Doyoung esperaba en aquel restaurante con algo de impaciencia, no es que Yoonoh estuviera llegando tarde, pero él había llegado diez minutos antes y empezó a desarrollar una mini ansiedad pensando que tal vez Yoonoh lo dejaría plantado.
Parecería que fuera una cita o algo por el estilo, pero en realidad simplemente era un almuerzo que decidieron pasar juntos, porque habían decidido por mensaje que se querían conocer mejor.
──¿Te hice esperar mucho? ──preguntó Yoonoh con una sonrisa haciendo que dejara sus pensamientos de lado.
──No, llegué hace poco.
──Oh, bueno ¿Ya ordenaste?
──No, quería que ordenáramos juntos.
Entonces ordenaron lo que les apetecía y empezaron a hablar de cualquier cosa.
──¿Has seguido hablando con Jeno?
──Oh sí, cada vez que podía estando en la universidad venía a verlo, nunca me gustó la idea de abandonarlo así que siempre buscaba la manera de poder venir.
──¿Y veías a tu familia cada vez que venías?
──A veces, más que todo cuando venían a Seul al mismo tiempo que yo, pocas veces iba a Busán, siempre era en navidad para estar con Junqwoo y mis padres, y luego venía en año nuevo a estar con Jeno.
──¿Por qué no te quedabas en Busan hasta año nuevo?
──Porque la madre de Jeno tenía que trabajar y lo dejaba solo, así que podía haber una tormenta eléctrica, pero yo estaría con Jeno.
──¿Por que eres así con Jeno?
──Bueno, lo conozco desde hace más de diez años y desde que lo conocí lo adopté como mi hermano menor, aunque no lo fuera de sangre... ──explicó y luego ambos agradecieron al camarero que les llevó sus bebidas y les avisó que próximamente tendrían su comida ya servida. ──Y ¿Desde hace cuanto tienes un hermano?
──Hace casi cuatro años, sinceramente es la mejor persona que pudo llegar a mi vida... Pero ni se te ocurra decirle lo que dije, después se le sube a la cabeza y no me dejará en paz ──susurró lo último haciendo reír a Doyoung.
──¿Es adoptado?
──Sí, mi madre decía que quería otro hijo porque todavía estaba joven entonces adoptó a Sungchan.
Luego de eso siguieron hablando hasta terminar el almuerzo y cada quien se fue a su trabajo quedando en verse en la noche aprovechando que era viernes y ninguno de los dos estaba tan saturado.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Al llegar la noche Doyoung salió lo más rápido que pudo de la clínica, se despidió del doctor Ji, que era el único amigo que había hecho en el lugar y se fue.
Se alistó en su departamento rápidamente y unos minutos antes de salir vio a Jeno entrar al lugar.
──Hola, Nono ¿Cómo te fue hoy? ──preguntó con una linda sonrisa mientras iba a abrazar al menor.
──Bien, el examen no estuvo tan difícil, sé que al menos aprobé ──dijo Jeno con una sonrisa.
──Felicidades ¿Y en la sesión de fotos?
──Me fue bien, me halagaron más de una vez.
──Que bueno... Yo me iré a una discoteca, si quieres llama a Renjun para que venga, regresaré tarde.
──Está bien, espero que le vaya bien, hyung. Si está muy borracho me puede llamar y yo lo busco.
──Okey, aunque creo que es mejor que descanses.
Sin decir nada más se fue al lugar mencionado y al llegar se encontró a Yoonoh esperándolo en la entrada.
Sintió sus piernas temblar ¡Dios, sí que era guapo! Y aun así, con sus piernas hechas gelatina, se acercó con la mayor seguridad posible a él.
──Hola, Dongs. Te ves muy bien ──fue lo primero que le dijo Yoonoh al verlo.
──Gracias, tú igual.
Al responder eso se adentraron en el lugar y la música los ensordeció al instante. Se fueron a una mesa en la que estaba un conocido de Yoonoh que se llamaba Jaehyun, pero le decían Hyunjae, él estaba con otros chicos y Doyoung se sintió un poco nervioso ya que no conocía a ninguno.
Al principio sólo estaba sentado viendo a los otros jugar hasta que tomó un poco más y empezó a jugar con ellos.
Los amigos de Hyunjae y el mismo Hyunjae terminaron borrachos así que se fueron antes que Yoonoh y él.
Al verse solos decidieron pararse a bailar juntos.
Se movían juntos al ritmo de la música divirtiéndose ya que eran canciones muy animadas como "Amor Fati" haciendo todo mucho más alegre.
Sus rostros a veces quedaban cerca, pero ninguno se atrevía a hacer nada, ya que querían tomarse su respectivo tiempo para conocerse más.
