My Pretty Girl // Robin Arellano.

Capítulo 19.

La esperanza.

Finney Blake.

Yo quedé en shock, casi al igual que Robin al ver todo lo que le había dicho el Raptor a ella.

Debía de sentirse muy mal que cada que alguien tuviera oportunidad te recordará cómo había matado a tu hermana mayor.

Me sentía muy mal por ella, pero ella demostraba ser fuerte y valiente.

En cierto modo siempre había tenido miedo de que algo le pasara a Gwen. Y creo que la que tuvo peor suerte fue Maia.

Podía considerarla mi mejor amiga y ahora verla sufrir por culpa de él Raptor me hacía sentir verdaderamente mal.

Aunque no era muy bueno consolando a gente trate de acercarme a ella al igual que Robin para aunque sea tratar de que se sintiera mejor.

Llegue yo primero a consolarla ya que Robin aun no reaccionaba por completo.

Me acerque y le pase un brazo por sus hombros para tratar de abrazarla aunque me era difícil ya que ella no estaba en sus mejores condiciones y tenia miedo de lastimarla o herirla de alguna manera.

Ella inmediato me devolvió el abrazo mientras us mirada seguía perdida y algunas lágrimas caían por sus mejillas, humedeciendo un poco mi camiseta.

-Maia, ¿estás bien? -le pregunté en el tono más suave que pude encontrar.

-Si... bueno, no. Pero ahora no puedo recaer, y mucho menos en el lugar donde estamos. -por fin me respondió, ahora un poco más consciente de lo que sucedía a su alrededor.

Robin se había quedado sentado, con la cabeza gacha y un poco desanimado.

-¿Y cómo estás segura de que recaerás si todo este tiempo has estado bien? -dije, tratando de animarla un poco para que no siguiera con esa mueca triste.

-Allí arriba me pasaron cosas que no querrás saber, Finn. Y creo que gracias a eso recaeré.

-No quiero entrometerme en eso, la verdad Maia. Pero espero que cuando salgamos de aquí estés mejor.

-De verdad te agradezco, Finn. -se separó de mi y me dedicó una sonrisa débil.

Al separarnos yo me levante del suelo y comencé a pasear por la habitación, buscando alguna otra salida.

Escuche pasos pero pronto descubrí que eran los de Robin acercándose a Maia y me tranquilicé.

No los interrumpí mientras hablaban y mejor me puse a planear algo porque en estos días solo había dormido y no había apoyado en casi nada.

De un momento a otro me sobresalté al sentir la mano de Robin en mi hombro.

-¿En qué piensas?

-No tengo ni idea de donde diablos esta mi mente pero trato de idear algo para salir de aquí.

-Créeme te comprendo, no es fácil entender como mierda saldremos de aquí sin antes terminar muertos.

Solté una risa baja porque no estaba de humor y no quería sonar tampoco muy seco.

-Encontraremos la forma de salir de aquí. Los tres juntos. -me ánimo Robin.