Capítulo 38

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Recuerdo que cuando mi abuela vivía y yo visitaba su casa, yo sonreía feliz. Siempre la veía sonriendo a ella, y siempre me preguntaba cuál era su secreto. Jamás la vi triste, incluso cuando sus preciadas rosas se marchitaban. Hasta que un día le pregunté, y ella, con esa mirada dulce y llena de amor me contestó. Ella me dijo su más grande secreto."Un té siempre arregla los dolores"Yo no había entendido, pues aún tenía escasos ocho años, pero mientras más crecía más lo entendía. Un té podía arreglar los dolores de estómago, podía arreglar ese insomnio por las noches. Pero descubrí algo, había una cosa que el té no podía arreglar, y eso lo descubrí cuando en verdad sentí ese dolor. Un té no podía arreglar el dolor de un corazón roto.


─Joven Jimin, los proveedores han llegado, ¿qué les digo? ─Parpadeo un par de veces volviendo a la realidad. Y es ahí donde miró a Jackson, no estoy en casa de mi abuela sino que estoy en mi cafetería.


─En un momento voy ─ Jackson asiente mientras se da la vuelta y se aleja.Miro hacia la barra y observo esa taza de líquido amarillo, un té de manzanilla para poder relajarme, pero solo tenía efecto por un par de horas y después, todas mis pesadillas volvían. Me levanto del banquillo y camino hacia la parte trasera de la cafetería, donde los proveedores ya están esperándome. Algunos con diferentes granos de café, diferentes tipos de leche e incluso, diferentes tipos de ingredientes para algunos bocadillos. Mis días eran así, había regresado a la escuela y mientras yo no estaba, Jackson se hacía cargo, después por las tardes yo trabajaba y era hasta la hora de cerrar. Parecía que todo volvía a la normalidad, incluso veía a las personas a través de las ventanas hacer sus vidas, y eso solo significaba que el mundo no se detendría por mi dolor.


[...]


─Buenas tardes, ¿ya saben que van a pedir? ─le sonreí a la pareja frente a mí.


─Sí gracias, dos cafés, uno con leche y el otro solo con crema, y un par de bocadillosdel día ─ contestó el chico mientras su pareja sonreía feliz.


─En un momento les traeré su orden ─ apunte todo en mi block de notas y e hice una inclinación. Caminé de regreso a la barra para pedir la orden, aunque solo éramos Jackson y yo, podíamos sobrellevar muy bien el trabajo. En verdad Hoseok le había enseñado muy bien.


─Jimin, cuando termines de llevar esto ¿podrías ir a la mesa tres? Ahí hay tres personasque dicen conocerte ─ Jackson me señaló con la cabeza la mesa tres. Miré con cuidado hacia ese lugar y me sorprendí al verlos. Tenía mucho que no hablaba con ellos y ellos no me habían buscado. Cuando Jackson me entregó el pedido para la pareja fui a entregarla y después con mirada sorprendida y a la vez confundida, camine hacia la mesa tres. Las tres personas frente a mí sonrieron solo verme.


─¡Jimin! ─se levantó una de ellas y me abrazo por el cuello, correspondí el abrazo aunque algo aturdido. ─¡Qué bueno es verte de nuevo! ──¿Qué hacen aquí? ─ sonreí un poco.─Escuchamos que una cafetería había abierto de nuevo por aquí, pero jamáspensamos que trabajaría en este lugar ─ habló el único chico de ese trío.─Cierto, pensábamos que con el dinero de tu familia jamás te faltaría nada ─ miré a lasegunda mujer.─Ah, sí, yo tengo que atender mi negocio ─ me removí algo incomodo.─¿Tu negocio? ¿Lo compraste o algo así? ─ habló la primera.Me tense un poco, no entendía por qué me sentía realmente incomodo con ellos, cuando antes habría estado a la perfección. Tal vez los tiempos habían cambiado.─Mejor díganme, ¿Cómo han estado? ─ sonreí.Ellos al principio se mostraron algo sorprendidos pero después empezaron a parlotear de sus vidas de viajes lujosos y de amores no correspondidos. ¿Cómo no me había dado cuenta de las verdaderas personalidades de ellos? ¿Cómo era posible que yo hubiera estado con ellos todo este tiempo? Era fácil contestar eso, y eso es porque yo había estado realmente privado de la realidad del mundo, encerrado en una caja de cristal, que Jungkook se había encargado de quebrar. Las tres personas que estaban frente a mí, eran esos amigos que siempre habían estado en mi vida, ellos eran la clase de personas que le sacarías la vuelta, los que te delatarían si a escondidas salías a un baile o te hacías una perforación, son la clase de amigos que solo están contigo por interés y no por mera amistad. Ahora lo comprendía, esa incomodidad que sentía era porque yo, al fin, había abierto  mis ojos y había visto un poco más allá de mi zona de confort.


Mina, Hyungsu y Rose, ellos fueron los amigos que jamás debí tener.

Bad Boy -- KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora