El Arte De Fingir [JELSA] (#1) ✔︎

20. Veintitrés Velas

Jack

—¿Puedo hablarle a tus padre, Elsa?

Asiente levemente antes de sorber la nariz y separarse de mi, seguro que tiene  las piernas entumecidas y necesitaba estirarse un poco.

—¿Qué quieres decirles tú a mis padres? —Me pregunta con interés y la voz ronca por haber llorado tanto.

Sonrío y me acomodo acercándome a las lápidas.

—Escúchalo por ti misma.

Frunce el ceño y se acomoda a mi lado.

Carraspee, aun sorprendido de mi actitud en onda cursi. Jamás me habría imaginado antes de Elsa hacer una cosa como está. Hablarle a personas que dejaron de existir.

—Iduna y Agnar —Comienzo leyendo los nombres en sus lápidas. —Es un gusto saber de ustedes. Me gustaría presentarme por mi mismo, mi nombre es Jack Frost y soy el futuro novio y esposo de su hija, seguro que padre sus nietos también.

Cuando Volteé a ver a Elsa, estaba completamente sonrojada.

—Jack...

—Tengo 22 años, creo que soy unos 3 meses menor que su hija, pero no importa —Eso le sacó una sonrisita a Elsa. —Estaremos juntos igual, aún no somos novios porque su hija es muy testaruda y debo admitir que metí la pata bien feo y estoy en la cosa de solucionarlo, porque todos cometemos errores, la cosa es como los solucionamos ¿Verdad?

Elsa asiente levemente cuando volteo a verle, y luego sigo hablando.

—La he conocido en la universidad y nuestra historia es bastante loca, pero ya quedará para otro día. Quiero decirles, que amo a Elsa, estoy enamorado de ella y no me asusta decirlo.

Elsa, nuevamente se sonroja y pequeñas lágrimas caen por sus mejillas.

—Eres un idiota, Jack ¿Cómo haces estas declaraciones estando yo sensible? Me haces llorar —Dice con la voz quebrada.

Rei un poco.

—Y como pueden escuchar, también soy un poco idiota, me lo repiten mucho, pero no afecta. —Elsa rodó los ojos y apoyó la cabeza en mi hombro. —Ha sido un gusto conocerlos, gracias por traer a este mundo a la chica más maravillosa que puede haber.

Pasé mi brazo por la espalda de Elsa, abrazándola contra mi y nos quedamos en silencio un buen rato, hasta que tuve una idea.

—Espera, ya vuelvo. —Digo alejándome de ella.

Confundida, Elsa asintió y yo me puse de pie para correr hacia el auto. Tomé el ramo de flores y le quité la tarjeta que decía "Feliz cumpleaños"

Cerré el auto y corrí nuevamente a donde se encontraba Elsa, me senté a su lado y ella se quedó mirando algo asombrada el ramo de flores.

—¿Y eso? —Me pregunta.

Sonreí y le quité el papel que envolvía la parte inferior, los tallos y me acerqué para arreglarlas y colocarlas junto a las otras flores que Elsa les había arreglado.

—Las compré esta tarde para cierta cumpleañera, pero, creo que aquí se ven mucho mejor ¿Qué opinas tú? —Cuando Voltee a verle, Elsa tenía los ojos húmedos y sonreía levemente.

—Me encantan, Jack —Susurra con la voz en un hilo. —gracias.

Volví a sentarme a su lado y tomé su mano.

—Vuelve a casa, Elsa. Por favor.

Ella no volteó a verme, durante largos segundos, se quedó mirando las lápidas, distraída. por un momento creí que decidiría quedarse y me mandaría al cuerno, de verdad fue mucha tensión. pero subestimaba su fortaleza si creía eso. De repente, por el rabillo del ojo la vi esbozar una pequeña sonrisa.