Capítulo 28

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Impresionantemente, Jeremy fue el primero en hacer el primer movimiento, besándome siendo  suave y lento como siempre, pero no, esta vez quería y pediría más, lo mordí haciendo que sangrara, no se quejo, cosa que me sigue sorprendiendo, tome eso como si me estuviera invitando a corromperlo, y desarmar al niño lindo y tímido que me besa. Metí mi lengua en su boca, queriendo devorarlo, él retrocedió hasta caer a la cama, me subí en él, quedando directamente en su entre pierna, empecé a frotarme fuerte, la dulzura se me acaba. Él respiró pesado, y yo quite mi camisa, quedando en sostén.

-Joder.-murmuró tomando mi cintura,-Eres preciosa.

-Lo sé guapo, me gusta que me lo digas.

Le quité su camisa, atrayéndolo hacia mí volviendo a besarlo, él tomó mis nalgas estrujándolas, haciéndome chillar, eso quiero, rasguñe ligeramente su espalda. 

-No hay que hacer mucho ruido, o Jenna subirá. 

Lo tomé por el cuello, atrayéndolo a mí, mordí, lamí, y devoré sus labios, cuando apretó mis nalgas, en señal que necesitaba respirar, no lo dejé separarse, lo sostuve un poco más, mediré si aguanta, no demasiado no quiero lastimarlo, lo solté unos segundos después, su respiración agitada, mejillas enrojecidas y su frente sudorosa solo me incitan.

-Me harás romperte, demasiado lindo.-murmuré en sus labios, mientras empecé a bajar, dejando besos en su cuello, en yugular, en su pecho, le di un ligero empujón, para que se recostara. Él obedeció, y empecé a descender por su abdomen, al llegar a la hebilla, dejé que me volteara y quedara encima de mí.

Beso mi cuello, hasta llegar a mis pechos donde soltó el sostén, en este momento agradezco, que tenga la abertura en frente, al abrirlo, se quedó observándolas por un momento, y me sentí algo insegura, es decir mis tetas son lindas, pero, ¿a Jeremy le gustan? Borre ese pensamiento de mi cabeza, porque importa que a mí me guste. Él salió de su ensoñación y las apretó con ambas manos, y las beso de forma lenta, y tímida.

-Definitivamente eres un ángel caído del cielo.-murmuró mientras me volvía a besar.

-Claro que soy un ángel, pero te haré querer pecar tanto.-mi excitación estaba al tope, pero quería ir lento y disfrutar tanto de Jeremy.

Sus manos bajaron a mi cintura, pero su boca tomó uno de mis pezones, mordiéndolos levemente, haciéndome suspirar, su rodilla estaba en medio de mis piernas, quería frotarme, y empecé a frustrarme, acabo descubrir que amo que me lama las tetas, pero quiero algo más. Con fuerza lo empuje para que volviera a quedar debajo de mí, abrí sus pantalones y los quité con su ayuda, él soltó mis pantalones y quitó rápidamente, solo bragas y un bóxer, impedían el contacto piel a piel, me coloqué alineando mi entrada con su verga, rozándolos, Jeremy soltó un sonoro gemido, ronco que me pone mucho.

Sus manos empezaron a tantear mis bragas, pero las preferí en otra parte, así que las tomé llevándolas a mis tetas, donde él las estrujo, sacándome un nuevo gemido satisfactorio, me froté con más fuerza contra él, haciéndonos gemir a ambos.

-Mierda, Alex.-gimió mi nombré y sonó hermoso.

-Sigue diciendo mi nombre así y no me contendré.

-Tus ojos.-mierda.

-Lo siento.-intenté controlarme, pero sentirlo moverse para abrazar mi cintura, lo hizo difícil.

-No te disculpes, esta bien para mí te hacen ver muy sexy, así que abre los ojos, bonita.-abrí mis ojos, dejándolo ver mi descontrol.

-Cuando digo que me pones mucho, no es solo que mojas mi braga.-él rio por mi comentario y volvió a besarme de forma intensa, como me gusta, -Que sepas que te morderé y marcaré si seguimos así.

Always and ForeverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora