|¿Dónde está el amor?| Christopher Vélez

Desearte incluso un buen amor... 11

- ¿En serio estuvieron en el mismo lugar, hablaron y comieron juntos? - Preguntó Richard sorprendido una vez que les comenté sobre la idea de ___ esta noche.
- No juntos, estábamos Erick, ella y yo - Respondí.
- Vaya, me cuesta trabajo creerlo - Comentó Zabdiel.
- ¿Por qué? - Pregunté confundido.
- Pues no puedo creer que después de lo que le hiciste todo eso haya pasado como si nada, además, ¿Desearte incluso un buen amor? Hermano, esa mujer es increíble - Aseguró.

¿Cómo podía contradecirlo? No decía mas que la verdad y honestamente eso me hacía sentir mal porque estaba seguro de una sola cosa, ___ ya no era para mí.
Solté un suspiro resignado.

- Les confieso que al principio creí que todo lo decía con maldad o algún rencor hacia mí, pero mientras todo fluía ella no dejaba de sonreír ni de mostrarme esa sinceridad natural que brota por sus poros, y a pesar de todo siguió demostrandome que espera lo mejor incluso para un tonto que la lastimó - Comenté.
- No te atormentes hermano, al final las cosas pasan por algo, ella es feliz y tú también - Dijo Richard.

¿En verdad yo lo era? Ahora comenzaba a preguntarmelo.

- Y claro que también queremos verla, así que esta noche nos vamos de fiesta - Mencionó Zabdiel.

(...)

Pasaban las horas y por fin había llegado el instante de reunirnos en el antro del momento, ya habíamos hecho una reservación así que no tendríamos que hacer largas filas.
Erick dijo que él llegaría con ___ así que Zabdiel, Richard y yo los veríamos afuera del lugar.
Una vez que estuvimos listos tomamos nuestra cartera y celular, yo las llaves del auto y sin más salimos.
Confieso que estaba ansioso por ver a ___, ¿Será la misma de siempre en las fiestas?

- ¿Puedo preguntar algo? - Cuestionó Zabdiel.

Lo miré de reojo por medio del espejo retrovisor.

- ¿Qué pasa? - Inquirí.
- No sientes nada por ella, ¿Verdad? -.

Fruncí el ceño confundido.

- ¿A qué viene tu pregunta? - Cuestione.
- Bueno, no creo que pase desapercibida una vez que entremos, ___ es hermosa en verdad y supongo que la verás ligar o al menos bailar con otros chicos, ¿No sientes nada? - Insistió.

Mierda, en eso no había pensado, jamás se me cruzó por la mente que ella no tiene límite alguno para ligar o salir con quién le plazca, así sea en mis narices.

- Honestamente no había pensado en eso, pero tranquilo, ambos somos libres y lo que pasó ya forma parte del pasado, estaré bien - Afirmé.
- Genial, que bueno que lo tomes así - Dijo Zabdiel.

Es que ni yo mismo estaba seguro de lo que había dicho, ¿En verdad podré verla sin que nada me afecte? Si bien es verdad que ya ha pasado bastante tiempo, también es cierto que mi cariño por ella nunca se fue, y aunque no me enamoré, ___ me gustaba, y me gustaba mucho.
Cuando llegamos al lugar dejé las llaves al ballet parking y nos acercamos a ___ y Erick.

- Zab, Rich - Dijo ___ con una sonrisa para rápidamente caminar hacia ellos y abrazarlos tiernamente.
- ___, ¿Cómo estás? Que linda te ves -.
- Muchas gracias Zab, todo a ido genial, y ya me contaron que con su carrera también -.
- No te lo puedo negar, todo va de maravilla -.
- Me alegro mucho, ¿Qué me dices tú Rich? - ___ lo miró.
- Todo increíble nena, me alegra mucho volver a verte, luces hermosa -.
- Gracias Rich, me encanta poder verlos así de guapos, ¿Qué les parece si entramos? - Propuso.

Todos asentimos.
Antes de darse la vuelta ella me miró y me regaló una de sus lindas sonrisas, que por supuesto no dude en corresponder, ahora podía verla mejor, se veía realmente hermosa en ese atuendo de dos piezas, su cabello perfectamente liso y sus zapatillas altas, que honestamente le daban una presencia increíble.
___ tomó del brazo a Erick y sin más nos adentramos al lugar, dimos nuestro nombre y nos llevaron hacia nuestra mesa en la zona VIP, todo se veía bastante animado, sin duda nos hacía falta salir de fiesta.

- La primer ronda va por mi cuenta - Dijo ___ con una sonrisa, así que pedimos nuestros tragos y esperamos a que los trajeran - La noche es larga nenes, pongan atención que ya tienen miradas encima -.
- ¿Haz visto como te miran ___? Te comen con la mirada - Mencionó Zabdiel.
- Ya tendremos tiempo de observar bien - Respondió entre risas.

Y vaya que la noche era larga, tenía que mentalizarme para lo que venía.

(...)

Pasados unos cuantos tragos la música se ponía mejor, habíamos invitado a algunas chicas a nuestra mesa, así como también algunos chicos que no le quitan la mirada de encima a ___, no sabía cómo sentirme al respecto, pero entendía perfectamente que no tenía el derecho de mostrar reacción alguna.

- ¿Bailamos? - Me preguntó la pelinegra que estaba cerca de mí.
- Claro hermosa, vamos - Acepte.

Tomé su mano y la pegué a mi cuerpo una vez que nos pusimos de pie.
Entonces nos empezamos a mover al ritmo de la música.
La verdad es que la chica no es nada fea, llamaba la atención de cualquiera que la viera incluso de reojo, su cuerpo estaba perfectamente curveado.
Estaba centrado en ella cuando escuché vagamente la risa de ___, así que levanté la mirada y la ví bailando, hablando y riendo cómodamente con uno de los chicos que estaba con nosotros, él la tomaba por la cintura mientras dejaba algunas caricias en ella, el rostro de ___ estaba lo suficientemente cerca del suyo como para que ambos pudieran sentir sus respiraciones, ¿Cómo es qué debía sentirme al respecto? Una nueva versión de ella estaba siendo disfrutada por alguien más y eso me daba mucho en que pensar aunque no quisiera.

- ¿Te gusta? - Preguntó la pelinegra.

Me sacó de mis pensamientos provocando mi risa nerviosa.

- ¿Quién? - Pregunté haciéndome el tonto.
- Pues ___, la única chica que no has dejado de mirar durante toda la noche - Dijo obvia.
- ¿Qué? Claro que no - Negué.
- Christopher, está tan entretenida que no ha notado tu fuerte mirada en ella, ¿Por qué no te acercas si te gusta? Él parece llevar todas las de ganar - Mencionó señalando con un movimiento de cabeza al chico que estaba con ella.