Epílogo I

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Naruto caminaba por los pasillos de la universidad buscando a su novio y a Sakura, al parecer Hinata quería que se encontraran todos en un restaurante italiano muy cotizado propiedad de uno de sus tíos.

Pero el rubio no estaba del todo de buen humor, últimamente estaban demasiados ocupados con las clases, y sumando que Sasuke estaba el doble de ocupado ya que había comenzado a trabajar en una tienda de electrodomésticos, por ende ya no se veían tanto y eso lo dejaba sensible, lo extrañaba.

Pero si anoche han dormido juntos, llorón.

-Cállate.-Murmuró bajo, aunque era cierto, Sasuke dormía en su casa la mayoría de los días.

Soltó un suspiro relajado una vez que le entregó un trabajo a papel a su profesor, el cual muy amablemente le dijo que descansara, que hasta dentro de dos meses no tendría que entregar nada relacionado con las clases.

Caminó nuevamente ignorando la mirada de todos los estudiantes a su alrededor, recibió muy amablemente un regalo que el líder de su club de fans le había preparado, chocolates como siempre, era amable con él, ya que cuando todos dedujeron que estaba saliendo con Sasuke, su fan número uno había tomado mucha distancia y le confesó que le alegraba verlo feliz.

-Suerte en tus fotos de la nueva temporada, Naru.-murmuró sonrojado el chico pelinegro y de gafas.

-Gracias...-Rió disimulando su pésima memoria.-¿Taeoyn...?

-¡Sí! ¡Así me llamo!-Sonrió emocionado y sostuvo nuevamente su mochila.-Gracias por recibir mi regalo, hay suficientes para tu novio igual.

Naruto sonrió enternecido y observó al chico alejarse rápidamente.

Le gustaba eso, el respeto más que nada y que le regalaran chocolates aunque no los comiese, a Sasuke sin duda le encantarían.

Justo en el momento en que divisó a su novio y estaba por bajar las escaleras, unas voces de chicas desconocidas llamaron su atención.

-¿Sasuke y Naurto? Imposible.-Una carcajada incrédula salió de sus labios.

-Son doña frutilla y el rey de los nerds, a parte...

Ambas chicas se dieron la vuelta al sentir una risa detrás de ellas.

-Yo te dejaré la cara color frutilla si no te callas de una vez.

Con esas gafas Channel versión rosa, Naruto Uzumaki las rebajó siguiendo con su camino.

Ambas chicas quedaron blancas y el sonrojo de vergüenza se expandió por sus mejillas. No era un día para molestar el divo Naruto.

Sasuke a lo lejos alzó una ceja ante la mara cara que Naruto le había dedicado a unas chicas cerca de las escaleras, su corazón se alteró como de costumbre al ver lo bonito que estaba el rubio esa tarde. 

-Sasu~ .-Naruto sacó sus gafas y lo abrazó pasando sus brazos por el cuello del pelinegro.

-Hola, bonito.-Saludó sonriendo y devolviéndole el abrazo.-¿Todo va bien? He visto que le has dado tu cara cariñosa a esas chicas de allá.

Naruto rió, la "cara cariñosa" era una mezcla entre asco, superioridad y desprecio. Su cara favorita cuando estaba enojado.

-Lo he hecho.

-¿Por qué?

-Por feas.-Respondió obvio.

Sasuke rió y decidió tomar su mano para empezar a caminar, podrían hablar de la cara cariñosa en otro momento.

-¿Y Minho?

-En el estacionamiento, no debiste pedirle que me buscase al trabajo.

-¿Por qué no? Estabas lejos como para caminar hasta aquí, además.-Se abrazó a si mismo y tembló.-Hace mucho frío.

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𝐸𝓋𝑒𝓇𝓎𝓉𝒽𝒾𝓃𝑔 𝒾𝓈 𝓅𝒾𝓃𝓀 $ 𝒮𝒶𝓈𝓊𝓃𝒶𝓇𝓊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora