Surrendered to your passion

Capítulo 20

Capitulo 20

En algún lugar de Las Noches.

Rukia estaba hasta las narices de recorrer pasillos y subir escaleras ya que desde que puso un pie en el palacio del enemigo era lo único que había conseguido. Estaba a punto de perder la esperanza de encontrar a alguno de sus amigos cuando unas voces familiares le llegaron desde el fondo del corredor.

─ Quieres dejar de darme el coñazo y cerrar la boca de una puta vez.

─ Que te jodan, no pienso callarme hasta que me lleves con Inoue.

La pequeña del clan Kuchiki no podía creer lo que sus ojos la mostraban ya que las voces no eran otras que las de Ichigo y Grimmjow que se acercaban por el pasillo dándose empujones y gritándose el uno al otro como si dos amigos de la infancia se tratara.

─ ¡¡Ichigo!!─ El aludido palideció nada más ver a su amiga corriendo en su dirección al sentirse pillado infraganti con el "enemigo"

─ Ja ja, Rukia que bueno que estés bien.─ La saludo intentando salir del paso lo más dignamente posible.

─ Lo que me faltaba, otro shinigami.─ Fue el saludo de Grimmjow al sentirse fastidiado por la intromisión.

─ ¿Qué haces con ese Espada? Pensé que os odiabais a muerte.─ Le recriminó al llegar a su altura.

─ Pues ya lo ves, dicen que del amor al odio solo hay un paso. Digamos que nosotros le hemos dado en sentido contrario.─ Grimmjow para darle más énfasis a sus palabras agarró de la cintura a Ichigo y le planto un beso de tornillo dejando anonadada a Rukia.

La reacción del pelinaranja no se hizo esperar, de un puñetazo se sacó de encima a Grimmjow y agarrando a Rukia de un brazo tiró de ella en la dirección del cuarto en el que se hallaba cautiva su amiga, eso sí, totalmente sonrojado por la vergüenza de ser besado delante de la Kuchiki.

─ Cht, ya me las pagaras cuando estemos a solas.─ Le susurró Grimmjow al llegar a su altura y dejando la fiesta en paz por el momento.

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Con Ichimaru y Kira.

Después de abandonar el edificio en el que se encontraban Ichimaru decidió que el lugar más probable en el que encontrar a Orihime sería la habitación de Ulquiorra. Una vez que se lo hubo comunicado a Izuru los dos muchachos se encaminaron a su destino. Tardaron relativamente poco en llegar hasta los aposentos personales del 4º Espada pero lo que los dejó verdaderamente boquiabiertos no fue lo fácil que había resultado llegar al lugar sin ser vistos sino lo que sucedía en su interior. La escena no era fácil de calificar ya que Ulquiorra se encontraba sentado con cara de susto delante de una mesa y sobre ella un plato lleno hasta rebosar por una sustancia rosa burbujeante de la que emanaban vapores que fácilmente se podrían denominar como tóxicos. Ver a alguien tan inexpresivo como Ulquiorra con cara de pánico por un simple plato de "comida" era algo totalmente inusual y sorprendente.

─ ¡Qué bien! Llegáis justo a tiempo para la cena.─ Orihime acaba de aparecer por una puerta ataviada con un delantal y una espumadera en una de sus manos.

─ Ichimaru-sama por favor llévesela, yo asumiré por completo las consecuencias, cualquier muerte es mejor que volver a probar uno de sus platos.─ El pálido Espada viéndose libre de su tormento en menos de un segundo salió corriendo por la puerta sin mirar a atrás.

─ ¿Are? ¿Por qué ha salido corriendo Ulqui-chan? Aún faltaba el postre.─ A los dos shinigamis presentes les resbaló una gota por la cabeza, todo era demasiado surrealista.