Lo que quieres escuchar... 20

448 38 9
                                    

|Al día siguiente|

Miento si digo que no dormí con una tranquilidad inmensa, me sentía bien, algo dentro de mí sentía que no le hacía falta nada, los brazos de Christopher aún me tenían pegada a su cuerpo, la mente me decía que Adrien aún está esperando por mí y que Christopher no merece que yo esté con él y haya permitido que sus besos me embriagaran, sin embargo el corazón, él me decía que lo correcto será siempre amar a quien me ame sin obligarme a nada, y honestamente no tenía claro nada, no quiero lastimar a nadie, siento que voy a volverme loca.

- Dime que aún puedo besarte y que no te arrepientes de estar aquí - Dijo Chris de pronto llamando mi atención, él aún tenía los ojos cerrados.
- ¿Besarme es lo que quieres? - Pregunté con una pequeña sonrisa aunque no pudiera verme.
- ¿No quieres comprobarlo? - Mencionó mientras sus labios se acomodaban para dar un beso.

¿Negarme? Bueno, eso no estaba en mis planes, así que sin pensarlo mucho me incline hacia él y lo besé, lo besé sin miedo, sin obligación, sin la necesidad de separarme.

- No me arrepiento de estar aquí - Dije cerca de sus labios.
- Gracias por quedarte bonita - Comentó.

Lo primero que mis ojos vieron al despertar fue a él, lo primero que sus ojos están viendo es a mí, y ese café claro brillar por verme me estaba combinando sensaciones.

- Seguro no recuerdas todo lo que dijiste ayer - Dije basilante.
- ¿Acaso dije que podría esperar una vida para que puedas decirme te amo? Oh, no, creo que dije que quiero que te quedes así conmigo siempre, ¿O qué fue lo que dije? - Mencionó divertido.
- Ay que bobo eres - Respondí dándole un ligero golpe en el pecho.
- Te lo dije bien, estaba borracho pero no imbécil, jamás podría olvidar algo que tenga que ver contigo - Afirmó.
- ¿Estás seguro? Porque prometiste que desayunariamos juntos - Dije divertida.
- Mm, quizá eso sí lo olvide pero no importa porque acabas de recordarmelo, ¿Te parece si pedimos desayuno a domicilio y platicamos? - Propuso.
- Que buena idea, me parece bien -.

Chris acarició mi nariz con la suya y besó mis labios para después levantarse de la cama y tomar el celular para pedir el desayuno.
Mientras tanto yo fui al baño, me lave la cara y los dientes con un cepillo que Chris dejó para mí luego de que él entró, debo confesar que nada pasaba por mi cabeza, solo estaba Christopher y lo que está pasando entre nosotros.

(...)

- Vamos bonita, la comida llegó - Me dijo luego de haber esperado un tiempo.
- Ya voy -.

Caminé con él hasta la mesa y entonces comenzamos a degustar los alimentos.

- Ésto está delicioso - Dijo mientras tomaba un poco de jugo.
- Para ti todo es delicioso Chris - Dije divertida.
- Bueno pero en primer lugar estás tú - Comentó.

Christopher tenía ese don de sonrojarme cuando él quería y como quería.

- ¿Te puedo preguntar algo? - Inquirí.
- Claro bonita, pregúntame -.
- ¿Por qué estabas tan molesto ayer? Te portaste horrible con Adrien - Me atreví a decir.

Claro que podría imaginar qué pasaba después de que me quedé a dormir con él y dejé que sus brazos y besos me hicieran sentir bien, pero tenía que escucharlo salir de sus labios.

- Adrien no me cae nada bien - Admitió sin preámbulo alguno.
- Vaya, que directo fue eso - Dejé salir.

Creí que quizá le daría vueltas al asunto o al menos diría que lo tolera.

- No voy a mentirte, no quiero hacerlo ni tengo necesidad, a pesar de que estás aquí conmigo y de que quizá aún tengas un poco de sentimientos hacia mí, tengo perfectamente entendido que ese tipo es a quien amas, ¿No es así? - Preguntó sin rodeos.
- Chris - Dije incómoda.
- No tienes que mentirme para hacerme sentir bien, te lo digo en serio - Aseguró.

Y estaba segura de que dice la verdad.

- Anoche paso todo, todo lo que yo necesitaba para recordar y confirmar lo que tus caricias, lo que tus besos me hacen sentir, necesitaba tenerte así desde que llegaste pero no me atrevía a pedirte algo que no merezco, así que gracias por tomar la iniciativa - Dijo tomando mi mano y acariciándola.
- Chris, mi mente está confundida, mi corazón aún más, quisiera decirte lo que quieres escuchar pero no puedo - Admití afligida.

Christopher's POV.
Y aunque me costara trabajo tenía que aceptarlo, sentirla así de cerca me hizo volar tan alto, me hizo sentir en el verdadero paraíso, pero tarde o temprano la realidad vendría a atormentarme.

- En verdad me costó trabajo dejar atrás lo que alguna vez sentí por ti, y decirte que todo está bien y que jamás te he dejado de amar sería mentirte, porque aunque besarte, abrazarte, estar contigo me haga sentir bien, no puedo ni quiero decirte que estoy completamente a tus pies para dejar que hagas lo que quieras con mi amor - Mencionó.

Hacerlo sería como un suicidio para ella, el segundo intento.

- No sé que pueda pasar con Adrien, solo sé que mi corazón alberga mucho por él, y no te lo digo para lastimarte, solo quiero que me entiendas un poco, quisiera confiar en ti pero no sé como - Confesó.

Sus ojos lo decían todo, se siente afligida, siente tanto pesar que no sabe cómo hacérmelo saber, y no voy a ponerla a decidir justo ahora, porque al final ambos sabemos que Adrien va a ganar.

- Yo lo sé, de verdad comprendo perfectamente, ___ no tienes que ponerte mal por mi culpa, lo que dije es en serio, voy a esperar hasta que te sientas segura y confíes de nuevo en mí, hasta que tengas la certeza de que lo que siento por ti es sincero y real, tan real como la felicidad que siento de verte usar mi ropa otra vez - Dije.

Ella me sonrió con ternura y acaricio los nudillos de mi mano.

- Gracias por entender Chris, lo que menos quiero es herirte -.
- Y no lo haces porque estás siendo honesta, más bien gracias a ti por estar con un tonto que no acepta perderte, que solo quiere una oportunidad más para recuperarte -.

|¿Dónde está el amor?| Christopher Vélez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora