Kintsugi ||TAEKOOK||

59

Narra Taehyung.

Me he pasado el resto del día como un alma en pena pegado a Jimin y a su omega para tratar de no pensar en el mío y en que me está ignorando como si no significase absolutamente nada para él. Suga está concentrado en la próxima misión en la que no tengo ningún interés, ni siquiera he preguntado acerca de ella, ya que lo único que está en mi mente es lograr solucionar la situación en la que me encuentro con mi omega. El dolor de estar alejados es insoportable. Mi lobo no lo soporta. Es como si mi pecho ardiese en dolor, mi lobo lloriquea y yo no tengo energía para absolutamente nada más que no sea quejarme. Algo poco propio en mí. Jamás me imaginé que el amor fuese a tenerme así. Sé que yo no he hecho nada malo, mantengo mi opinión y mi postura, sin embargo odio que eso me esté separando de mi destinado al que amo con toda mi alma. Tanto que duele, tanto que me planteo rebajarme aún cuando yo tengo la razón. Le doy tantas vueltas que por un momento creo que quizás no tenga la razón del todo, pronto desecho ese pensamiento. No debo cegarme por mis sentimientos, no esta vez.

El miedo a perderlo es inmenso, pero debo mantenerme fiel a mí mismo. No he hecho nada malo y no tengo porque agachar la cabeza. Entonces por qué me siento tan mal? Por qué duele tanto?, me pregunto. Es como volver a aquella época en la que debía demostrar quien soy, donde a pesar de no hacer nada malo todos a mi alrededor parecían querer juzgarme, vuelvo a sentirme como ese adolescente que fui en el pasado, con la gran diferencia de que esta vez no me está afectando lo que todo el mundo piense, sino lo que mi omega piensa de mí. Solo él me importa, solo quiero que recapacite y arreglemos todo. Después de todo lo que hemos pasado, no puedo imaginarme la vida sin él. Sería vacía y sin color.

__Taehyung, deberías irte a casa. No vas a lograr nada estando aquí con tus pensamientos carcomiéndote__la voz gentil de mi mejor amigo me saca de mi ensimismamiento y le miro a los ojos con tristeza sin importar lo mal que pueda estar viéndome. De todos modos me ha visto mucho peor. Me mira con afecto y comprensión.

__Lo sé, pero... y si me echa de casa? __cuestiono con miedo a que pase justamente eso. Sé que Jungkook es de armas tomar cuando se enfada y no dudo que podría echarme sin remordimiento alguno. Otro miedo que tengo además de que me deje, es que se vuelva sobreprotector y me aleje de nuestra cachorra. El de pelo violeta frunce el ceño.

__No va a hacer eso. Y si lo hace, tendrá que verme enfadado de verdad por primera vez__la seriedad en el tono de Jimin me deja claro que no está bromeando. Suspiro y niego con la cabeza. No quiero que mi omega y mi amigo discutan. Se llevan más que bien y no deseo que su relación se quiebre por mi culpa.

__Descuida, Minnie. Iré ahora a hablar con él__me decido al fin ante la ahora también mirada del líder omega que acaba de entrar en el salón al terminar una llamada con un espía del exterior.

__Te voy a dar un consejo, Tae__su fuerte voz me hace sostenerle la mirada__No le tengas en cuenta lo que diga en estos momentos. Jungkook puede ser muuuuy hiriente cuando está enfadado y a la defensiva, pero al final todo lo que dice no lo piensa realmente. Es solo su forma insana de protegerse. Por eso no le hagas caso hasta que se calme un poco__lo que dice lo entiendo, es lógico analizando la clase de persona que es mi destinado y sus experiencias, pero mi corazón no es lógico para nada y está dolido como nunca. A pesar de esto, asiento a las palabras de Min.

__Tienes razón, Suga. Trataré de seguir tu consejo__intento sonreír sencillamente como siempre lo hago, sin embargo no soy capaz y se queda en una extraña mueca. Finalmente termino despidiéndome de la pareja de omegas y me voy a casa temiendo lo incómodo que me voy a sentir. Ya antes de entrar escucho el llanto de mi hija la cual Jungkook me deja tomar en brazos en cuanto me ve entrar, aunque su mirada hacia mí no sea la mejor. Es evidente que todavía está enfadado.