Polos Opuestos [BL]

Extra 2: Una noche con mis amigos

(Arthur)

Agradecí las vacaciones, ya que me permitieron tomar un respiro de todo, incluso de la rutina diaria en la cafetería. Aunque mis días seguían siendo bastante regulares, hoy habíamos planeado ir al cine, todos juntos.

Aunque ninguno de nosotros estaba realmente entusiasmado con la idea, Verónica soltó la noticia de que Nath también asistiría. Esa revelación hizo que mi corazón diera un salto de emoción. Nath, después de mucho tiempo, había accedido a unirse a nosotros. Su presencia era única, su sonrisa era increíble, pero lo que realmente destacaba era la calidez que irradiaba cuando estaba cerca.

Sin embargo, algo no encajaba del todo. Últimamente, Nath se pasaba mucho tiempo con Efraín, y nos había dicho que pasarían las vacaciones juntos. Aunque solo era una semana, noté que algo estaba cambiando en su dinámica.

Efraín ya no mostraba la hostilidad de antes. En los encuentros ocasionales, Nath se aseguraba de incluirlo en nuestras conversaciones, y cuando esto no era suficiente, se iban juntos a continuar con su día. Era curioso ver cómo Nath se esforzaba tanto. También Verónica y Ethan, en algún momento, superaron sus diferencias con Efraín; cada uno se disculpó por sus actitudes. Cada uno tenía sus razones, pero los chicos se centraron en la idea de que Efraín, siendo el más nuevo en el grupo, debería adaptarse a la dinámica y fluir con la corriente.

Entre Nath y yo, no había habido mucho cambio aparte del conflicto de intereses. Nos dimos la mano y decidimos seguir adelante sin cuestionarnos demasiado.

Pero algo no cuadraba del todo, especialmente con mi necesidad de tener a Nath cerca. Aunque él ya no necesitaba que lo protegiera de mí mismo, parecía que ahora se esforzaba en protegerse de sus propios sentimientos, como si algo estuviera bloqueando su corazón.

Esto me frustraba. Quería ser el elegido, ¿acaso no había hecho lo necesario para ganarme ese lugar?

"Él está tomando su tiempo", me repetí para evitar caer en pensamientos negativos. Había cometido errores, y no se trataba de merecerlo. Nath no era un premio que pudiera ganar; elegí cambiar por mí mismo, y su llegada me enseñó que antes de buscar mi propia paz, debía contribuir a encontrar la suya.

Quizás mis sentimientos hacia él influyeron negativamente en la situación. Cuando llegó, no me disculpé; le resté importancia al pasado, asumiendo que ya habíamos superado ese capítulo. Fui rápido en intentar iniciar una relación, ignorando que él todavía estaba atrapado en ese pasado.

Nuestra forma de procesar los eventos era diferente, y creo que ese fue un punto clave para que las cosas no funcionaran desde el principio. Sin embargo, estábamos tan concentrados en los mundos del otro que ni siquiera cuestionamos lo que teníamos detrás.

Esta falta de comunicación solo nos llevó hacia atrás. Aún quedaban obstáculos en nuestros caminos que querían florecer.

Así que, contuve mis impulsos de acercarme a él. No quería empeorar las cosas con contradicciones. Incluso en aquel momento, mi disculpa fue débil, pero la expresión de alivio en sus ojos quedó grabada en mi memoria. Supe que había una oportunidad.

No quería dar un discurso. Sonaría planeado y artificial. Después de mi disculpa, seguí con un simple "hasta luego". Recordaba sus palabras: "Incondicional significa por siempre, pero no necesariamente juntos". Este nuevo lema había sido establecido por él, y yo tenía que adaptarme. Nath no era un chico débil; se enfrentó a mí después de todo el caos, y eso hizo que empezara a admirar su fuerza interna.

Ninguno de nosotros había sido perfecto. Sin embargo, Nath sabía convertir limones en limonada, mientras que yo preferí exprimir mis limones involucrando a otros.