El Arte De Fingir [JELSA] (#1) ✔︎

Extra - 1

20 de diciembre, 2026

Jack Frost

El sonido del reloj retumba por todo nuestro hogar. Esa bella casa a la que nos habíamos mudado hace ya casi un año, con mi esposa. Con Elsa, mi estrella.

A medida que el segundero avanza, mis nervios se incrementan. Cada parte de mi ser siente la tensión del momento. Pero me sorprende ver a Elsa tan relajada, siendo que es un momento... Importante.

—¿Por qué te noto tan relajada? —Consigo preguntarle mientras me cruzo de brazos.

Ella aprieta esos perfectos labios que tiene y se encoge de hombros.

—Es la cuarta vez, Jack. En 5 meses —Me da una sonrisa algo apenada. —Y salga lo que salga... Estoy segura de que es por una razón.

Alcé una ceja y me aparté del mesón para acercarme a ella.

—¿A que te refieres con eso? —Le pregunto.

—A qué sabes que creo en el destino. Si la vida aún no nos tiene preparados para ser padres, entonces... Solo habrá que esperar.

Suspiré.

Si, con Elsa estábamos, por cuarta vez, a la espera del resultado de test de embarazo.

Hace casi medio año decidimos que estábamos preparados para ser padres, en todo ámbito. Queríamos hacerlo, tener un bebé. La idea nos hacía mucha ilusión.

Pero al parecer la vida no piensa lo mismo.

Porque ya 3 veces el resultado ha sido negativo. Y ahora, estamos a la espera del cuarto durante estos últimos meses.

Y yo de verdad quería hacerlo. Tener un bebé con mi estrellita, el amor de mi vida. Ser papá, cuidar de un pequeño bebé o una linda niñita.

—Sabes que no dejaremos de intarlo, Jack —Murmura con una pequeña sonrisa mientras toma mi mano. —Si da negativo, no dejaremos de intentarlo —Dice al ver como mi ánimo decae.

Apreté los labios.

—Tengo un pequeño presentimiento —Le digo.

Elsa frunce los labios, elevando la comisura derecha y se acerca para pasar sus brazos por mi torso y abrazarme.

—Sé cuanto quieres esto —Murmura. —Y yo también lo quiero. Más que nunca me siento lista para tener un hijo contigo. Pero a veces las cosas no son como las planeamos.

Correspondo a su abrazo, y hundo mi nariz en su suave cabello platinado.

Me gustaría ver, tener un niño o niña que se parezca a ella. Que tenga su cabello, sus ojos... Sus pecas. Su sonrisa.

—¿Cuanto falta? —Pregunto mientras me aparto de ella, sintiéndome algo nervioso.

Elsa se aleja para mirar el temporizador en su móvil y aprieta los labios.

—30 segundos.

—Vamos —Tomo su mano y nos dirigimos al baño, en completo silencio.

Tengo la viva esperanza de que ese test saldrá positivo, lo siento, una pequeña espina en mi corazón. Y si sale negativo yo... No sé cuanto más pueda soportar.

Segundo el doctor Arthur, Elsa no debería tener problema en quedar embarazada. Pero aquí vamos, por el cuarto intento.

Al entrar al baño de nuestro dormitorio, ambos suspiramos.

—¿Lista?

Ella asiente y yo me acerco al lavado para voltear el test que se hizo hace 5 minutos.

Cierro los ojos, suspiro sintiendo aquella esperanza dentro de mí. Volteo el test, y abro los ojos con lentitud.