-Forget it, Mike

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Las pequeñas gotas de lluvia comenzaban a caer por el tranquilo pueblo de Hawkins.

—¿Escucharon eso? Suena como... un trueno. Pero no, esperen, es... ¡una horda de zombies juju!–William Byers estaba feliz, al fin había conseguido que sus amigos accedieran a jugar D&D con él. Había extrañado eso–.Caballero Mike, tu turno.

—¿Qué debo hacer?–Le cuestiono a lucas, su voz sonaba aburrida.

—¿Atacar?

—Okey, atacó con mi azotador.–Mencionó colocando la pieza de el juego en la mesa.

—Uf, ¡fallaste! Tu azotador choca con la piedra, la horda zombi avanza hacia ti.–Will tiro los dados a la mesa–.Y el juju muerde tu brazo, te desgarra ¡agh!... siete puntos de daño.

—¡Oh, no, mi brazo! Lucas, mira mi brazo.–Dijo Mike en un tono de burla.

Lucas sólo se río.

—Caballero Lucas, ¡la horda zombie ruge! ¿Decides pelear o escapar?–Cuestionó Will ignorando la pequeña burla, solo quería jugar y pasar tiempo con sus amigos.

Cuando Lucas iba a responder, el teléfono sonó, haciendo que todos desviaran su atención hacia el.

—¡No! Es una distracción, ¡una trampa!–Will se levantó de su aciento rápidamente–.No respondan.

Michael y Lucas se levantaron enseguida, ignorando completamente lo que dijo Will.

Mike tomó el teléfono y lo puso en su oreja tan rápido como pudo.

—¿Ce?–hubo un corto silencio–. No, lo siento, no estoy interesado.–Respondió Michael para después colgar, estaba decepcionado–.Vendedores.– mencionó con amargura.

—Tal vez deberíamos hablarles–.Sugirió Lucas con suavidad.

—¿Podemos hacer eso?–Cuestionó Mike, no quería que le dieran esperanzas de nada.

—Eso creo.

—Si, pero ¿qué les diremos?

—¡No diremos nada!–Will azotó su bastón contra el suelo–.La tribu Khuisar te necesita.

"Yo te necesito."

—De acuerdo, entonces–.Michael estaba dispuesto a darle punto final a esto, no quería jugar–.Usaré mi antorcha para incendiar la cámara, sacrificándonos. Matamos a los jujus y salvamos Khuisar y somos recordados como héroes en las memorias de los Kalamar.

—Victoria.–Termino Lucas mientras chocaba los cinco con Mike, eso había sido fácil.

A William no le gustó eso, ¿Por qué era tan difícil pasar un rato con sus amigos?

Tiro su bastón a la mesa con enfado.

—Muy bien.–Byers se quitó el gorro de mago sin cuidado–.Ustedes ganan.–Quitó la música y comenzó a guardar sus cosas, estaba demasiado molesto para intentar disimularlo–.Felicidades.

—Will, solo estaba bromeando.–Era obvio que Mike se dio de el cambio drástico de actitud de su amigo.

A William no le importó, le dio la espalda mientras se quitaba la capa.

—Oye, terminemos de jugar.–Pidió mike con suavidad–¿Cuánto más dura esta campaña?

—Solo olvidalo, Mike.–Respondió William, cortante.

"De nuevo esa picazón."

—No, queremos seguir jugando.–Michael miró a Lucas–¿Cierto?

—Si, por supuesto.–Respondió Lucas, no quería que su amigo estuviera molesto con ellos.

—Llamaremos a las chicas después.–Habló Michael.

—Dije "olvídalo, Mike"–William sintió como su voz se quebró un instante–.Me voy.

—Vamos, Will...–Suplicó Lucas, mientras trataba de evitar que este se fuera.

—¡Quítate!–William lo empujó fuera de su camino y comenzó a subir las escaleras con rapidez. Mike lo siguió.

A Byers no le importaba si estaba lloviendo a cántaros, nada le impediría irse de la casa.

Mientras caminaba hacia la puerta sintió una gran necesidad de toser, no entendía por qué siempre pasaba esto.

"No lo haré."


Abrió la puerta del garage y se dirijo hacia su bicicleta.

—¡Will, vamos! No puedes irte, está lloviendo.–insistió Michael–.Dije que lo sentía, ¿de acuerdo? Es una campaña genial, es muy buena... solo que ahora no estamos de humor.

—Si, Mike. Ese es el problema.–Will sentía la necesidad de llorar, de nuevo la sensación de que algo subía por su garganta lo invadió–.Nunca están de humor, ¡arruinan nuestro grupo!

—Eso no es verdad.–Contestó Michael.

—¿En serio? ¿Dónde está Dustin?–Desde el día en el que Dustin había vuelto, no lo había visto.

Mike guardo silencio mientras pensaba.

—¿Ves? No lo sabes y ni siquiera te importa.–Continuo William, estaba harto de que todo el tiempo Mike prefiriera a once que a sus amigos–.Y claro, a el tampoco ¡y no lo culpo! Estas destruyendo todo, ¿y para qué? ¿Para intercambiar saliva con una estúpida chica?

Tal vez había ido demasiado lejos al llamar a once "estupida", después de todo, era su hermanastra. Pero lo siguiente que escuchó, le dolió más que mil insultos.

—Once no es estupida, no es mi culpa que no te gusten las chicas.–gritó Mike con descaro.

Inmediatamente, el semblante de Will cambió de uno de enojo a uno de tristesa y sintió como algo apretaba su corazón y el aire abandonaba de sus pulmones.

Michael se dio cuenta de lo que dijo y rápidamente, buscó algo que decir para intentar arreglarlo.

—No quiero ser un cretino, ¿Okey?–comenzó a decir con suavidad–. Pero ya no somos niños... es decir, ¿en qué estabas pensando? ¿Qué nunca ibamos a tener novias? ¿Qué nos íbamos a quedar en mi sótano todo el día, jugando para siempre?

"Si, eso creí"

—Si, creo que sí.–William necesitaba largarse de ahí o lloraría enfrente de Mike. Aclaro su garganta, intentando quitar la necesidad de toser y continuó–.Eso pensaba.

Subió a su bicicleta ante los ojos sorprendidos de su amigo y comenzó a avanzar.

No le importó que se estuviera quedando en ese lugar durante las vacaciones.

No le importó que Mike le pidiera que regresara, no quería seguir ahí.

No quería seguir viéndolo mientras deseaba que fuera a él al que viera con ojos de enamorado.

Blue and Yellow ; Byler AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora