Dos pares, de polos opuestos. Harry y Edward Styles. _______ y Rose Hilton.

27. Orgullosamente soltero

Narra Eileen 

–Hey, Eddie.–Saluda Miranda cuando llegamos a su lado, veo como Edward hace una mueca de disgusto pero no replica nada.

–¿Todo listo? ¿ya te instalaste?–Cuestiona mi novio y ella asiente.

–Nada que no conozca, ya sabes.–Ríe y me mira.–Excepto tú, cariño.

Miro a Edward pidiendo ayuda cuando noto que las palabras de Miranda van dirigidas hacia mi.

¿Qué quizo decir con eso?

–Ella ha tenido la brillante idea de venir a saludarte.–Explica Edd alzando su mano entrelazada con la mía.

–Con que tu me desees un buen día es más que suficiente, sé que no soy del agrado de tu novia, Eddie.–Explica Miranda hablando de mi como si yo no estuviera presente. Aprieto la mano de Edward y él solamente presiona sus labios, sin embargo no me mira.

–Realmente ella es la que me ha propuesto venir a saludarte.-Afirma mi novio.-Y no me llames Eddie, sabes que no me agrada que me digan así.

–¡Ella te llama así todo el tiempo!–Reclama sin una pizca de paciencia.–¡Y apuesto a que te propuso saludarme con un típico tono de sarcasmo!

En eso último tiene razón, já. 

–Porque soy su novia, gran diferencia entre tu y yo; puedo llamarlo como me de la gana.–Mascullo furiosa ¿desde cuando me quedo tanto tiempo callada al escuchar que hablan mal de mí? estúpida iniciativa mía de venir a saludar a esta...

–¡A eso a venido! ¿no lo ves?–Cuestiona Miranda apuntándome.

–Yo no he venido a ofenderte, solo me estoy defendiendo ante tu hostil actitud. No busco peleas con nadie.–Aclaro tratando de controlar mi respiración para no sonar enojada, no lo vale. 

–¿______ Eileen Hilton campeona de combate mixto y boxeo, no.quiere.pelea? ¡por Dios!–Exclama con ironía.

Tiene la misma actitud de Emma.

¡Joder! ¡por eso me repatea tanto en el alma que Emma sea como es!

¡Porque se parece a esta lame botas!

–¿Y ahora te he dejado sin palabras?–Pregunta y yo centro mi atención en su teñida cabellera.

–Se llama pensar, deberías hacerlo más seguido.–Suspiro y desenlazo mi mano de con la de Edward.

–¿Te vas?–Cuestiona Miranda con sorna.–¡Eso no ha sido más que el primer asalto!

Me quedo quieta mirando todo el gentío que se formo a nuestro al rededor.

–Eres tan bocona.–Murmuro reprimiendo el rencor que corre por mí garganta.–Hablas y alardeas tanto.

Ella se queda en momentáneo silencio.

–Y tu no eres más que una impulsiva.–Se defiende sin poder decir fluidamente sus propias palabras. 

–Si fuese impulsiva ya no estarías consiente, niñata de mierda.–Continúo antes de que encuentre algún otro defecto en mí para echármelo en cara.

Miro a Edward quién se mantiene quieto en su lugar observándome.

No lo puedo culpar, ella fue, y sigue siendo, su amiga durante muchos años.

Aunque me alegra que tampoco se incline hacia su lado para apoyarla ¿me explico? se mantiene neutro, eso me agrada.

Me da incluso seguridad.