Capítulo 22: La marca

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Aiden

Aún no puedo sacar de mi cabeza todo lo que pasó anoche, el regalo de Lucía fue la mejor maldita cosa que me han dado en la vida, sentir su cuerpo retorcerse de placer por mis caricias, arrancarle esos gemidos, hacerla mía (en el sentido general de la palabra), no tiene comparación con nada que haya experimentado antes. Desde esa noche no puedo evitar sentirme como un maldito hombre de las cavernas todo posesivo y voy por ahí gruñendo a todos los tipos que se atraviesan en nuestro camino. No es que antes no me gustara marcar mi territorio pero el hecho de ser su primero me da derecho a ser un poco neandertal o al menos eso creo.

–Debes dejar de asesinar con la mirada a todos los chicos Aiden– protesta ella mientras vamos a la pizzería en la que quedamos con los chicos.

– Es que parecen perros babeando por un hueso– le digo molesto.

– Por favor, ni que fuera Scarlett Johansson– comenta sarcástica.

– No, pero eres una chica muy sexy Poppy y sobre todo eres mía– le digo atrayéndola hacia mí y dándole un pequeño beso en la nariz que la hace reír.

– Hicimos el amor, no un pacto demoníaco por mi alma–

–Me dices demonio y haces el amor conmigo, así que por consiguiente hiciste un pacto por tu alma–

–No voy a dejar que vuelvas a ver Supernatural– me señala con el dedo sobre el pecho.– Ahora solo entremos que nos están esperando–

Entramos en el Pizza Lovers Bistró y encontramos a los chicos en una de las mesas de la entrada, las mesas y sillas son de madera pulida y clara sin manteles, es un buen lugar, sobre todo por la comida.

– Holaaa a todos– decimos al sentarnos entre Gía y Gabriel quienes están acompañados por sus respectivas parejas, porque sí, a pesar de que no lo saben ni en su casa ni en la escuela, Gabriel ha admitido ante el resto de los chicos que está saliendo con Andrew y se lo han tomado de maravilla. Selene y Lucas también están aquí, parecen chicles de tan pegados.

– Ya se estaban tardando, pensamos que no vendrían– nos dice Selene.

– Tal vez estaban ocupados mi diosa Luna– le dice Lucas haciendo que la sangre suba a su cara.

–¿Diosa Luna?– interrogo arqueando las cejas.

– Selene, es la diosa griega de la Luna– me responde Lucas depositando un beso en la mejilla de su novia.

– Una diosa, eso es muy maduro Harris– lo pincho.

– Tú me llamás como un personaje animado de Disney, no puedes hablar de madurez– anota Lucía señalándome con el dedo y haciendo que todos rían.

– Esa es mi hermanita bella defendiendo mi dignidad– le dice Lucas estrujando los cachetes de Poppy.

– Saca tarado– bromea ella apartándole las manos y volviendo a reír.

Es increíble lo bien que se llevan después del incidente del bosque, no voy a negar que estuve un poco celoso cuando la vi aparecer en los brazos de Luc, pero la verdad es que sé que Selene lo tiene comiendo de su palma y me agrada que mi primo y mi novia se lleven bien,  hasta van a ser familia.

– Bueno, si Lucas se convierte en tu hermano, eso haría a Aiden algo así como tu primo, eso es raro– bromea Gabriel.

–¡ O no por Dios, es una situación de familia política y así!– dice Lucía ofendida.

– Cariño, solo lo hacen para molestarte– la tranquilizo, besando su pelo.

Nos traen las pizzas que ordenamos y deboramos todo como si nos fuera la vida en ello. De repente Gía se tapa la boca y sale disparada hacia el baño. Las chicas van a seguirla pero Dylan las destine.

¿Y qué si te desafío?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora