Violentometro [Mattom]

[V] Humillar 🍂

Varias semanas habían pasado pero este día en especial era importante para la relación de los dos tortolitos, su aniversario de primer año como pareja, aunque esta fecha solo la recordaba el rubio o al menos él le tomaba importancia. El de morado revisaba en su móvil sitios a donde ir con su pareja, en sus aniversarios mayormente el tomaba la iniciativa ya que el contrario se le olvidaba la fecha, la pareja había tenido unos cuantos pequeños problemas en el pasado pero este aniversario lo iba a compensar, estaba seguro que todo saldría bien...

- ¡Tim! - el rubio apareció atrás de su pareja abrazando por la espalda. - ¿Sabes qué día es hoy?

- ¿El día en que dejaras de molestar? - el rubio río un poco y le dio un beso en la mejilla.

- No, tontito. ¡Es nuestro aniversario! -

Se separó del contrario para estar frente a él y tomarlo de las manos.

- ¡Podríamos salir a pasear afuera, yo invito! -

- Esta bien... - se resignó mientras soltaba un cansado suspiro.

El de azul recibió un suave beso en la mejilla para que luego el de morado se vaya a su habitación por sus cosas, el de cuencas vio como se marchaba mientras tocaba su mejilla donde había recibido el beso, dio otro suspiro y se tiró en el sillón con frustración, no quería salir pero solo lo haría para complacerlo ya que una pequeña parte de él le decía que se lo debía.

Luego de unos largos minutos de espera el rubio bajó vestido con camisa y sacó, fue directo a mostrarle a su pareja.

- ¿Así vas a ir? - una pequeña expresión de disgusto apareció en su rostro.

- Si, o tiene algo de malo...? -

- No, para nada, voy por mi cartera. -

Se levantó y fue directo a su habitación pero pasando por la cocina vio a sus amigos, solo que el noruego le lanzaba una mirada desafiante algo incómoda, esto Tom lo ignoró y fue rápidamente a su habitación. Este agarro una camisa del armario y la reemplazó por la sucia polera que estaba usando, agarró su cartera y se hecho un poco de perfume.

Volvía rápidamente, al cruzar por la cocina vio que ambos chicos lo veían confusos por la camisa y por el apuro.

- Eh... Chicos voy a salir con Matt, volvemos luego. - se quedó quieto un rato algo incómodo para despedirse.

- Esta bien, suerte. - comento con una sonrisa el de verde que bebía una coca cola.

- Suerte. - dijo el noruego que estaba sentado sobre la mesa de la cocina.

El de cuencas siguió su camino hasta llegar con su novio para salir de la casa tomados de las manos.

[♡]

La joven pareja se encontraba caminando por un parque mientras conversaba tranquilamente de cualquier cosa que veían.

- Quiero un helado - menciono su novio que a lo lejos veía una heladería.

- Pues vamos. -

Ambos fueron a la heladería agarrados de las manos para sentarse en una mesa para dos y pedir un helado cada uno. Ambos siguieron charlando normalmente hasta que les trajeron su helado.