obra: "still life. watermelon". Salvador Dalí. 1924.
Lunes.
Primer día de trabajo de Harry, y había tenido que entrar a la empresa con ayuda de Louis, debido a que sus piernas y cadera dolían demasiado.
Eran las once de la mañana, y Louis había salido de la oficina para buscar el desayuno de ambos, mientras Harry estaba tomando un descanso tras su trabajo para buscar alguna estrategia para la junta que iban a tener.
Estaba bastante tranquilo, a decir verdad, se encontraba bastante satisfecho luego de haber leído aquel correo que el área les había enviado la noche anterior: Correo que había leído mientras su alfa recogía la cena que encargó.
El área les había acomodado su horario: Ocho de la mañana a seis de la tarde. Además de que ambos trabajarían sábados y domingos en casa, respetando sus días libres.
Justo para poder descansar bien.
El silencio en la oficina era cómodo, y en su descanso mientras los ojos azules de Louis llegaban para iluminar el lugar, Harry se dedicó a mirar que su transferencia bancaria se hubiera hecho bien hacia la clínica de salud mental, pues Louis había sido el encargado de usar su tarjeta para pagar mensualmente.
Pero su dinero estaba intacto.
No había cambios. No había gastado dinero a pesar de que no recibió ningún pago durante su ausencia.
La puerta de la oficina se abrió, mostrando a Louis cargando una bolsa, con su traje negro ajustado al cuerpo, y una vez la puerta se cerró con seguro y el alfa se acercó a dejar la comida sobre el escritorio libre del omega, Harry se puso de pie.
—¿Qué hiciste con mi tarjeta este tiempo? —preguntó caminando lento mientras observaba al ojiazul mover su silla frente al otro escritorio.
—¿De qué hablas? —preguntó confundido sin saber a qué se refería exactamente; al mirarlo con dificultades para pararse bien, se acercó y lo tomó de la cintura, olisqueando su cuello.
—No hay rastro de que hayas pagado lo de mi terapia, te dije-
—Sé lo que me dijiste antes de dejarte con Maddie. —interrumpió sintiendo las manos contrarias sobre sus brazos. Besó levemente el cuello ajeno donde antes había estado su marca, y ahora había solo una pequeña cicatriz. —No quise ver tus contraseñas.
—Louis, tenías que hacerlo; por eso te dejé todo anotado. ¿Qué hiciste con eso?
—Tu tarjeta está en mi casa, la dejé entre mis documentos importantes. Está igual que como me la dejaste a mí.
—¿Entonces cómo Matt no me dijo nada sobre no haber pagado?
—Es que... Tu terapia sí fue pagada.
—¿Y cómo? —preguntó separándose un poco. Suspiró ante la primera idea que se le vino a la mente. —No me digas que-
—Yo la pagué. —interrumpió, acabando con las dudas. —Yo pagué tu terapia. Si quieres corroborar... Tengo los tickets de cada pago en mi casa.
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Dalí's Theory || l.s ~ omegaverse
RomanceHarry es un omega de cabello rizado y ojos verdes que comienza su nueva etapa independiente tras la mudanza de su madre debido a su trabajo. Un pequeño problema con su alfa tóxico, lo orilla a las rejas de la infidelidad: Harry no puede lubricar a...