volvería a caer.

Eran las dos de la tarde cuando mi madre llamó a la puerta de mi cuarto.

- Tengo noticias -dijo ella

- ¿Qué?

- Ha llegado esto -dijo sacando de detrás de su espalda un sobre

- ¿Qué es eso?

- Es una carta, de quien tu ya sabes. Te la dejo aquí, léela tranquilo. Y pase lo que pase, no intentes cambiar su opinión. -terminó de hablar mientras dejaba el sobre encima de mi escritorio y se marchaba cerrando la puerta. 

Me puse en pie de un salto y cogí la carta rápidamente. Me senté en la silla del escritorio y abrí aquel sellado sobre con mucho cuidado.

Querido Malfoy,  

Te escribo esta carta para poder quitarme el gran peso que tengo encima.

Puede que en esta carta no sea nada de ordenada y que te sorprendas de lo que pueda llegar a decir, pero me importa lo más mínimo lo que pienses sobre ello.

Espero que hayas conseguido lo que querías, porque puede haya corazones rotos, pero te aseguro que el mío es el único que sangra cada vez que mi mente te recuerda.

Se que en cierta parte puede que haya sido mi culpa, pero si me disculpas, no se en qué he podido equivocarme, la verdad. 

Tú y solo tú, me has hecho darme cuenta que no espere nada bueno de las personas.

Tú y tu maldito apetito egoísta.

Lo jodiste todo y yo confiaba ciegamente en tí.

Recuerdo lo calmado que te encontrabas. Habías estado raro, pero pensaba que sería por lo de la guerra. 

Ahora me tengo a mí, y solo a mí. 

Te deseo lo mejor, y espero que eso te duela más que todo lo que te ha dolido en la vida.

Eres la persona más egoísta que conozco y eso que pensé que te conocía muy bien. 

Eres exactamente igual a como eras en tercero. Un niño estúpido, egoísta y que no sabe nada de lo quiere.

Y si quieres pedirme perdón, quiero que sepas que tus disculpas me importan muy poco, espero que te quede claro.

Y aunque no lo parezca, he estado muy mal, no mal, si no fatal.

Me dejaste de hablar , incluso de mirar, de un día para otro, y luego, el día de la guerra llegaste tan tranquilo y me contaste que casi te habías muerto por culpa del estúpido de tu antiguo amigo. 

𝐒𝐓𝐀𝐘; Draco MalfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora