♡ Parte Treinta

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Mina

— ¿Sí? — ¿por qué su voz tenía que sonar tan musitada?, como si contestara enojada por interrumpirla en algo pero como una niña haciendo un berrinche. Solo me hacía enamorarme más.

— Nayeon, soy Mina — escuché un jadeo y sonreí, ella no sabía que yo tenía su número.

— ¿Mina? ¿Estás bien? ¿Está todo bien allá en Japón? — sonaba preocupada, nunca me gustó que se preocupen por mí pero sonó muy lindo.

Extraño su aroma.

— Estoy bien... Quería saber si podíamos vernos. Llegué a Corea ayer y vi que la casa estaba en renta así que no supe dónde encontrarte.

— Oh, sí, sí, sí. Es que dejé de pagar la renta hace ya tiempo. No sé dónde estarán pero tampoco me incumbe, creo que te contaré después — si podía escucharla y verla, podía contarme lo que quisiera.

— Claro. ¿Podemos vernos? — de ahí escuché un carraspeo y parecía gruñir. Sus gruñidos solo me hacían temblar de una manera extraña.

— Ahora no puedo porque... estoy en... en estado sensible — la forma en que no puede decir 'celo' es también tierna.

Espera, ¿qué hubiera pasado si la hubiera visitado como lo pensé al principio? ¿Si le hubiera hecho caso a Hikaru que me aconsejó con darle una sorpresa a Nayeon? Probablemente pasaría algo.

La sola posibilidad me hacía sentir la cara roja por la vergüenza y la clara intención de aquella alfa de que viera a Nayeon en su celo.

Ahora entendía porque Tzuyu decía que no, y luego la alfa peleó con ella. Una quería que yo fuera y la otra que no, pero la alfa siempre me dió la dirección a escondidas.

¿Cómo sería Nayeon en su celo? ¿Se alteraba o era más tranquila? Había diferentes formas de reaccionar, como Momo que duerme por días en su estado sensible y tenemos que llamarle para que recuerde sus horas para alimentarse.

¿Y por qué me estoy preguntando cómo es Nayeon en su celo mientras estoy en una llamada con ella?

— Emm. ¿Mina? Lo siento si te incómoda pero... — su voz me hizo reaccionar, no le había contestado.

— Oh, no. Es solo que una de tus amigas me había dado tu dirección y pensaba en visitarte pero que bien que te iba a avisar antes... ¿Entonces, nos vemos otro día? — no quería que pensara que me incomodó, solo quería que estuviera bien conmigo.

Pero yo tenía que ponerme a pensar cómo sería ella en su celo. ¿Será ruda? Debería dejar de pensar en eso.

— Claro, nos veremos otro día... ¿Podemos seguir hablando? — preguntó y sonreí, ella no quería dejar de hablarme.

— Hablaremos, de lo que quieras.

— Oh, espera... Emm. Solo espera un momento — después de un gran gruñido que me hizo temblar, se colgó.

Tal vez tenía problemas en su celo, dejaré de pensar en eso si no quería que incluso mi celo se adelante.

— Mira quién llegó Mina, la acosadora y sus dos amigas — Hikaru llegaba con una gran cuerpo acobijando toda su espalda, la alfa Bahiyyih creo — Es Yeseo y acosadora dos — apuntaba a otras dos que entraban como si nada a mi habitación y la veían.

— Yeseo y Dayeon.

— Como sea, no te sorprendas si ahorita te ven hasta de qué marca es tu celular. Encontraron el lugar dónde estábamos por redes sociales, por eso te digo que aquella es acosadora dos, porque ella lo encontró

— ¡Es Samsung! — no sé si era Dayeon o Yeseo la que decía eso, era beta, creo que Yeseo.

— ¿Qué te dijo Nayeon? — bueno, estas no me conocen así que creo que puedo decirlo, aparte de que parecían más concentradas viendo toda la habitación.

Lo bueno es que no tenía nada de mis cosas fuera de mi maleta.

— Me gruñó — fue lo único que me salió.

— ¿Una alfa te gruñó por teléfono? — al parecer la tal Dayeon sí estaba escuchando. Rió en alto, mientras yo mejor me sentaba en la cama — Está en celo, ¿verdad? — tienen mucha confianza.

— ¿Cómo lo sabes? — ¿era psíquica o cómo? Rió más fuerte, su risa era bonita pero ahora me estresaba por no decirme.

— Cuando una alfa te gruñe en un celo, específicamente sin intimidarte, es porque te quiere excitar inconscientemente. Instintos de un celo — Bahiyyih me explicaba animadamente.

¿Entonces Nayeon inconscientemente trató eso? No me lo deberían decir, no cuando me estoy imaginando todo.

— Oh, bien — no me animaba a decir otra cosa.

Ni deberían estar en mi habitación. Nayeon dijo que solo esperara un momento, probablemente me devuelva la llamada en pocos minutos.

— Apuesto que tu novia probablemente lo intente aunque seas beta — mejor presté atención a la platica de ellas. Dayeon le dijo eso a Hikaru.

Me doy cuenta que Dayeon suena casi como Nayeon, solo por la 'D'. Que lindo.

— Lo hace y le cuelgo — Hikaru empujó a la alfa detrás suyo, parecía enojada pero yo podia ver su sonrojo pequeño en las mejillas.

— ¿Y si no es por llamada?

— Le cuelgo — creo que se dió a entender muy bien porque Bahiyyih me miró asustada, como preguntándome si Hikaru era capaz de hacerlo.

Le asentí por pura broma. La alfa parecía muy inocente, como una niña.

— No negaste que Bahiyyih es tu novia — comenté cuando caí en cuenta de que Hikaru no le gustaba que dijeran que Bahiyyih es su novia.

— ¿Soy tu novia? — Bahiyyih preguntó mientras se frotaba como gato contra Hikaru.

— Uno, no. Dos, no te metas, Mina. Y tres, ¡Quitate! — y empezó a empujar a Bahiyyih, hasta cayeron al suelo mientras Hikaru intentaba apartarse y Bahiyyih la abrazaba.

Sí, bien enamoradas.

ALPHA AND LOVE // MINAYEONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora