031. mis mejores deseos

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feliz año a todos, os quiero



CAPÍTULO NÚMERO TREINTA Y UNO




ESOS MOMENTOS EN LOS QUE sientes que por fin tu vida va tomando un rumbo y las cosas ya están saliendo mejor que antes. Estaba en esa etapa y no podía estar más feliz.

  Hacía un par de días desde mi beso con Neymar, desde mi reconciliación con él y, aunque no lea habíamos contado nada, la pareja que estaba con nosotros vieron que ya no había tanta tensión.

  Con Ari también hablé ayer anoche y decidí que no tenía ningún tipo de sentido enfadarme con ella con tal de que algo así no se volviera a repetir. En conclusión, de momento estaba todo bien.

  Ahora el único problema es que eran altas horas de la mañana y yo aún tenía sueño, habiendo hecho planes. Kylian estaba comprando algunas cosas en el supermercado y Ari estaba en la habitación del chico viendo alguna serie mientras le esperaba.

  Unos brazos me rodearon por detrás, un escalofrío recorrió mi cuerpo sabiendo de quien venía ese repentino abrazo.

  — Buenos días, Mia — sonreí con amplitud mientras el brasileño dejaba besos en mi mejilla y en mi mandíbula.

  — Alguien se ha levantado de buen humor aquí y me está poniendo de buen humor a mí — me giré para no estar dándole la espalda. Haciéndose el engreído se encogió de hombros con una sonrisa tontorrona.

  — Dejémoslo en que soy completamente increíble.

  El chico besó la comisura de mis labios y yo negué mientras le miraba a los ojos. Una vez los mirabas con atención te atrapaban, te atraían a ellos y te resultaba imposible escapar.

  Desde hace dos dias, es decir la reconciliación, algún que otro beso tonto caía por ahí; sin embargo, siempre cuando estábamos solos porque ninguno sabía sobre esto. A veces ciertas dudas me pasaban por la mente pero era normal después de todo, porque yo le perdoné pero aún me cuesta volcar toda mi confianza.

  — ¿Dónde vas a ir que te has puesto tan guapa? — me reí ante tal comentario porque justo antes de estar en la barra de la cocina desayunando, estuve pensando en si realmente iba bien vestida.

  — He quedado con una amiga mía, vamos a ir a dar una vuelta al centro comercial, no volveré tarde — él asintió y dio un toquecito en mi nariz antes de ir a la nevera a coger algo.

  — ¿Llegarás para la hora de comer? Porque si llegas preparo algo, si no, que se jodan los otros y que dejen de estar como dos lapas — le llamé la atención y levantó los brazos.

  — Supongo que llegaré para comer, si es que no comemos allí. Te voy avisando de cualquier cosa y ya, así que atento.

  Termine de desayunar y fui al baño a lavarme los dientes para por fin dignarme a salir. Aún era pronto pero era mejor que me viera cuanto antes con esta persona.

Volví a salir del baño y vi a Neymar teniendo una animada conversación con Ari que parecía haber bajado de la habitación, me acerqué a ellos y abracé por la espalda a la gallega antes de besar su mejilla.

— Yo me voy ya, chicos. Os iré escribiendo para que sepáis cuando llego y esas cosas — Ari me devolvió el abrazo y aprovechando que no me veía le sonreí al brasileño, su respuesta fue guiñar el ojo.

Me separé de la chica y por fin caminé hacia el exterior. El viento azotó mi rostro y me encogí al notar el frío que corría por las calles de la ciudad.
Empecé a andar y metí las manos en mis bolsillos.

𝗙𝐔𝐈𝐌𝐎𝐒, 𝗦𝐄𝐑𝐄𝐌𝐎𝐒;; Neymar JRDonde viven las historias. Descúbrelo ahora