𝗖𝗔𝗣𝗜́𝗧𝗨𝗟𝗢 𝟲.

2.1K 133 25
                                    

⏝ ꦿ

⏝ ꦿ

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

⏝ ꦿ

》𝟏𝟎 𝐃𝐄 𝐒𝐄𝐏𝐓𝐈𝐄𝐌𝐁𝐑𝐄 𝐃𝐄 𝟐𝟎𝟐𝟐, 𝐌𝐎𝐍𝐙𝐀, 𝐈𝐓𝐀𝐋𝐈𝐀

───── ❁ ❁ ─────

— 𝐓𝐞𝐧𝐠𝐨 𝐠𝐚𝐧𝐚𝐬 𝐝𝐞 𝐯𝐨𝐦𝐢𝐭𝐚𝐫. — 𝐒𝐮𝐬𝐮𝐫𝐫𝐞́ 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐜𝐨𝐜𝐡𝐞 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧𝐚 𝐦𝐚𝐧𝐨 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐞𝐬𝐭𝐨́𝐦𝐚𝐠𝐨 del mal estar que llevaba.

— ¿Por los nervios?

— Que va. — Negué mirando al chico que tenía frente a mí. Lando. — Por el desayuno. No sabía que los huevos rotos me iban a sentar tal mal, y claro, como tenían pintaza me he comido dos.

— Uff, que horror.

— Si necesitas que paremos nos dices, Eli.

— No, no, si ya no queda nada para llegar. — Dije esta vez mirando a Sabrina.

Estábamos los tres sentados en el coche que nos iba a llevar al circuito de Monza.

Ambos iban el uno al lado del otro, yo atrás. Sin duda una imagen digna de ver. Y curiosa también. El chico al que el compromiso no le gustaba demasiado y la chica a la que las relaciones estables le iban más que a un tonto un lápiz.

Hacían buena pareja.

— Vas a tener suerte, porque estamos a punto de llegar. — Lando señaló un cartel con la mano y tanto Sabrina como yo nos giramos de golpe a verlo. — Esa es la entrada por donde vamos a pasar en cinco minutos.

— ¿La entrada del Paddock? — Preguntó Bri.

— Sí, esa misma.

Sonreí orgullosa a mi amiga. Mi clase exprés sobre la Fórmula Uno había servido para algo después de todo.

— Me muero, es enorme. — Comenté boquiabierta. Podía tratarse de un circuito clásico y permanente, pero eso no quitaba que la remodelación de esa zona hubiera superado a muchos otros circuitos.

Me iba a perder.

— Lo es. Y como precisamente eso ha supuesto un problema muchas veces porque la gente se suele perder, hace poco, creo que el año pasado, decidieron poner indicaciones de por dónde ir a cada sitio del Paddock. Cafetería, escuderías, talleres... todo. — Explicó Lando, desabrochándose el cinturón.

Habíamos llegado.

— Vamos, que si nos perdemos es que somos tontas.

— Más bien... ¿despistadas? — Corrigió el chico sonriente.

— Tontas, Lan. Lo puedes decir en mayúscula hasta si quieres.

— Bri tiene razón, puedes llamarnos tontas en ese aspecto. Sobre todo, a mí, la orientación no es mi punto fuerte. Y dudo que el Google Maps funcione en este lugar.

HEARTBREAK GIRL ; charles leclercDonde viven las historias. Descúbrelo ahora