Capitulo 27

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HENRY

-Se puede saber porque no dormiste en casa como corresponde? - Levanto la vista de los documentos que estoy leyendo para encontrarme con el rostro enfadado de la mujer que dice ser mi esposa, me duele la cabeza y dormí pésimo en el sofá de la oficina, pero no me quejo porque no tenía deseos de dormir con ella.

-Si notas que estoy trabajando verdad? - Pone los ojos en blanco – Y de todas formas que haces aquí?

-Trabajo aquí mi amor- Se sienta sobre el escritorio cerca mío- Soy tu mano derecha Henry.

-Claro, archiva todos estos documentos entonces- Resopla enojada.

-No me dirás donde pasaste la noche?

-Aquí Vanessa- Me apoyo contra el respaldo de mi silla- Tenía mucho trabajo y pocas ganas de ir a casa- Podría ser sutil o gentil pero ya no tengo ganas- Vete que debo trabajar y tú también-Señalo los papeles que le di.

Realmente no logro comprender porque me incomoda tanto estar cerca de ella y no recordar no ayuda mucho. Quizás debería hablar con Amalia, quizás ella podría ayudarme si deja de huir de mí y yo dejo de comportarme como un imbécil con ella.

Está casada, es la hermana de mi mejor amigo y nos llevamos diecisiete años está más que claro que es una mujer prohibida para mí por mucho que quiera y desee estar a su alrededor.

La mañana se va como si nada y cuando me quiero dar cuenta ya es mediodía asique decido hoy salir a almorzar porque en verdad necesito tomar aire, llamo a James para que me acompañe y desisto de Thomas cuando al segundo intento vuelve a enviarme al buzón de voz.

Tomo mi billetera y las llaves del auto y salgo.

-Iré a almorzar- Vanessa me mira expectante.

-De acuerdo vamos- Me toco el puente de la nariz y trato de no estallar con ella como deseo porque no quiero convertirme en un hijo de puta, no tiene la culpa de mi frustración.

-He quedado con James- Me mira decepcionada- Pero podemos cenar si quieres.

-De acuerdo.

Dejo el lugar enseguida y llego al restaurante en diez minutos porque no está muy lejos del estudio, la mesera me indica una mesa y decido esperar a James para pedir la carta. Quince minutos después un apretón en mi hombro me hace girar.

-Como estas Henry? - Mi amigo me saluda y se sienta frente a mí- Tienes un pésimo semblante.

-Problemas para conciliar el sueño- Frunce el ceño.

-Tienes dolores?

-El sillón de la oficina no es cómodo- Digo y el ríe.

-Y porque duermes ahí y no en tu cama? - Suspiro. La mesera nos entrega la carta y cuando se va hablo.

-No me siento cómodo ahí James- Me mira- Sé que no debería ser así pero no lo siento como mi hogar y tampoco estoy cómodo con Vanessa alrededor y me siento pésimo por sentirme así con respecto a mi casa y mi esposa- James abre la boca para decir algo, pero parece arrepentirse.

-Tienes que estar tranquilo Henry, ya recordaras todo.

-Sí, si lo sé, todos dicen la misma mierda- Me altero- James tu sabes que paso todos estos años, yo no puedo recordar nada porque mejor no me lo dices y ya.

-Porque si lo hiciera jodería tu recuperación y tu cerebro se haría papilla.

-Pensé en buscar a Amalia- Me mira confundido y con temor lo puedo notar, va a decir algo, pero la mesera vuelve para dejar nuestros platos y las copas de vino.

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