ZALE

XI

Me encontraba en Ambrosia, finalmente había regresado y me encantaba.

Fui muy bien recibida, y ni hablar de que me sentía algo poderosa. Podíamos hacer lo que queramos sin el miedo a que nos descubrieran.

Y adivinen qué, somos expertos.

Intentábamos planear alguna actividad para el grupo, pero de repente mi vista se fija en la entrada principal.

Me quede paralizada al ver a una persona totalmente desconocía ingresando, sin antifaz, y totalmente aterrada por lo que veía.

Oh no…creo que siguieron a alguno de nosotros.

Todos siguieron mi mirada, y quedaron igual que yo, paralizados.

—¡¿P-pero qué demonios?! —Maculla la chica asustada— ¡M-Mandy! ¡¿En qué mierda estas metida?!

Pensé que la tal “Mandy” seria astuta y no se levantaría para no revelar su identidad, pero me equivoque.

Hottie se levanta, temblando al ver a mi parecer a su hermana, nos habían descubierto por completo.

Y nosotros ahora sabemos su identidad.

—¡¿Qué mierda hiciste hermana?! ¡¿Por qué me seguiste?! —Exclama Hottie alterada, ya que sabe muy bien las consecuencias de los actos de su hermana.

—¡Llamare a la policía! —La chica comienza a correr, pero no llego muy lejos ya que Eagle la alcanza sin ningún esfuerzo.

No tardo en tomarla y traerla devuelta, la chica pataleaba y gritaba, pensé que Hottie se negaría o protestaría por su hermana, pero ella permaneció en silencio.

Lo cual no me sorprende, su mayor deseo es matar a su hermana.

¡Y que suertuda! Aquí en Ambrosia tus deseos se vuelven realidad.

—Átala a la silla —Ordena Tadeo, de inmediato le obedecen, yo solo me quede observando.

La chica intenta forcejear, pero ya estaba muy cansada.

—¿Por qué me seguiste? —Interviene Hottie, o mejor dicho Mandy—¡¿Por qué fuiste tonta y no me dejaste en paz?!

Su hermana suspira, y la observa con mucha preocupación.

—Y-yo…estaba preocupada por ti Mandy, estabas muy extraña últimamente ¡Ya no eres la niña dulce de antes!

—¡POR TU MALDITA CULPA!

Creo que es muy buena idea interrumpir.

—¡Pero cuéntanos Mandy! ¿Por qué odias tanto a tu hermana? ¿Por qué tú deseo es matarla? —Digo mientras toco el cabello crespo de su hermana, ella me mira con odio.

Pero también estaba aterrada, lo podía ver.

—¿Q-que? —Maculla casi sin aliento.

Ella busca una respuesta negativa de parte de su hermana, pero al ver cierta oscuridad en Mandy palidece.

—¡Si! Explícanos Mandy —Se une Tadeo al juego.

Los demás se miran entre sí, algo incomodos.

La mirada de la pequeña Mandy se transforma, sus pupilas estaban totalmente llenas de odio, envidia y de muchas otras cosas más.

—Y-yo…siempre te he odiado, siempre fuiste la preferida de mamá y papá…mientras a mí me ignoraban tú disfrutabas de tu vida, siempre fui tu sombra.

Su hermana niega rápidamente, no podía creer que esa persona que estaba delante de ella era su pequeña y dulce hermana.

—¡E-eso no es cierto Mandy! ¡No dejes que ellos llenen tu mente de basura! D-déjame expli…