LIBRO II «CADENAS»
Las cosas ya no son como antes.
Willow ya no es la chica que quería salvar al mundo. No es la misma que se atrevió a jugar con un hijo de la mafia más sangrienta y poderosa que ha conocido, viendo desde sus propios ojos el alcance...
Perdón la demora amores, tenis muchas cosas y no podía actualizar, pero dicen que mejor tarde que nunca ¿no? Disfrútenlo mucho, a mi me encantó 🤭 No olviden sus votos y comentarios bebeeeeees✨🫠
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Alexey
Me echo el cabello que se posa en mis ojos hacia atrás cuando este me obstaculiza la vista. Sudor y sangre gotean por mi cuerpo. El calor es sofocante por primera vez desde que volví a Rusia y después de mucho tiempo pude dejar salir mi ira... con algunos de mis hombres y prospectos.
Los hombres a nuestro alrededor abuchean y gritan en victoria cuando le doy el último puñetazo que lo noquea mandándolo al suelo con la boca hecha mierda y el estómago reventado de moretones. Los limpiadores vienen por él y lo arrastran fuera del ring haciéndolo pasar por el pasillo de la vergüenza. Me trueno el cuello flexionando mis músculos y doy broncos en mi lugar para prepararme para mi próxima pelea.
En la cueva hay varias áreas. El sótano de este gran alcance donde se ha distribuido los lugares estratégicos para emplear varias tareas, no solo es un gimnasio sino también hay dos ring: uno donde los hombres más grandes entrenan para seguir manteniendo su estado físico y otro donde los prospectos que buscan orgullosamente marchar con los con los Ladrones de la ley que todos temian preparados para pruebas y peleas cuerpo a cuerpo que dan fe de si dan o no para la tarea.
Mi proximo competidor se hace esperar y me recuesto de las barandas esperando paciente a que uno tome el valor de retarme. Pocos pueden desafiarme, no por falta de fuerza, sino de agilidad. Me entro para ser el jefe de los vorys desde los 13.
Mi cuerpo ha soportado frio, calor, hambre, heridas, enfermedas y todas las porquerias que puedas pensar porque el padre de Mijail es demasiado soberbio y orgulloso como para tener nietos debiles. Aun recuerdo sus palabras cuando mando a que sus hombres nos llevaran a mi y Anton a La Jungla. Un purgatorio hecho internado donde nos entrenaron para ser letales.
No importaba nuestra posicion en la mafia porque a nadie le importa eso. Lo unico que querian era que cada uno muestre su valia. Yo tenia 11 y mi hermano 14 cuando esos hijos de puta nos golpearon y humillaron. Hicieron que pelearamos como animales con todo el mundo para tener un pisero pan en la barriga y nos enseñaron que primero matamos antes de que nosotros termienmos siendo los muertos. Salimos un año después listos para que ese viejo zorro pueda regodearse de que el futuro Phakan y Vor no tienen el puesto solo porque si.
Me pongo en mi lugar nuevamente cuando Nikolai Ivanov se abre paso en pantalonetas y descalso con las manos envueltas en vendas hacia mi. Todos se quedan en silencio sabiendo que ahora si que son los juegos de grande.
Una gran sonrisa se pinta en mis labios regocijado por tener a alguien digno por primera vez para pelear.
—¡Ivanov, amigo! Que gusto que ya hayas llegado—chocamos los puños cuando se posa frente a mi.
