𝙋𝙚𝙩

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Rebornplay

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Reborn tiraba las últimas latas de monster en el cesto de basura. Suspiró. Ya tendría que salir nuevamente para buscar un paquete de la bebida energética, o más fácil, comprar en línea y que su compra llegara directamente en su morada. Su adicción cada vez se afianzaba más. Cierto rubio peliteñido le regañaba a cada rato diciendo que no tomara de esa bebida, ya que es dañina, pero de vez en cuando este se tomaba una. Desde entonces, ya no podía discutir con el castaño.

Limpio sus manos luego de escuchar las puerta de su piso ser tocada, la abrió sigilosamente y se encontró con la presencia más esperada del día. Aunque con una misteriosa y gran caja. Con el ceño fruncido, intentaba recordar si había comprado algún objeto de gran tamaño.

—En mis tiempos se saludaba, Reborno— masculló con sus orbes entrecerrados.

—Perdóname, my little sun— dijo divertido, plantando un beso en la mejilla pecosas del más bajo de altura.

—Perdonado, abuelo— contestó repitiendo la acción de Reborn para luego adentrarse en el cálido hogar de este.

Auron dejó cuidadosamente la caja en la mesa sin revelar su contenido, dejando descolocado a Reborn.

—¿Qué coño has traído?— cuestionó, visualizando de manera curiosa los multiples agujeros que estaban al rededor del cartón.

—Descúbrelo por ti mismo— respondió con la curva de sus labios siendo elevadas sin pena alguna.

El castaño desconfiado, paseando su mirada en su pareja, abrió delicadamente la tapa de la caja y quedó atónico, sin palabras.

—Raúl.

—¿Qué? ¿Muy bonico, no?— Auron estando detrás de Reborn, apoyó su cabeza en el hombro de este —Cuando lo vi, pensé en ti.

—¿En mi? ¿Tú eres gilipollas?— enarcó la ceja, procesando lo que acaba de ver.

—No, bueno, un poco si, pero ese no es el caso— atrapó en sus brazos lo que contenía la caja —. Mira, es tú nueva mascota. Un gato.

El que solía estar en traje, miraba atentamente al gato que tenía el rubio en sus manos, o mejor dicho, su gato. Un pequeño felino de unos aproximadamente dos meses, con un peludo, suave y sedoso pelaje gris claro, y sin falta; esos hipnotizado por esos grandes ojos color miel amarillento, los cuales miraban su alrededor intrigado.

—¿Y...?— sin dejar hablar a Reborn, dejó en sus brazos al gato, quién se acurrucó en ellos, aferrado en el jersey que envolvía sus fornidos cuerpo —Los ojos amielados del capullo son...atractivos, como los tuyos— miró con su mirada oscura por encima de sus hombros a su pareja, quién se sonrojó abruptamente por el comentario.

—¿Cómo sabes que es capullo y no capulla?— preguntó, evitando el halago de Reborn.

—No tenía idea, solo fue una suposición.

—Efectivamente, viejo. Ahora tienes que escoger un nombre para este chavalin.

Sonrió ampliamente al ver a su pareja y su nuevo "hijo". Era una imagen que nunca en su vida olvidaría. Sabía perfectamente que Reborn no quería un acompañante animal, pero a los ojos de Auron, el castaño se veía muy bien y feliz con el gato, ya no tendría que pasar días solo y decaído por su ausencia, cuando no podía ir a su hogar a visitarlo o no podían verse por trabajo.

—GodCat me mola— encogió sus hombros, esperando alguna respuesta del rubio.

—Venga, vaya nombre de mierda— calló sus palabras cuando recibió la penetrante e intimidante mirada de Reborn —. Bueno, está bien— rascó su nuca nervioso —pero hay mejores, como Conway Junior o Pogo.

Por la buena y sarcástica broma del rubio, Reborn negó con la cabeza divertido, pensando en un buen nombre para su nuevo hijo.

—¿Y qué tal Fénix? Cómo el ave Fénix— murmuró pensativo —Renacer.

—Bua' le queda espectacular. Por fin tienes buenas ideas— bromeó escuchando al castaño bufar.

—Aunque, a decir verdad, me gusta más en inglés: Phoenix.

—Ni de coña.

—Pero...

—No, Fénix esta chulo, y le queda el nombre— acarició la pequeña cabeza del felino, ahora llamado, Fénix.

—Bien, ¿pero que pensarán los trajeados del gato si en algún momento lo ven en stream?— murmuró pensativo. Anteriormente había charlado con su chat sobre las mascotas y  la razón por la cuál no quería una.

—Joder, Reb, no te preocupes por eso. Tus trajeadas y trajeados estarán felices de verte con Fénix. Podría decir que, conociendo a tu fandom, serás tendencia en twitter cuando lo muestres— dejó caricias alrededor de la espalda del castaño, dibujando finas líneas invisibles sobre la tela de la camiseta —. Cómo no puedes decir que te lo regalé yo, dirás que te lo obsequio una persona que amas y que es muy especial para ti.

Mientras que Reborn escuchaba atentamente las palabras de su amado, dejó suelto al felino en el suelo, para que recorriera y reconociera su nuevo hogar por si solo.

—¿Ah si?— se acercó sigilosamente al rubio para atrapar de manera suave su cintura —¿Por qué estás tan seguro de ello?

—Porque te conozco y se que dirías eso, cariño. No tienes que decir que me amas, no tienes que decir que soy tuyo. Sé muy bien como eres y ya estudié tus sentimientos hacía mi.

–Ahora mi novio salió inteligente, que lindo— plantó un casto beso en los suaves y finos labios de Auron —Te adoro.

—Y yo a ti, Reb. No sabes cuanto.

Entre palabras lindas y mimos, risas salieron de sus bocas cuando Fenix se acariciaba a si mismo con las piernas largas de sus dueños, pasando su suave cola por las extremidades de los más altos, causándoles cosquillas.

Ya no podían pedir algo más, se sentían más felices y vivos que nunca.

𝙊𝙣𝙚 𝙎𝙝𝙤𝙩𝙨 ; Intenabo y RebornplayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora