One Shots Futbolistas

73-. Nico Gonzalez

Estoy súper agobiada.
Día 24 por la mañana y la pastelería ha estado a reventar de gente recogiendo pedidos.

-Muchas gracias que tenga felices fiestas-digo con una sonrisa a la última clienta-.

Se marcha y yo suspiro.

Me quito el delantal y me dispongo a hacer caja aunque todavía no toca el cierre.

Acabo y la verdad que las ventas en estas fechas suben bastante.

Oigo la campana de la puerta y la boca se me seca al ver quienes entran.

-Hola Lua-dice Maria sonriente-¡que guapa estás!-.

-Tú que siempre me ves con buenos ojos-digo saliendo del mostrador para abrazarla-.

-Es que lo eres-dice una vez nos separamos-.

-Hola-dice un tímido Nico acercándose y dándome dos besos-.

Sigue igual de guapo que siempre.

-Bueno decidme que os pongo-digo pasando el mostrador-.

-Pues queríamos unos dulces y una tarta De Santiago-dice María-.

-Pues los dulces os los puedo poner pero tarta no tengo-.

-Te dije que teníamos que haber venido más temprano-le dice a su hijo que rueda los ojos fastidiado-.

-¿Es para hoy?-pregunto-.

-Si hija-dice-es que mi madre si no tiene su tarta de Santiago no es navidad para ella-.

Pienso y total no tengo nada que hacer.

-Buenos os puedo hacer una para esta tarde-digo-.

-Ay no te preocupes hija que tú también tendrás que prepararte-dice María apurada-.

-No tengo cena ni nada que hacer así que la hago y os la llevo sin problema-digo y María sonríe-.

-Está bien-dice-.

Pongo los dulces en una bandeja y le cobro también la tarta.

Se despiden de mi dándome mil veces las gracias y prometiendo vernos esta tarde.

Ahora si cierro y me voy a la cocina a preparar la tarta.

No a cualquiera le hubiera hecho el favor pero es María.
María era la mejor amiga de mi madre desde siempre,y la única que estuvo con ella y conmigo hasta su último aliento.
Por eso es que no tengo nadie con quien pasar las fiestas.
Mi padre abandonó a mi madre embarazada de mi por lo que familia parterna no cuento.
Y mi madre era hija única,y mis abuelos fallecieron poco después de ella dejándome sola en este mundo.

Termino de hacer la tarta y tras empacarla me voy a casa.

Como las sobras de ayer y me voy a la ducha dándome un relajante baño.

Salgo y me siento a hacer las cuentas del mes.

Hace un año que la pastelería es totalmente mia y puedo decir que me va muy bien.

Me da para pagar todos los gastos que conlleva y ganarme un buen sueldo.

Tras terminar miro la hora y son las cuatro y media.

Me visto y plancho el pelo y tras coger la tarta me voy a casa de los González.

Toco el timbre y tras esperar unos segundos me abre María.

-Ay cielo pasa-dice sonriendo-.

-No no vengo a dejaros la tarta y me voy-digo sonriendo-.

-¿Por que no te quedas a cenar?-dice-se que hemos perdido un poco el contacto pero sabes que siempre fuiste una más de la familia-.