Vin Jin

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15. Nuestra primera pelea

— No deberías juntarte con ese sujeto.

— Sólo es un idiota que tengo la desgracia de conocer — Se intentó excusar, porque en realidad le parecía un tipo... soportable, además de que odiaba a los chicos de Jaewon tanto como él.

— Su olor es asqueroso — Siseo, su nariz se arrugó al olerle — Apestas a él.

Le dio un manotazo cuando intentó quitarle su chaqueta, tal vez con intenciones de quemarla.

— Estábamos dándole una paliza a esa pandilla de pacotilla, también huelo a otras cosas y no veo tus quejas.

— Es un alfa.

Rodó los ojos antes de acomodarse sus lentes.

— Gracias por decírmelo, genio.

La fémina le enseñó los colmillos en señal de advertencia, en respuesta le enseñó los propios; nadie le mangoneaba a Vin Jin.

— Si fuera yo estarías golpeando a todo el mundo.

— Por supuesto, eres mi novia.

— Y tu mi novio.

— ¡En Cheonliang no harías eso!

— ¡Vete a la mierda con tu jodido Cheonliang y ese alfa bravucón que te toma la mano! — Gruñó dándose la media vuelta y saliendo del salón de clases donde estudiaba el varón.

Solo en el aula de clases, Vin olió su chaqueta e hizo una mueca.

Si olía asquerosa, debería quemarla.

Bufó antes de tomar su mochila e ir detrás de la alfa con la que salía.

Está se hallaba fuera del instituto viendo su teléfono.

— Vamos, hermosa, sabes que no te dejaría por ese cerdo — Inició la conversación, jamás habían peleado, ella era algo posesiva con su persona y él era algo grosero en el habla, pero nunca habían llegado a los gritos — Perdóname.

Tenían una linda relación donde lo peor que habían hecho era ese chichón que tuvo dos días porque ella lo tiró de la cama.

La fémina suspiró antes de guardar su teléfono.

— No, perdóname a mí, no debí actuar así porque ese alfa te impregnó de su olor en la pelea.

— Me cayó encima, sería un milagro que no me pegara su aroma ese idiota... ¿empezamos de nuevo?

— Si, empecemos de nuevo — Respondió ella tomándole del brazo y empezando a caminar — ¿Me quieres contar cómo le diste una paliza a esos sujetos de las cuentas falsas?

— Por supuesto... y luego usare eso para una canción.

— Sería raro si no lo hicieras, Vin.

— Lo sé, preciosa.

31 días de OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora