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Joey sonreía mientras conducía a Chandler en su apartamento, estaba muy feliz por mostrarle el regalo que tenía para ambos. Él estaba riendo por las ocurrencias de su amigo y agradecía tenerlo en esos momentos cuando tenía que tomar una decisión pronto, a pesar que Madison le había dicho que no era necesario. —Vamos, no mires. No mires. No mires. ¡No mires!

—Vale, vale, pero espero que estés vestido cuando abra los ojos—pide, dejándose guiar con una sonrisa.

—Muy bien, abre los ojos.

—Bien. —en cuanto abre sus ojos, se sorprende y se emociona cuando ve dos sillones negros de cuero y una gran pantalla de televisión. —Santa Madre del Amor Hermoso.

— ¿Hola? Acaban de renovarme el contrato—explica de igual de emocionado, contemplando los dos sillones.

— ¡Enhorabuena!

—Gracias. —sonríe y señala los sillones y el televisor. — ¿Qué tal?

—Por fin veremos Granjero último modelo como Dios manda—responde, pasando un brazo por los hombros de Joey sin dejar de mirar los objetos.

—Exacto.

—Dime, ¿cuál es el mío? —pregunta, saltando un poco por la emoción.

—El que tú quieras. Elige el que tú quieras—responde, a lo que Chandler se va a sentar en uno, lo detiene. —Ese no.

Chandler rueda los ojos divertido y se sienta en el otro sillón. —Sí.

—Sí, esto es genial—comenta Joey, luego de imitar la acción de Chandler, quien se acomoda y se da cuenta de que tiene una palanca el mueble para levantar el reposapiés, entonces se mira con Joey.

— ¿Nos atrevemos?

—Atrevámonos.

Al mismo tiempo, levantan los reposapiés haciendo que exclamaran con asombro y satisfacción, pero entonces los dos reclinan los respaldos de los sillones haciendo que exclamaran más fuerte. —Esto es la gloria.

—Sí que lo es.

En eso la puerta se abre dejando ver a Madison y a Mia, esta primera con una leve mueca. —Ya te dije que estoy bien, Mia. Solo saldré un rato con Chandler.

Es ahí cuando el nombrado abre la boca al recordar que ambos irían a la ginecóloga para ver como se encontraba el bebé; Madison estaba tan asustada de ir sola, que esa sería la primera revisión.

—Cierto.

—Viejo, pero--

—Lo siento, Joe—se disculpa Chandler interrumpiéndolo mientras que colocaba su mano en su hombro cuando se puso de pie. —Más tarde vemos los guardianes de la bahía.

— ¿Por qué no te quedas con Joey, Mia? —pregunta Madison al recordar que la menor de las Green había preguntado si no era molestia que los acompañara, ya que no tenía con quien quedarse a pasar el rato. —Estoy segura que la pasaran muy bien juntos.

Joey y Mia se miran por unos segundos, pero la pareja ya se había ido antes que pudiesen decir algo. 

— ¿Estás bien?

—Sí, solo que me siento un poco cansada—responde Madison, sonríe en cuanto Chandler la apega más a él. —Lo siento por interrumpir, noté los sillones y la televisión grande... Si quieres puedes--

—Quiero acompañarte—interrumpe luego de besar su frente. —Dijimos que iríamos y eso haremos, aunque tenga un poco de miedo... Imagino que tú estás peor que yo, —hace una leve mueca, acariciando su mano con la mano libre. —Así que no pidas que me quede.

| Don't Let Me Go |《Chandler Bing》[2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora