LIBRO II «CADENAS»
Las cosas ya no son como antes.
Willow ya no es la chica que quería salvar al mundo. No es la misma que se atrevió a jugar con un hijo de la mafia más sangrienta y poderosa que ha conocido, viendo desde sus propios ojos el alcance...
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Alexey
El peor error de mis enemigos es subestimarme al creer que no volveré por lo que me pertenece. Termino de ponerme el enterizo naranja de mierda y salgo al comedor. Todas las noches como en mi celda, sin embargo, hoy quiero comer junto a todos los bastardos que creyeron que me quedaría con ellos hasta para morir.
Así como muchos se pusieron de mi parte también lo hicieron algunos en mi contra. Lo mejor que hicieron fue evitar meterse en mi camino porque mi paciencia es bendita, pero tiene límites y a nadie le conviene cruzarlos.
Ya todo está preparado en casa como lo establecí.
Mi mujer y mis hijos donde deben estar.
Madre se vio renuente de tener que recibirla en su casa, pero están monos por los nietos y han ha cedido solo por no despegarse de su lado.
Entro al comedor y me siento en una de las primeras mesas donde se encuentran los Bratva que fueron antes capturados, como Lev, y que no dieron su brazo a torcer a la hora de dar alguna información de la organización. Es por eso que los mandan aquí. O nos mandan. Estas son las paredes donde personas a las que ellos no le ven salida o reformación destinan a estar encerrado por siempre o solo morir ejecutado o electrocutado.
Depende el nivel de tu maldad. Da gracia, pero es cierto. Me deja satisfecho que ellos sepan que a mí no pueden manipularme para soltar nada como al principio mostraron querer hacer. El Alcaide, un hombre que, aunque no lo sepa, tengo todo para destruir.
Además de ser el dirigente de esta cárcel de lujo no, es un reconocido abogado amado por el pueblo que "defiende" los derechos de aquellos a los que se le quito la voz y voto. No le conviene que el mudo sepa que es un pedófilo de mierda que tarde o temprano matare y que engaña a su mujer con cuanto culo se le presente en frente.
No es precisamente un símbolo sexual, pero con el dinero baila el perro con las putas que se mete suelen tener necesidades económicas y problemas de mami y papi así que meterse con ese sinvergüenza con boca engañosa no es problema.
Una pasta a la boloñesa es puesta frente a mí por una de las cocineras. Mueve el culo frente a mi cara y pongo cara de asco. Nunca metería mi polla en ese hoyo más que usado, no es por denigrar, pero las putas que se ofrecen a todos un poco de placer no suelen ser de mi gusto además de que no me saco de la mente el culo dulce y maldito de mi mujer.
Esa maldita me ha bloqueado la polla. No me puedo coger a otra sin pensar en ella. Luego de algunas semanas de abstinencia mande a traer a Pamela, aunque se me paro no pude llegar al orgasmo por más que ella uso todos los métodos que quiso.
Pruebo la pasta esta buena pero no tanto como la que hace mi nana. Cuando llegue a Rusia lo primero que hare es comerme un buen plato de su comida, conocer a mis hijos y la luego comenzar ajustar cuentas con Willow.
—Todo está listo. Solo esperamos tu orden—me dice Lev sentado a mi costado.
