Capítulo 2.

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Las horas siguientes transcurrieron con total normalidad hasta la última clase. Sonó el timbre y salí con Sophie al pasillo para ir hacia la siguiente y última asignatura.

— Izan me pidió mi número de teléfono. — Solté mientras caminábamos.

— ¡Qué? ¡Dime por favor que se lo has dado!

— No se lo di.

Me miró sorprendida y algo decepcionada.

— ¿Por qué no?

— Porque no me gusta, me parece algo desesperado ¿No crees?

Mi nueva amiga suspiró. — Emily, muchas chicas matarían, ¡matarían! por tener el número de Izan.

— Pues me parece genial por ellas, pero yo no lo quiero.

— Pero ¿Has tenido novio alguna vez verdad?

— ¡Claro que los he tenido! Y por eso mismo es por lo que no quiero otro.

Entramos en la clase de geografía de la señora Pérez, la asignatura que mas odiaba en el mundo, en mi anterior instituto no aprobé ni un examen.

Tomamos asiento en última fila según los alumnos iban entrando. De la nada una chica rubia con el pelo muy largo y los ojos azules se acercó a mi mesa. La reconocí porque ella fue una de las que me miraron fatal en el comedor.

— ¡Hey! Tú debes de ser Emily.

La miré extrañada. — Sí ¿Tú quién eres?

— Olivia, encantada. — Me sonrió mascando chicle de una forma algo exagerada.

— Igualmente.

— ¿Vienes a la fiesta de hoy?

— Ya me lo han preguntado como cinco personas hoy. — Reí. Olivia me miraba feliz pero con los ojos muy abiertos mientras seguía masticando, parecía una lunática. — Sí, si que voy a la fiesta.

— ¡Perfecto! Allí nos vemos.

Se fue a sentar a la primera fila, me pareció muy extraño entonces miré a Sophie, esta me miraba levantando las cejas. Se acercó a mí bajando la voz.

— Esa es la novia de Jayden.

— ¿Jayden?

— Sí, el chico de los tatuajes, es el mejor amigo de Izan ¿Sabes que viene de Italia?— Sonrió ampliamente agitando levemente la cabeza.

— Pero su nombre no suena muy italiano.

Señaló con la cabeza al chico de pelo oscuro que había irrumpido en clase de mala gana horas antes, no quise admitirlo pero sentí algo de envidia por esa chica ¿Cómo lo habría hecho para enamorar a aquel chico? Y lo más importante ¿Por qué había venido a preguntarme sobre la fiesta? Todos estaban súper pendientes de eso, cada vez parecía más una secta en la que nos iban a sacrificar.

Sophie se encogió de hombros y la profesora entró en clase colocando su maletín lleno de folios sobre la mesa, se sentó reclinándose en el asiento y nos miró cansada.

— Bien chicos, ya es vuestro último año así que ya nos vamos a poner serios con vosotros. En mi clase no se come ni se bebe. Ni se masca chicle. — Miró a Olivia.

La rubia de pelo largo se levantó avergonzada y tiró el chicle a la papelera mientras toda la clase la observaba.

— Gracias. A continuación pasaré lista y ya comenzaremos la clase.

Citó nuestros nombres uno a uno como nos había dicho y empezó con su lección, teníamos que estudiarnos todos los ríos y montañas de los Estados Unidos, una asignatura de lo más apasionante. Fue una hora lenta y aburrida, se me cerraron los ojos unas quince veces.

COMERTE ENTERA © +18  (Aún En Desarrollo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora