El felino es mío - Luckity

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¿Por donde comenzamos? 

A si Quackity había sido encerrado por haberse salido de control en su primer día y había pasado exactamente tres días encerrado en esa celda especial para alfas.

En el segundo día le retiraron las esposas junto a ese molesto bozal, como odiaba esa cosa, y finalmente llegó el día en que lo dejarían salir gracias a Willy y Fargan quienes les saludaban como si su primer día en el pueblo no hubiera desafiado a uno de sus líderes de la manada.

Willy: Felicidades Quackity - Hablo con un semblante neutral abriendo la celda dejándolo salir - Hoy es tu día de liberación.

Lo miro con cierto recelo pero finalmente se levantó de la incómoda cama saliendo de ese cubículo sintiendo su alfa removerse de emoción al poder finalmente estirar sus alas.

Caminaron hasta una sala aparte donde entró el búho, dijo el nombre del pato y salió con una caja mediana.

Le entregó la caja donde estaban todas sus cosas, reviso que estuviera todo y las guardó rápidamente en su inventario. Respiro más tranquilo al ver que no le faltaba nada, estaba por irse por su cuenta pero un brazo en su cuello se lo impidió.

Quackity era llevado a rastras afuera, miró entre molesto y confundido al búho quien miraba a todos lados como si lo que estuviera por decir fuera el mayor secreto de todos los tiempos.

Fargan: ¿Sabes que eres el tercero en intentar doblegar al gran Vegetta? - Susurro con un tono divertido. 

Quackity: ¿Tercero? - Esperaba ser el primero pero oír que era el tercero le llamó la curiosidad de saber quien fue el primero - ¿Quién fue el primero?

El búho soltó una vaga sonrisa soltándose del agarre mirando de reojo adentro de la comisaría.

Quackity al no obtener respuesta le siguió con la mirada descubriendo al felino quien estaba charlando con una oveja beta.

Fargan: Staxx nos contó que fue una lucha a muerte y que los dioses debieron intervenir dejando a ambos a cargo de la manada - Suspiro para ahora cambiar su semblante a uno más serio - Si no hubieran intervenido, más que seguro Willy ganaba.

Instintivamente volteo a ver el albino de pies a cabeza, tal vez la fuerza del felino se debía a su lado animal más a que es un alfa dominante puede ser que si sea cierto de que pudo lograr vencer a Vegetta... Pero si realmente aquello era cierto debía tener cuidado si es que llegaran a enfrentarse.

Aunque lo dudaba mucho ya que veía a Willy como alguien reservado y poco conflictivo.

Fargan: Aun así felicitaciones por intentarlo, no todos pueden someter al mismísimo Vegetta - Le palmeo el hombro en forma de animarlo.

Antes de que pudiera continuar con la charla fueron interrumpidos por Willy quien se fue acercando a paso lento mientras leía unos papeles hasta que se detuvo al frente de ellos.

Willy: Bien aquí ya terminamos - Guardó los papeles en su inventario sin darles oportunidad de leer o ver su contenido - Ahora síguenos, Quackity.

Dicho aquello se adelantó dejando a las aves atrás, el búho le sonrio dándole un suave empujón con su hombro antes de irse corriendo detrás del felino. 

No cabía duda de que Willy irradiaba aires de superioridad, no le sorprende que sea el segundo líder de una gran manada.

Luego de aquello fue llevado a un terreno un tanto alejado del pueblo, le entregaron una mochila con unas provisiones y unas herramientas de hierro, alzó la mirada aleteando ligeramente sus alas.