Capítulo 27

897 97 3
                                    

Los días habían pasado tan rápido como empezaban a caer las hojas de los árboles. Todos estaban tan apresurados que no tenían tiempo para casi nada.

-Nos vamos - habló Jungkook hacia Hoseok y Taehyung, quienes asintieron.

Miré a Jungkook quien tomó mi mano y me llevó hacia fuera del local, haciendo que subiera al automóvil. Lo vi rodear el auto y subir, encendió y arrancó. Lo miré por unos segundos, debajo de sus ojos había unas pequeñas ojeras de color violeta.

Su semblante era cansado, pero por más que yo le dijera algo para que descansara, él no hacía caso.

Entre el tema de mi madre y el asesino Agust D, Jungkook no tenía casi tiempo para dormir. Me preocupaba demasiado, pues por mi culpa él tenía que lidiar con otra cosa más, ahora él cuidaba de mí también.

-Iremos a comer y después iremos a casa, Namjoon me dijo que nos quería ver a todos -

-No es necesario ir a un restaurante yo podría hacer algo para comer - hable yo por primera vez.

Quiero hacerlo, quiero salir y olvidarme un poco de toda la mierda que está pasando - su voz fue dura. - ¡Todo es una mierda! -

Me encogí un poco en mi asiento, sus palabras eran algo rudas y la verdad no lo culpaba, él estaba cansado. Continuó.

-Lo siento, es solo que todo esto me está superando - suspiró, se había detenido en un semáforo que estaba en rojo.

-Lo siento - me disculpé, subí mis pies en el asiento, abrazándome de mis rodillas.

-No, perdón por levantar la voz, no debería desquitarme contigo –

Jungkook giro un poco su cabeza para mirarme, con su mano acaricio mi mejilla.

-Jungkook, por favor, vayamos a casa y duerme un poco, lo necesitas - pedí, tal vez con esta ya eran más de cincuenta veces que se lo pedía en el día.

-No puedo, no cuando tengo que hacer unas cosas más –

-No pasará nada si lo haces más tarde, pero ahora necesitas descansar -

-No - negó firme, avanzando de nuevo por las calles.

Apreté mis labios, tenía que buscar una forma de hacerlo entrar en razón. El que duerma no lo hará perderse de muchas cosas, él debería saber eso.

-Sí no vas a casa a dormir un poco entonces me iré a un hotel, pensaré que soy el culpable de todos tus problemas, Jungkook - yo también hable firme.

Crucé mis dedos pidiendo a todos los dioses porque eso funcionará, Jungkook frenó de golpe haciendo que llevara mis manos hacia el tablero del automóvil para poder sujetarme. Si no fuera por el cinturón de seguridad yo hubiese salido volando. Varios pitidos detrás de nosotros no se hicieron esperar.

-¿Estás loco? - lo miré asustado.

-Es lo mismo que me pregunto yo, ¿estás loco? Dices que te iras a un hotel, solo, cuando ese hijo de puta ya hablo contigo y te conoce, ¡Estas mal de la cabeza! -

-¡Solo intento hacer que descanses un poco! –

-¡Ya te lo dije, no lo haré! - Jungkook fruncía su entrecejo molesto.

Ambos habíamos empezado a levantar la voz, pero la mía empezaba a temblar.

-Jungkook, necesitas dormir, estas empezando a comportarte diferente

Jungkook río por lo bajo, importándole menos el ruido que se estaba haciendo allá afuera, el tráfico se empezaba a acumular por nuestra culpa.

-¿Actuar diferente? - me miró con una sonrisa que daba escalofríos, aterradora. - Déjame decirte que yo soy así, intenté ser una persona diferente para no asustarte, pero mira este soy yo de verdad - se señaló un poco con su mano.

Río de nuevo, de una manera casi maníaca, ese no era Jungkook, claro que podría ser así, lo sabía, lo había visto ya. Pero él sólo era así con las personas que él consideraba una amenaza, una basura humana. Jungkook era frío y despectivo con los demás, no conmigo.

Sentí una punzada en mi pecho mi corazón dolió.

-No te haré caso, porque sé que estás palabras solo salen porque no has descansado bien estos días - intente yo mismo creer eso.

-Como quieras, piensa lo que quieras –

Al parecer con eso dio como terminada esta pelea sin sentido. Arrancó de nuevo el auto y aceleró tan rápido que mi cuerpo se presionó contra el sillón.

La dirección había cambiado, ahora estábamos yendo hacia el viejo edificio, donde tan solo llegar él freno en seco de nuevo. Abrió su puerta y salió cerrando de un portazo. Cerré mis ojos con susto al escuchar el estruendo.

El automóvil se quedó en silencio, sólo pequeños sollozos que salían de mí se escuchaban. Saqué ese nudo que sentía en mi garganta y después limpie con brusquedad mis lágrimas. No era tiempo de llorar.

Me quité el cinturón de seguridad y salí de ahí, cerrando con cuidado la puerta, caminé hacia la entrada del viejo edificio. Mis ojos vieron a Kai, quien me miraba con una sonrisa apenada.

-No lo digas - me apresuré a hablar.

-No lo diré, solo te avisaré, hoy por la noche iremos en busca de Agust D, Namjoon nos citó para eso, ¿podrías quedarte aquí? Dejaremos algunos hombres para que vigilen el lugar –

Asentí cansado de todo esto, al parecer está noche terminaría toda esta pesadilla, los chicos estarían tranquilos y Jungkook volvería a ser la misma persona que había conocido.

Pasé por un lado de Kai, dispuesto a ir a dormir un poco, tal vez así pase el tiempo más rápido.

-No hagas caso a las palabras de Jungkook, él siente un gran aprecio por ti, eres tú la persona más importante para él, y por eso, él se comporta así - sonrió de lado. - Él está tan desesperado por no poder haber evitado ese contacto con el asesino –

-Nadie podía hacer nada - negué lentamente.

-Lo sabe, pero aun así él se culpa, él es así, Jungkook puede parecer fuerte por fuera, pero por dentro tiene un corazón muy sensible -

-Lo sé, claro que lo sé –

Y lo sabía, por eso yo me mantenía a su lado, porque a pesar de que medio mundo diga mierda de él, soy yo el que en verdad lo conoce.

Miré el cielo.

Cuídate, Jungkook

Bad Boy -- KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora