MORT ━ Levi Ackerman [Male OC]

XXXI

Año 850.

Cuando se trataba de actuar para ayudar al resto, Dan no pensaba en más que moverse y ayudar a quien estuviera cerca, incluso si con ello debía exponer su vida a un punto que rozará con la muerte.

Dan Fischer, si es que podía mantener aquel nombre, no era más que un tonto sin remedio al que el mundo se había encargado de formar demasiado tarde, más de lo que a cualquier ser humano normal en aquellos muros.
El llanto era una de las opciones que no podía pasar por su mente cuando se trataba de actuar con rapidez, su combinación con el desespero era algo que, de una forma mayor, no debía ocurrir.

Era por razones como aquellas que trataba de mantenerse tras una ligera línea inexistente, una que separaba la poca cordura que creía seguir teniendo de la locura que todos solían decir.

Creía que corregir una idea era algo imposible, pero no podía estar seguro de una creencia con sólo pensarlo un par de veces, era por ello que ejemplos como los que Historia le había mostrado en las últimas horas lo motivaban por segundos.

── Vine para arreglar el asunto con mi destino ─ y saber de sobra que lo que estaba ocurriendo debajo del muro podía llegar a un punto similar o peor que el que la humanidad le había mostrado cinco años atrás le aterraba, una razón extra a su confianza por Historia. ─ Elegir entre huir o luchar, usted me dijo eso, capitán Levi.

── Mierda ─ Dan apretó su mandíbula al sentir los nervios de sus compañeros cercanos, todos veían lo mismo que él; lo único que podían ver ─ No tenemos tiempo, está viniendo.

Erwin llegó con ellos, con la calma suficiente para manejar la situación y calmar un poco a los presentes.

Erwin sigue siendo el tipo.

Él lo había mencionado un par de veces a personas externas, personas que preferían mantenerse alejadas de todo aquello que tuviera que ver con la violencia que se vivía dentro y fuera de los muros, pero era él quien acostumbraba a contar la mejor parte de Levi y Erwin Smith, el soldado más fuerte de la humanidad y el comandante de la legión de reconocimiento, respectivamente.
No existía persona más orgullosa de ellos en los muros que él, que aún con la reputación manchada se mantenía firme a cada uno de sus pensamientos y que no dudaba en admitir frente a cualquier persona lo mucho que confiaba en aquel dúo.

Erwin daba indicaciones a Historia y en los pocos minutos que les quedaban, Dan aprovechó para acercarse a Levi, dispuesto a hablar un poco y reponer el tiempo que habían perdido al huir como fugitivos.

── ¿Estás bien? ─ Levi lo observó con intriga, era poco usual que Dan se interesará en eso, pero podía entenderlo después de que casi fueran enterrados vivos.

── ¿Tú? ─ dijo después de asentir, sin apartar la vista ni un segundo.

── He tenido días mejores.