Dos pares, de polos opuestos. Harry y Edward Styles. _______ y Rose Hilton.

34. Volviendo a la normalidad.

Estamos en silencio reunidos en la mesa. El ruido de los tenedores era lo único que llenaba el silencio típico de todas las noches. Por el rabillo del ojo veo a Rose masticar con expresión aburrida en su rostro; como si el mero hecho de estar sentados en la mesa fuera absurdo.

Papá carraspea y aprieta una servilleta entre sus dedos.

-¿Y.. Cómo fue su día, chicos?-Me encojo de hombros, sin tener una respuesta bien formulada en mi mente.

Seamos realistas, no tengo ganas de responderle.

-De todo un poco, realmente, a estado entretenido el ser la sobresaliente en clase de italiano.-Informa Emma con entusiasmo. Rosaline y yo la acribillamos con la mirada por haber podido entablar conversación con mi padre... ¡En plena cena!

-¡Has escogido Italiano como segunda lengua!-Exclama mi padre con alegría. Mi hermana asiente con orgullo.

-El punto es aprovechar esa clase para aprender algo nuevo, no de repaso.-Mascullo sin humor.

-¿Cómo aseguras que sé Italiano a la perfección?-Inquiere Emma contradiciéndome.

-¡Vienes de Florencia!-Exclama Rosaline con ironía.

-Y acabas de afirmar que eres sobresaliente.-Liam apoya y Emma se encoge en su lugar.

-Puedo escoger lo que me plazca.-Asegura y se yergue para encararnos nuevamente, con una ceja enarcada esta vez.-¿Qué llevan ustedes?

-Español.-Responde Liam al instante enarcando una ceja también.

-Alemán.-Afirmo y miramos a Rose.

-Lo he olvidado. Jamás he entrado a esa clase.-Rueda los ojos.

Casi escupo el bocado que esta en mi boca por una repentina carcajada que se quizo escapar de mi.

-¡¿Cómo?!-Exclama mi padre, quien se encontraba feliz, ahora esta furioso.

-Si bueno, no me caen bien los de mi clase..

-¡Rosaline no puedes simplemente saltarte clases!

-Mm.. Claro que si, de hecho, es demasiado fácil, solo tienes que..

-¡Basta! ¡De ahora en adelante entrarás a cada una de tus clase!.-Ordena mi padre totalmente fuera de sus casillas.

Mi hermana mira su plato con los ojos entrecerrados.

-¿De acuerdo?-Cuestiona mi padre ahora un poco más tranquilo. Sabiendo que la a hecho sentir mal.

Mi hermana asiente sin mirarlo, deja su servilleta sobre el plato y se retira de la mesa y del comedor.

-¿Qué a sido todo eso?-Cuestiona Liam mirando la puerta por la que Rose acaba de salir.

Aprieto mis labios y restriego mis manos sobre mi rostro.

Joder.

-Si me disculpan.-Mascullo imitando a Rosie y salgo camino a el segundo piso.

Toco un par de veces la puerta que se encuentra frente a mi habitación.

-Déjame en paz, Eileen.-Dicen desde adentro.

Bien, no esta llorando.

-Hey.. Abre ya.-Recomiendo.-Recuerda que suelo tirar puertas.

Silencio, eso obtengo.

-Rose, entraré de todos modos.-Aclaro.

La puerta se abre lentamente, y para cuando entro, ella ya esta de nuevo tirada en su cama.