25. Hace falta que yo te asegure...

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Narra Eileen

–Nada de peleas por hoy...–Murmura Rose con incomodidad y recordando el motivo de la cena, acepto y tomo asiento.

–¿Qué pediremos para cenar?–Me pregunta Edward y yo aparto un segundo mi vista de la carta.

–Lo que sea.–Me encojo de hombros y él mira concentrado el menú que tengo en las manos.–¿Pizza para todos?

Me mira y retiene entre sus labios un impulso por reír a carcajadas.

–¿Pizzas en restaurante?–Cuestiona divertido.

–¿Y porqué no?–Alzo los hombros y el ríe levemente, en un pequeño vistazo a nuestros hermanos ellos se muestran de acuerdo con nuestra propuesta, excepto Emma, obviamente. Edward alza la mano provocando que un mesero se acerque a nuestra mesa de manera inmediata.

–Dos pizza familiares, las favoritas del chef, por favor.–Ordena Eddie brevemente y el mesero tomando nota, se aleja.

–¿Y si yo no quería pizza?–Cuestiona Emma de manera socarrona.

No me permito siquiera mirarla.

–¿Quién no querría pizza un jueves por la noche?–Pregunta Rosaline consternada y todos miramos a Emma quien se encoge en su asiento de vergüenza.

–Emma, podemos ordenarte algo diferente si gustas.–Propone Harry tomando la iniciativa que Marcel no se le ha pasado en mente tener. 

Ya han pasado cinco días después del juicio y al parecer todo marchaba bien, mi papá y el señor Styles han tenido más compasión con Emma y Marcel que con Rose, Liam y yo, ya que les han dado toda la semana para acomodarse a la ciudad y todo ese asunto.

A mí me dijeron que entraba a una escuela con 3 días de anticipación.

Injusticia.

Emma niega ante la propuesta de Harold emitiendo un no, gracias casi en susurro. 

–Harry, has estado muy callado.–Menciono al terminar con mi segundo trozo de pizza, esta última no he podido identificar de qué es, todo esta perfectamente fundido, no se siente siquiera la textura del ingrediente y eso la convierte en una pizza tremendamente especial.

–Ehh.. sí.–Acepta y miro ceñuda a cada uno de los Styles.

Este sería el momento perfecto.

–Dímelo a mí. No me ha dirigido palabra desde que Emma y ustedes han llegado.

Miro atentamente a Rosaline quien después de decir eso el brillo habitual en sus ojos desaparece. Y enseguida sus mejillas se tornan rosadas por haber confesado eso en voz alta. 

Aprieto la servilleta que hay en mi mano y la suelto repentinamente.

Me estaba clavando las uñas de las manos en la piel, joder.

–¿Qué esconde esa mente tuya?–Cuestiono divertida, para que él tenga confianza de soltarlo de una vez por todas.

–Absolutamente nada que no sepan ya.–Harry alza los hombros con inocencia haciéndose el desentendido.

Miro a Edd pero él no despega su mirada de su hermano.

–Creo que es la hora del postre...–Emma trata de cambiar el tema y yo asiento.

–Aún tenemos pizza de sobra, Emma, venga tienes que comer más.–Marcel la contradice.

–A mí me han dado ganas de pasta.–Digo en un intento desesperado de no crear una discusión.

Dos pares, de polos opuestos. Harry y Edward Styles. _______ y Rose Hilton.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora